Refugiados políticos
El Eurobarómetro constata la división en la UE por la crisis de refugiados
El 78% de los españoles es partidario de que los países de la UE tengan que aceptar cuotas obligatorias de inmigrantes, un dato que es ligeramente superior a la media comunitaria (75%). Así se desprende del Eurobarómetro hecho público este jueves, que refleja las enormes diferencias con las que los países europeos están digeriendo la crisis de refugiados que afecta, en especial, a los vecinos del Este.
Por ejemplo, mientras que en Alemania, Países Bajos, Luxemburgo y Chipre cerca del 80% de los ciudadanos cree conveniente que las soluciones a esta crisis se decidan en las instituciones europeas, ese porcentaje se reduce al 40% en Estonia, Polonia y Eslovaquia. En España son el 79% de los encuestados y en el conjunto de la UE el 66%.
La división queda reflejada también al preguntar cómo deberían repartirse los refugiados que consigan llegar a las fronteras. El 97% de los alemanes prefieren un reparto igualitario entre los países miembros, dato que se reduce al 31% en Eslovaquia y República Checa. En el conjunto de la UE son un 78% los que aplauden esta gestión, y de ellos, un 75% dice estar a favor de establecer cuotas obligatorias.
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Crece la preocupación por el terrorismo y la inmigración
La encuesta subraya que desde 2013 ha crecido "de forma considerable" la preocupación por el terrorismo y la inmigración. Si hace cinco años eran un 14% los que decían entender la inmigración como el mayor desafío de la UE, ahora son el 47%. El ascenso es menor pero igualmente significativo si nos referimos al terrorismo, que en 2013 preocupaba al 11% de los europeos y ahora lo hace al 26%. Preocupaciones estas que siguen estando por debajo del desempleo, prioridad para el 49%.
Las conclusiones del Eurobarómetro se han alcanzado tras entrevistar a 28.150 europeos, mayores de 15 años, entre el 19 y el 29 de septiembre. No fueron precisamente estos los días en que mayor atención mediática se prestó al drama de los refugiados, de hecho, atrás quedaba ya la fotografía de Aylan, el niño sirio de tres años que murió ahogado frente a las costas turcas.
