Las mujeres del audiovisual protestan: "La paridad no existe en las películas participadas por RTVE"

El pasado viernes, RTVE se felicitaba. Durante la reunión de su Observatorio de Igualdad, Elena Sánchez Caballero, secretaria general de la corporación y presidenta del organismo, daba algunos datos presentados como positivos. Entre ellos, los referidos a las películas participadas por la cadena, es decir, aquellas que RTVE decide apoyar como coproductora externa: de los 42 proyectos elegidos, 21 estaban "liderados por mujeres". Una paridad perfecta que el ente público exhibía con orgullo. Pero CIMA, la Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales, llegaba para aguar la fiesta: esa paridad "no existe", defendían este lunes en un comunicado, y provenía solo de un afán por "retorcer los datos". A preguntas de este periódico, la corporación insiste en que la participación de la cadena viene fijada por "distintos criterios estratégicos", y que "fieles a su compromiso de servicio público, la selección de los proyectos se diversifica para intentar apoyar un amplio espectro de películas atendiendo siempre a la calidad".

"El problema", explica Cristina Andreu, cineasta y presidenta de CIMA, "es que consideran que un proyecto está 'liderado por mujeres' cuando hay al menos una mujer en las categorías de dirección, guion o producción". Es decir, que en esa categoría entraría una película dirigida y escrita por un hombre en la que, dentro de un grupo mixto de productores, haya también una mujer. Sería el caso, por ejemplo, de O que arde (Lo que arde), película de Oliver Laxe escrita por él mismo junto con Santiago Fillol, con producción de Andrea Vázquez junto a Xavier Font. O de Dolor y gloria, escrita y dirigida por Pedro Almodóvar, incluida por la producción de Esther García (junto a Agustín Almodóvar). CIMA no considera que RTVE maneja un concepto demasiado laxo de filmes "liderados por mujeres". "Como método estadístico", protesta Andreu, "está muy mal hecho". En julio, CIMA hizo llegar sus quejas a RTVE, y Sánchez Caballero se defendía en su nombre mediante una carta que la asociación hizo pública: "A tenor de los datos, es que RTVE cumple con los objetivos de perspectiva de género que se ha marcado en su aportación a la industria cinematográfica española".

De las 42 películas seleccionadas, pues, 21 no cuenta con ninguna mujer en la dirección, el guion o la producción (solo cuatro no cuentan con hombres en esos puestos). Entre las 21 que sí lo hacen, 10 están dirigidas por mujeres, una cifra que alcanza el 23% del total y mejora la de años anteriores pero que está lejos de la paridad. Entre ellas figuran los trabajos de cineastas consagradas, como Icíar Bollaín (La boda de Rosa), Isabel Coixet (La contadora de películas) y Neus Ballús (Seis días corrientes), pero también las de nombres menos conocidos, como Lucía Alemany (La inocencia), Pilar Palomero (Las niñas) o Carol y Marina Rodríguez (Chavalas). De esta decena de películas, nueve están escritas por mujeres, y ocho cuentan exclusivamente con creadoras en el apartado de guion. La mayoría de esta decena cuentan también con mujeres en el equipo de producción. 

Las demás películas incluidas por RTVE en este listado de filmes "liderados por mujeres" no son tan fáciles de analizar. Hay proyectos que podrían considerarse paritarios ateniéndonos solo a estos tres campos, como Els dies que vindran (Los días que vendrán), dirigida por Carlos Marqués-Marcet, que cuenta con un guion firmado por el propio cineasta junto con Clara Roquet y Coral Cruz, y está producida por María Zamora y Sergi Moreno. De igual modo, Ane, de David Pérez Sañudo, nace de un guion escrito por el propio director junto a Marina Parés y cuenta con Katixa de Silva en la producción. Pero Litus, en el otro extremo, solo cuenta con una creadora en estos campos, Marta Buchaca, que además no firma el guion en solitario sino que lo hace con Dani de la Orden. Lo mismo ocurre con Pan de limón con semillas de amapola, dirigida por Benito Zambrano, que acredita a Cristina Campos como guionista porque el cineasta se basa en su novela para construir el guion. "La paridad no existe en en las películas participadas por RTVE", insiste Andreu. 

