Más de 250 personas del mundo de la cultura han apoyado con su firma un manifiesto que respalda "la decisión de integrar la creación escénica contemporánea dentro de Matadero Madrid mediante la creación de Naves Matadero-Centro Internacional de Artes Vivas". Los directores de escena, dramaturgos, coreógrafos y bailarines firmantes denuncian una "campaña mediática de acoso y derribo contra el nuevo proyecto que acaba de nacer. Según expresan, esta campaña trata de "dividir a la profesión teatral, a compañeros y colegas, así como a desestabilizar un proyecto que está, todavía, dando sus primeros pasos".
El texto, titulado Una oportunidad, respalda así el proyecto impulsado por el nuevo director artístico de las Naves del Matadero, Mateo Feijóo, quien pretende impulsar las artes escénicas de vanguardia —performance, danza, música y el teatro más contemporáneo—. Con ello, y ahí es donde surgió la polémica, Feijóo rompe con la línea llevada por los anteriores directores, que habían dedicado las Naves del Español al teatro de texto más convencional. La pasada semana, cuando se anunció la programación, creadores teatrales como Blanca Portillo o Sergio Peris-Mencheta expresaron su descontento con la decisión.
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Entre los firmantes de este manifiesto están coreógrafos punteros como Israel Galván, Rocío Molina, La Ribot o Angels Margarit (las tres últimas, Premio Nacional de Danza); directores y compañías que se han movido en los márgenes de la vanguardia, como Carlos Marquerie o El Conde de Torrefiel; pero también artistas más cercanos al teatro de texto que se había sentido agraviado, como el veterano José Sanchís Sinisterra, los directores Pablo Messiez, Carlota Ferrer y Antonio Rojano y los dramaturgos Guillem Clua, María Velasco y Denise Despeyroux. Todos ellos consideran que con este nuevo rumbo en la programación se corrige "un olvido histórico hacia propuestas escénicas que no han tenido un espacio en el que desarrollarse en Madrid", algo que ha terminado por "invisibilizar o expulsar de la ciudad a decenas de creadores".
Para ellos, con este nuevo rumbo "Madrid gana un espacio que necesitaba". "Sentimos que la apertura de este espacio debe ser motivo de alegría para toda la comunidad artística, ante la posibilidad de que la pluralidad de miradas hacia lo escénico encuentre por fin su lugar", explican en el manifiesto. Entre los firmantes se encuentran también gestores culturales como Lucía Casani, directora de La Casa Encendida —un espacio que dedica parte de su programación a la performance y la danza—; Salvador Sunyer, director del Festival Temporada Alta —uno de los más destacados de España—; Claire Verlet, programadora del Théâtre de la Ville de París; el cineasta Jonás Trueba o el músico Nacho Vegas.
Más de 250 personas del mundo de la cultura han apoyado con su firma un manifiesto que respalda "la decisión de integrar la creación escénica contemporánea dentro de Matadero Madrid mediante la creación de Naves Matadero-Centro Internacional de Artes Vivas". Los directores de escena, dramaturgos, coreógrafos y bailarines firmantes denuncian una "campaña mediática de acoso y derribo contra el nuevo proyecto que acaba de nacer. Según expresan, esta campaña trata de "dividir a la profesión teatral, a compañeros y colegas, así como a desestabilizar un proyecto que está, todavía, dando sus primeros pasos".