También hay buenos resultados en PISA
Los resultados nacionales del informe PISA han mostrado una decepcionante evolución, pero no todo ha sido un desastre. Los conseguidos en lugares donde la trayectoria es correcta han sido buenos. Y hay que destacarlos.
Asturias, que ha cuidado a su profesorado con una formación continua puntera, a la vez que permanece desde hace cursos con unas ratios de alumnos por aula reducidos, no solamente no ha bajado sino que ha mejorado su posición. Además mantiene muy bajos niveles de segregación. Los expertos señalan que con estas acciones, “remando todos en la misma dirección”, el Principado de Asturias entra dentro del top diez internacional. Datos similares los tenemos en Cantabria y en Castilla y León.
Los resultados globales han mostrado una caída nacional que dice que los errores de Cataluña y País Vasco han situado a ambas comunidades educativas por debajo de la media cuando antes se encontraban en puestos altos de la clasificación. En materias como Matemáticas, Ciencias y comprensión lectora las tres comunidades del norte muestran buenos resultados, al menos mejores que los obtenidos en la anterior evaluación de hace cinco años. Y en casos concretos mejoran el mito de Finlandia, país que destaca en los ránkings y subraya que lleva más de setenta años con el mismo plan de estudios (lo contrario que en España, donde se dice que cada ministro/a de Educación implanta su plan y su ley educativa).
De los datos sacados del informe PISA, voces de la Universidad de Oviedo destacan la labor del profesorado e indican que “el trabajo desarrollado ha sido muy bueno”, que muchos centros participan en proyectos europeos y, en varios casos, van “un paso por delante de la universidad”. Así, estas tres comunidades no solamente resisten la caída nacional, sino que suben ligeramente.
Los resultados globales han mostrado una caída nacional que dice que los errores de Cataluña y País Vasco han situado a ambas comunidades educativas por debajo de la media cuando antes se encontraban en puestos altos de la clasificación
La escasa segregación —Asturias aboga por la escuela pública, la coeducación y mantiene una política restrictiva en cuanto a educación concertada— y el número de alumnos por aula contribuyen a la posición alta de estas comunidades. En ellas disminuye la población pero la ratio por aula muestra la diferencia. El Principado mantiene un máximo de 25 alumnos en 4º de la ESO, cinco menos de lo que exige la LOMLOE (Ley Orgánica por la que se Modifica la Ley Orgánica de Educación, también conocida como la Ley Celaá, ahora en vigor). Y reducirá de forma gradual ese máximo en todas las etapas las ratios de 25 a 23, empezando el próximo curso por primero de Educación Primaria. Las tres comunidades sostienen una inversión pública por alumno superior al promedio de los entes autonómicos, con un importante peso de la enseñanza pública y la escuela rural, que estas administraciones y los ayuntamientos protegen pese a su coste para intentar frenar la despoblación. Los colegios rurales asturianos se mantienen abiertos a partir de tres alumnos.
Fuentes universitarias astures destacan la importancia que se le da en la política de comunidad a la educación, el que los profesores se impliquen y se reconozca su labor, “con una formación inicial y permanente” y que la Universidad aporte su parte en la preparación de los futuros docentes. En Singapur, que figura como el primer Estado en el ránking de los 81 evaluados, señalan que “son los artífices de nuestra nación quienes ayudan a construir nuestro país”. Y destacan que la educación es inversión, no es un gasto.
La tradición asturiana en materia de educación lleva años en puestos de cabeza de los ránkings. He de recordar que ya destacó en Europa hace décadas cuando la Unesco señaló a La Felguera en 1961 como el "kilómetro más culto de Europa".
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Fernando Granda es socio de infoLibre.