Siete de las 21 películas destacadas por RTVE no cuentan con creadoras en los apartados de guion ni dirección; ellas están presentes solo en producción. Es el caso de Ventajas de viajar en tren, de Aritz Moreno (la productora Leire Apellaniz con trabaja junto a Juan Gordon); de They shot de piano player, de Fernando Trueba y Javier Mariscal (producida por Cristina Huete); de Sentimental, de Cesc Gay (Marta Esteban); además de las ya mencionadas. "La producción, dentro de las profesiones del cine, es una de las más feminizadas", explica Cristina Andreu. "Queremos que haya mujeres en todas partes, obviamente, en fotografía, entre los técnicos, pero creemos que es especialmente importante que estemos allí donde se deciden los contenidos". Es decir, en dirección y en guion. A finales de julio, Elena Sánchez Caballero explicaba así la decisión de incluir producción en la cuenta: "No se prioriza entre estas labores pues nos parecen todas ellas esenciales por igual para la ejecución de la obra audiovisual". Si RTVE hubiera tenido en cuenta solo esas dos categorías, habría hablado de 14 filmes "liderados por mujeres" de un total de 42.

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CIMA considera que la falta de igualdad en la elección de las películas que apoya la cadena pública se debe a la falta de transparencia. El organismo encargado de seleccionar los filmes en los que participará la corporación, llamado Comité de Cine, no tiene una composición creada ad hoc, sino que reúne a la dirección de las distintas ramas de la empresa: Cine, ficción y contenidos, Programación, Proyectos y estrategia, Dirección económico-financiera, Asesoría jurídica... "Por ello", explicaba la propia Elena Sánchez Caballero en su respuesta a CIMA, "ser paritario no es uno de sus objetivos, más allá de que sí lo es para RTVE en sus principios generales". A pesar de esto, aseguraba, cinco de sus integrantes son mujeres y cuatro son hombres. Pero esto no convence a Cristina Andreu: "¿Por qué no publican su composición? El Instituto de Cinematografía [y de las Artes Audiovisuales, ICAA] sí dice quiénes deciden las subvenciones a la producción". 

Porque otra cuestión, en la que CIMA compara también a la cadena pública con las ayudas del Ministerio de Cultura, es que las productoras no conocen cuáles son los criterios de RTVE a la hora de elegir una u otra película. "Espero que entiendan que esta información está afectada directamente con la protección de los intereses comerciales y económicos de la Corporación y afecta también a los propios proyectos cinematográficos y a su negociación", respondía Elena Sánchez Caballero en nombre de RTVE. "No sabemos quiénes deciden ni por qué, y tampoco quiénes se presentan y no salen elegidos. Así, ¿cómo vamos a saber lo que pasa?", se pregunta la presidenta de CIMA. "A lo mejor no se han presentado suficientes películas dirigidas por mujeres, o a lo mejor son malas, pero necesitamos esa información", insiste Cristina Andreu. A preguntas de este periódico, RTVE asegura que se han presentado 268 proyectos en lo que va de 2019, 41 de ellos dirigidos por una mujer, un 15% del total (la selección, exponen, mejora esa proporción). La asociación de mujeres cineastas critica que también se desconozca qué importe dedica la corporación a cada una de las películas seleccionadas, algo que sí hace público el ICAA. 

 

El pasado viernes, RTVE se felicitaba. Durante la reunión de su Observatorio de Igualdad, Elena Sánchez Caballero, secretaria general de la corporación y presidenta del organismo, daba algunos datos presentados como positivos. Entre ellos, los referidos a las películas participadas por la cadena, es decir, aquellas que RTVE decide apoyar como coproductora externa: de los 42 proyectos elegidos, 21 estaban "liderados por mujeres". Una paridad perfecta que el ente público exhibía con orgullo. Pero CIMA, la Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales, llegaba para aguar la fiesta: esa paridad "no existe", defendían este lunes en un comunicado, y provenía solo de un afán por "retorcer los datos". A preguntas de este periódico, la corporación insiste en que la participación de la cadena viene fijada por "distintos criterios estratégicos", y que "fieles a su compromiso de servicio público, la selección de los proyectos se diversifica para intentar apoyar un amplio espectro de películas atendiendo siempre a la calidad".

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