El día que salieron a la venta las entradas para el Festival de teatro de Mérida compré tres localidades para la representación de Antígona del día 22 de julio. Ofrecían todas las garantías de seguridad, entre ellas aforo del 50%, y, en efecto, mis localidades (2+1) estaban bien separadas de las vecinas.
Para mi sorpresa, conforme los asistentes a la representación íbamos llegando a nuestros asientos comprobábamos que estaban todos ocupados. En la zona más baja del anfiteatro se había vendido el 100% del aforo.
La explicación de la organización: al principio dijeron que el aforo sería del 50%, pero luego les permitieron el 75%. Pero lo aplicaron de una forma curiosa: abajo todos apiñados y arriba grandes espacios vacíos.
Ni se respetaron las circunstancias de quienes ya habíamos comprado entradas con otras condiciones, ni se tuvieron en cuenta las más mínimas normas de distanciamiento.
La presencia en dicha función del presidente de Extremadura y de la Familia Real, de alguna forma respalda esta irresponsabilidad, al tiempo que da idea del compromiso de algunas instituciones públicas en la lucha contra la Covid-19.
Francisco Escobar Rabadán es socio de infoLibre
El día que salieron a la venta las entradas para el Festival de teatro de Mérida compré tres localidades para la representación de Antígona del día 22 de julio. Ofrecían todas las garantías de seguridad, entre ellas aforo del 50%, y, en efecto, mis localidades (2+1) estaban bien separadas de las vecinas.