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Los papeles de Bárcenas

Rajoy se olvida de la responsabilidad política

El PP no confía en que Rajoy entre al fondo del 'caso Bárcenas'

Roberto Díaz

Varias semanas después de la publicación de los sms enviados por Mariano Rajoy al extesorero del PP Luis Bárcenas, de la aparición de nuevos documentos sobre la supuesta financiación ilegal del Partido Popular y de la presunta vinculación del presidente del Gobierno por el cobro de sobresueldos cuando era ministro de Aznar, al fin habló Rajoy en el Senado sobre el caso Bárcenas. Y dejó claro que aunque se había equivocado en confirmar en Luis Bárcenasno pensaba dimitir porque no ha cometido nada ilegal y porque no considera que deba asumir ninguna responsabilidad política.

Rajoy asumió este jueves que había que “pedir la responsabilidad política por hechos que se demuestren que han existido, por hechos que resulten ciertos”. Y consideró que a él no le afectaba porque las acusaciones vertidas por Bárcenas no son ciertas. ¿Es correcta la interpretación que hace Rajoy del concepto de responsabilidad política?

En las actuaciones de Mariano Rajoy existe una responsabilidad personal de sus actos y una responsabilidad política como secretario general del PP y como presidente del Gobierno. Además, habrá una responsabilidad penal si el juez dictamina finalmente que las acusaciones de Luis Bárcenas sobre el cobro de sobresueldos en el seno del PP son ciertas.

El catedrático de Ciencias Políticas y miembro del Comité Ejecutivo de Transparencia Internacional, Manuel Villoría, señala que la intención de Mariano Rajoy en su discurso fue ligar la responsabilidad política con la responsabilidad penal: “Rajoy quiso diferenciar dos realidades de forma intencionada. Una política y otra penal. Pero no olvidemos que un caso puede prescribir judicialmente, pero eso no quiere decir que no tenga una responsabilidad política, como sucede en este caso”.

Los partidos de la oposición han dejado claro que el presidente del Gobierno no cuenta con su apoyo. Aunque la mayoría absoluta del PP hace imposible que esa pérdida de confianza quede patente en el parlamento. Una situación, que el catedrático de Derecho Penal, Joan Josep Queralt, explica a infoLibre: “Al tener la mayoría absoluta, el parlamento no se va a relevar contra su jefe de gobierno. Además actualmente las bases de los partidos no pintan nada. Sólo existen las cúpulas, es decir cinco o seis personas que controlan todo el partido. Así es imposible que en España se pueda vivir algo parecido a lo que le ocurrió a Helmut Kohl en Alemania”.

“Cometí el error de creer a un falso inocente, pero no el delito de encubrir a un presunto culpable”, afirmó Mariano Rajoy en su intervención sobre su relación con el extesorero del PP Luis Bárcenas. A pesar de ello, Rajoy le mantuvo en la cúpula del partido después de su imputación por el caso Gürtel. Asimismo, mantuvo contacto con él hasta el mes de marzo, como acreditan los sms publicados por El Mundo.

Rajoy se olvida de las responsabilidades políticas pero el sistema jurídico español señala dos términos como son in vigilando e in eligendo ligados directamente a la responsabilidadin vigilandoin eligendo. Su regulación viene formulada en el artículo 1903 del Código Civil.

Esta obligación se establece cuando entre el autor material del hecho [Luis Bárcenas] y el responsable [Mariano Rajoy] hay un vínculo tal que la ley puede marcar que si hubo algún tipo de daño, éste debe atribuirse al descuido o falta de vigilancia del responsable. El fundamento de esta responsabilidad es la presunción de la culpa, que puede consistir en una falta de vigilancia–culpa in vigilando– o en una desacertada elección –culpa in eligendo–.

Ofensiva de la oposición para que Rajoy explique sus “falsedades” sobre Bárcenas

Mariano Rajoy cumple ambos preceptos. Fue él la persona que ascendió a Luis Bárcenas de gerente a tesorero del PP en 2008. Es decir, erra en su elección, culpa in eligendo. Además es responsable de no haber tenido un control férreo sobre la actividad del extesorero dentro del partido, culpa in eligendo.

Villoría apunta que estas dos modalidades jurídicas deberían llevar ligada responsabilidades políticas: “Elegir mal y no haber llevado un control sobre Bárcenas siempre lleva una responsabilidad política. Cuando asumes un cargo importante, como era el de secretario general, deben conocer los riesgos que tiene". 

Por su parte, Queralt diferencias tres escenarios a la hora de una posible depuración de responsabilidades políticas: el partido, el parlamento y las elecciones. “Rajoy se aferra al poder. El partido controla a los dirigentes y por ello nunca se van a revelar contra él. La otra opción es el parlamento, pero es imposible que haya un cambio al tener mayoría absoluta. Sólo quedarían las elecciones, pero para ello quedan tres años. Aunque si aumenta la presión es muy complicado que cumpla todo el mandato. Es un juego al desgaste”, concluye Queralt.

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