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Celos, avaricia, asesinato... y fenicios

Teresa Argilés (El libro durmiente)

El libro durmiente comenzó su andadura como club de lectura en junio de 2003. Su nombre hace referencia a la necesidad de rescatar los valores y principios que duermen en el seno de los libros. El libro durmiente se define como una entidad creada sin fin de lucro. Nuestra acción adquiere la condición de voluntariado cultural. Desde el año 2012, correspondiendo con el período lectivo, impartimos los talleres de escritura creativa en dos niveles: básico y avanzado. Finalmente, la invitación a los autores para presentar sus obras o impartir clases magistrales sobre las técnicas de escritura ha dado lugar a la creación de un foro literario donde confluyen los lectores, libros y escritores, compartiendo ideas e inquietudes en pro de la cultura.

El hambre del pelícano

Blanca Cabañas

Suma de letras (2024)

Blanca Cabañas (Chiclana, Cádiz, 1991) es maestra de educación especial y pedagoga. Ella misma cuenta que siempre le gustó escribir. Sin embargo, no fue hasta que descubrió los certámenes literarios cuando retomó esta pasión olvidada. En 2018, su obra Katchi es premiada como Mejor Relato Corto en el III Certamen Literario Dos Hermanas Divertida. En 2019 consigue el accésit a Mejor Novela Corta en el XXIX Certamen Calamonte Joven con Un buen vecino. En 2020 su relato Vivir se convierte en ganador del VIII Concurso Relato Breve Projecte LOC de Cornellà de Llobregat. En 2021 su relato La línea se hace con el primer premio en prosa en el Certamen Literario Ciudad de Chiclana. A estos premios les debe la confianza en la escritura, ya que es entonces cuando rompe con el síndrome del impostor, según cuenta, y se lanza a escribir una novela. Perro que no ladra nace en el confinamiento y su primera idea fue fruto de la lectura de la neuroeducación. La abrumadora acogida de su primer libro, en 2022, la lleva a firmar un contrato de edición con Suma de Letras, lo que hace que su primera creación, Perro que no ladra, llegue a todas las librerías y puntos de venta más importantes del panorama nacional.

Ahora, en estas 355 páginas de El hambre del pelícano se puede comprobar que no solo se escribe de amor, sexo y muerte. La autora ha jugado con capítulos cortos jugando con el mínimo tiempo en el que transcurre la historia. Días antes del hecho y días después de lo ocurrido y tan solo se aleja, y poco, para dar una pequeña visión de cómo se posicionan los protagonistas meses después, pero pocos.

Como ya he dicho nos presenta capítulos cortos, pero muy densos y repletos de minuciosos detalles que hay que tenerlos en cuenta hasta llegar al final. Los autores pueden su mapa o su brújula para el proyecto de su libro, pero el lector en ocasiones también se ayuda de su pequeño mapa de protagonistas, fecha y circunstancias para no perder el hilo de la lectura. Pero en estas páginas también hay que conjugar el mapa histórico del lugar y remontarse a años atrás.

A través de las páginas de los libros percibimos historias que, como en El hambre del Pelícano, a muchos nos es desconocida. Hace que el lector ávido de saber busque además, información del hecho histórico del que parte la trama del libro, aunque en principio ésta está oculta.

La escritura en capítulos cortos da un ritmo pausado, pero solo da esa sensación, ya que es un thriller envolvente que te induce a querer seguir, porque es difícil adivinar como va a encauzar la trama, donde no solo van a jugar un papel importante los que están en ella, sino también los ausentes que fueron los que dieron pie al descubrimiento de una divinidad fenicia, Melkart, en San Fernando (Cádiz). Divinidad que estuvo consagrada en el templo de Heracles y fue hallada en un islote de Santi Petri junto a otras cuatro. Es una pequeña figura de bronce la que está oculta, las otras están a buen recaudo en un museo, pero esta no hará su aparición y ocultación, de nuevo, hasta el siglo XX.

Amiga date cuenta

En esta historia no romántica, pero sí llena de romanticismo por conseguir la figura perdida, entran a formar parte muchos protagonistas que ni remotamente se podían imaginar que se verían envueltos en una trama de celos, codicia, adicciones y comportamientos.

Sofía está desvinculada de sus padres, no lleva una vida ordenada, pero quiere encauzarla, acepta encargos de pseudo detective, el último en Chiclana. Alfredo es un hombre anodino que no tiene vida social y con baja autoestima, trabaja de camarero los fines de semana. Luz la mujer de Rodrigo sospecha de su marido, no solo por sus infidelidades, y encarga a Sofía que le haga un seguimiento. Sofía aparece muerta y el último que la vio con vida fue Alfredo y está muy interesado en saber qué le ocurrió a la joven, necesita respuestas.

Aconsejo al lector una inmersión en este libro que no le defraudará. Y el pelícano lo descubrirá.

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