La nueva legislatura
Las fórmulas que explorarán PSC y En Comú Podem para desbloquear la situación en Cataluña
El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, propuso este miércoles al número uno del PSOE, Pedro Sánchez, que los líderes del PSC y En Comú Podem –Miquel Iceta y Xavier Domènech respectivamente– trabajen juntos para "avanzar propuestas" que acerquen las posturas de socialistas y morados sobre la situación en Cataluña. Esos contactos aún no tienen fecha, pero los dos partidos destacan que hay voluntad de que se produzcan.
Iglesias dejó claro que la posición de Podemos no ha cambiado y que sigue apostando por un referéndum de independencia en Cataluña –"nuestra postura sigue siendo la misma de siempre", aclaró el líder de la formación morada–, pero también apuntó que "el protagonismo de dos fuerzas catalanas" y "hermanas" de PSOE y Podemos sería "una forma razonable de avanzar en la buena dirección".
Sánchez, según afirmó Iglesias, no se negó a esas conversaciones bilaterales entre los dirigentes catalanes. "Me ha dicho que le parece bien", sostuvo el número uno de Podemos. El candidato socialista, en su comparecencia ante los medios y preguntado por ese posible diálogo entre Iceta y Domènech, puso el acento en que PSC y PSOE comparten "una misma hoja de ruta": reformar la Constitución y avanzar hacia el Estado federal.
Contactos discretos
Fuentes del PSC consultadas por infoLibre destacan que "no hay fecha" programada a día de hoy para esas negociaciones en Cataluña. "La intención es que [Iceta y Domènech] se vean –añaden–, pero no sabemos cuándo será ni si la reunión será pública o más discreta". Un dirigente de la ejecutiva del partido cree más probable lo segundo y, de hecho, dice que Iceta y Domènech se han reunido en cuatro ocasiones desde las generales y que dos de esas citas no trascendieron a los medios.
"Domènech e Iceta no han hablado todavía", apuntan por su parte fuentes de En Comú Podem. En la confluencia catalana impulsada por Podemos para las pasadas generales prevén que ambos líderes "hablen este jueves o viernes" y que, a lo largo de la próxima semana, pueda producirse esa primera reunión cuyo formato tampoco está cerrado: podría ser un cara a cara o incluso un encuentro con equipos de trabajo, indican.
Este jueves, en una entrevista, Domènech enfatizó que Podemos defiende el referéndum y alabó que Iceta y la cabeza de lista socialista por Barcelona en las generales, Carme Chacón, se hayan mostrado "favorables al derecho a decidir a posteriori de un referéndum constitucional". En los últimos días, ambos dirigentes del PSC han barajado la posibilidad de una "ley de claridad" que abriera la puerta a un referéndum sobre la secesión con una pregunta inequívoca.
Chacón, sin embargo, aclaró también este jueves en otra entrevista que esa opción no estará encima de la mesa y recalcó que la "propuesta política" de PSOE y PSC es una reforma constitucional en sentido federal. La diputada catalana subrayó que esa reforma sería votada en referéndum y que en Cataluña, además, habría otro referéndum para aprobar el nuevo Estatuto de Autonomía "consecuencia" de la nueva Constitución federal.
Votar: ¿Antes o después?
Un cargo de la dirección del PSC explica que el principal punto de desencuentro con la lista catalana de Podemos es precisamente "el orden de los factores" que, en este caso, "sí altera el producto", bromea. "Nosotros proponemos aprobar primero la reforma constitucional y luego votar", insiste. Esta fuente asegura que, en privado, incluso los dirigentes de En Comú Podem admiten que "la reforma, en sí misma, ya es positiva".
Sólo si la reforma constitucional se aprobara en las Cortes Generales y los catalanes la rechazaran en referéndum, añaden los socialistas catalanes, entraría en juego la carta de una ley de claridad a la canadiense. "En esa ley se dejarían claros aspectos como con qué nivel de participación y aprobación y con qué preguntas puede haber un referéndum de independencia en Cataluña", asegura un cargo de la dirección.
Estas mismas voces dejan claro que contemplar esa opción no implica que el PSC haya variado su posición: los de Iceta defienden el no a la independencia y la reforma federal como solución al problema de encaje catalán. "Pero si los catalanes rechazaran la reforma constitucional –comentan– tendríamos un problema distinto y un escenario distinto, y en ese punto tendríamos que asumir que hay que abrir otra vía".
Preguntados por si el PSOE comparte esa propuesta, los socialistas catalanes responden que comparten el "diagnóstico de la situación" con Ferraz y también la apuesta por la reforma federal. Sobre la idea de la ley de claridad como último recurso añaden que la dirección federal "conoce la propuesta", que "no sería descabellado que la pudiera llegar a asumir" y que "no perciben" que despierte "reticencias".
En cualquier caso, fuentes de la dirección del PSC consultadas por este diario apuntan que el "peso" de la negociación con Podemos debe llevarlo al PSOE y que el diálogo entre Iceta y Domènech únicamente se plantea como una "ayuda", no como el elemento "determinante" para una posible formación de Gobierno a nivel nacional. Por último, avanzan que pondrán otras propuestas sobre la mesa, como la posibilidad de que el Estatuto de Autonomía de Cataluña pasara a denominarse "Constitución de Cataluña" en el marco de un Estado con una "lógica federal".
Referéndum con tercera vía
Desde En Comú Podem, por su parte, explican que su preferencia es "un referéndum con una pregunta binaria y clara: sí o no a la independencia". Domènech, sin embargo, ha comentado en varias intervenciones en los medios la posibilidad de que se incluya una tercera respuesta en esa consulta, la de la reforma de la constitución en sentido federal.
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Fuentes de la confluencia catalana de Podemos aseguran que "no hay ninguna propuesta perfilada en ese sentido". "Domènech contesta eso porque los periodistas preguntáis cómo serían las preguntas y las posibles respuestas en ese referéndum", asegura un cargo próximo al portavoz de En Comú Podem.
En la formación catalana de Podemos afirman que irán a negociar con el PSC sin tener "todo cerrado ni pensado" y que, "si incluir una tercera respuesta ayudara a que el PSC asumiera la propuesta del referéndum", no se cierran a ello. Sin embargo, admiten la distancia que existe hoy por hoy entre las propuestas de los morados y los socialistas.
Los socialistas catalanes, hoy por hoy, no aceptan la idea del referéndum previo a la reforma constitucional incluso si se incluye esa reforma como posible respuesta en la consulta: "Eso tiene sus peligros –dice un miembro de la ejecutiva preguntado por este diario–. ¿Qué pasa si la gente vota por la reforma constitucional en ese referéndum y luego no le gusta la reforma que se aprueba?".