LA PORTADA DE MAÑANA
Ver
El Gobierno responderá a la maniobra de Feijóo y Weber contra Ribera "con datos" y "sin caer en el barro"

Vía libre para que Calviño presida el Banco Europeo de Inversiones

La vicepresidenta primera y ministra de Economía, Comercio y Empresa, Nadia Calviño, junto a la vicepresidenta cuarta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.

Nadia Calviño, vicepresidenta y ministra de Economía, volverá casi seis años después a las instituciones europeas. Si Pedro Sánchez la fichó desde la Dirección General de Presupuestos de la Comisión Europea, ahora Calviño tiene los votos suficientes para convertirse en enero en la próxima presidenta del Banco Europeo de Inversiones, una institución de la Unión Europea con sede en Luxemburgo. Sucederá al alemán Werner Hoyer, quien ha tenido un largo mandato de 12 años. Calviño, la cara más europea de los gobiernos de Sánchez, podría jubilarse en el BEI de seguir los pasos de Hoyer, con lo que España contaría durante años con uno de los altos cargos europeos.

El nombramiento debería ser oficial este viernes cuando el ministro de Finanzas belga, Vincent Van Peteghem, confirme a sus homólogos que Calviño es la candidata con más apoyos, suficientes para hacerse con el cargo. Necesita una mayoría de Estados miembro que sumen el 68% del capital del BEI. Con Italia todavía sosteniendo a su candidato, Daniele Franco, y sin que la danesa Margrete Vestager tenga el apoyo de ningún grande, Van Peteghem debe haber cerrado para Calviño los votos de Alemania (el canciller Scholz lo confirmó a Sánchez en la cumbre de los socialistas europeos en Málaga) y de Francia.

La Vanguardia adelantó a primera hora de la tarde del miércoles que Van Peteghem, encargado del proceso (Bélgica ostenta la presidencia rotatoria del comité de dirección del BEI) llegó a la conclusión de que Calviño es “la candidata con más apoyos”. El ministro belga, conservador flamenco, lanzó la semana pasada lo que se conoce como “procedimiento de silencio”. Comunicó a sus homólogos que la próxima presidenta sería Calviño salvo que hubiera las suficientes voces en contra entre ellos para frenar el proceso. El belga ha llegado a la conclusión una semana después, ante un Ecofin (ministros de Economía y Finanzas de los 27) de que no existe esa minoría de bloqueo e invitó a los gobiernos que todavía sostenían a sus candidatos a que los retiraran, por lo que Calviño será la elegida.

La salida de Calviño estaba prevista desde la formación de Gobierno en España. El presidente dijo en una entrevista este lunes en la Cadena Ser que sería “una enorme pérdida en términos personales, no sólo políticos”. Calviño, tras cinco años en los que fue pasando de eurócrata de perfil técnico a, poco a poco, ganar colmillo político, decide volver a las instituciones europeas.

En Madrid deja la economía grande europea que más creció desde 2021 y que más crecerá, según la Comisión Europea, en los próximos dos años.

No pudo ganar la presidencia del Eurogrupo cuando los ministros de Finanzas de los países señalados por sus prácticas fiscales elusivas prefirieron elegir a uno de los suyos, el irlandés Paschal Donohoe, para el cargo. También ha protagonizado alguna rencilla, mediatizada al extremo, con la vicepresidenta y ministra de Trabajo Yolanda Díaz.

Qué hace exactamente el BEI

Díaz acusa a Calviño de defender un "modelo de recortes" para los parados de larga duración

Díaz acusa a Calviño de defender un "modelo de recortes" para los parados de larga duración

El BEI, creado en 1958, se encarga de financiar proyectos (principalmente de infraestructuras y raramente por encima del 50% del coste) en la Unión Europea, de apoyar el proceso de integración de los países candidatos y ha ido creciendo como herramienta de préstamo europeo a nivel mundial. Con más de 4.000 empleados (casi 3.000 expertos financieros), presta unos 60.000 millones de euros al año y tiene mejor posición financiera que el Banco Mundial.

Llega tanto al sector público como al privado e incluso a pymes, que pueden acceder a financiación del BEI a través de prestamistas intermediarios, como bancos privados. El BEI no depende del presupuesto de la Unión Europea, sino que se financia por sí mismo en los mercados internacionales y con el capital aportado por los Estados en función de su peso económico en la Unión Europea en el momento de su adhesión. Tiene la mayor calificación crediticia de las agencias de rating, por lo que puede pedir prestado muy barato y prestar todavía en mejores condiciones que la banca privada. Tras el Brexit, los demás Estados miembro hicieron aportaciones para rellenar el hueco que dejó el Reino Unido.

El BEI tiene bajo su manto al Fondo Europeo de Inversiones, una especie de brazo dedicado al capital riesgo que apoya a empresas. Y el Instituto BEI, creado en 2012 para apoyar actividades sociales, culturales y académicas.

Más sobre este tema
stats