El presidente de la patronal bancaria, José María Roldán, anunció este viernes que la las entidades financieras españolas devolverán a sus clientes entre 2.000 y 3.000 millones de euros por las cláusulas suelo, que el Supremo anuló por opacas y abusivas, y cuyo reintegro retroactivo dictaminó el Tribunal de Justicia de la UE el pasado diciembre. La cantidad representa la mitad de los 4.200 millones de euros en que el Banco de España calculó el impacto de la sentencia europea hace un mes.
Otras estimaciones, como las elaboradas por la consultora Analistas Financieras Internacionales (AFI) elevaban incluso esa cifra a 5.269 millones sólo hasta el 9 de mayo de 2013, cuando el Tribunal Supremo dictó su sentencia. Como el TJUE ha validado la retroactividad de la anulación de las cláusulas y éstas empezaron a incluirse en las hipotecas en noviembre de 2009, AFI añade otros 4.474 millones de euros a la factura. Es decir, según estos cálculos, realizados el pasado abril, los bancos deberían devolver unos 9.743 millones de euros.
El presidente de la Asociación Española de Banca (AEB) ha dado sus propias cifras el mismo día en que el Consejo de Ministros ha aprobado el procedimiento extrajudicial para que las entidades devuelvan las cantidades de más cobradas a los clientes por las cláusulas suelo. En una entrevista en Onda Cero, José María Roldán rebajó los cálculos del Banco de España asegurando que algunas entidades ya han llegado a acuerdos con sus clientes. La patronal bancaria también repitió este viernes que las entidades financieras siempre han cumplido “las numerosas normas que regulan la transparencia e información que debe incluirse en los contratos hipotecarios”. Roldán ha recalcado que las cláusulas suelo existen desde 1995 y “no son ilícitas”.
El sistema extrajudicial, que ha sido pactado por el Gobierno con el PSOE y Ciudadanos, permite que los bancos decidan a qué clientes ofrecen la devolución los bancos decidan a qué clientes ofrecen la devoluciónde lo cobrado en exceso y también si aplican alguna quita sobre esos montantes y los intereses que han generado. En caso de que el consumidor no quede satisfecho, puede entonces recurrir a los juzgados. Banco Sabadell reiteró este viernes –ya lo declaró tras la sentencia del TJUE– que sus cláusulas suelo siempre han sido “claras y transparentes” y que, en todo caso, ya ha “llegado a una solución con cada uno de sus clientes, si ha procedido”.
No obstante, en su información sobre los resultados del primer semestre de 2016 –es decir, antes de la sentencia que dictaba la retroactividad de las devoluciones–, el banco que preside Josep Oliu calculaba para las cláusulas suelo un impacto en sus cuentas de 490 millones de euros.
Los cálculos de las propias entidades
Pero son Caixabank y BBVA las entidades que mayor volumen de dinero deberían devolver a sus clientes: 1.250 y 1.200 millones de euros, respectivamente, según la información que ellos mismos comunicaron al publicar sus resultados del primer trimestre del año. Sólo para 2016 el BBVA cifra en 404 millones de euros el “impacto negativo neto” en su beneficio atribuido.
El Banco Popular hizo una provisión de 305 millones de euros, a 30 de junio de 2016, para devolver las cláusulas suelo, a los que habría que sumar otros 334 millones más para pagar la retroactividad hasta 2009. En total, 639 millones de euros. Bankia, por su parte, constituyó provisiones de 114 millones a fin de cubrir los reintegros hasta el 9 de mayo de 2013. Para las cláusulas firmadas con anterioridad, el banco que preside José María Goirigolzarri calcula que necesitaría 100 millones más. La factura sumaría 214 millones de euros, por tanto. Liberbank calculó en un primer momento un impacto de 208 millones de euros, a los que añadió 83 millones tras la sentencia del TJUE. A estas cantidades habría que sumar las devoluciones que deberán hacer Abanca, Unicaja –150 millones–, Cajamar o Ibercaja. En total, la cifra supera con creces los 4.000 millones.
En todos sus informes de resultados de 2016, al hacer mención a las cláusulas suelo, los bancos no dudaban en calificar como “muy remotas” las posibilidades de que perdieran en los tribunales y tuvieran que devolverlas hasta noviembre de 2009. Tenían de su parte al Abogado General del TJUE, destacaban.
Los bancos no tienen prisa
No sólo el Sabadell se ampara en que sus cláusulas suelo son transparentes y, por tanto, legales. También el presidente del BBVA, Francisco González, ha dejado claro en Davos que el banco aún está “pendiente” de la interpretación que haga el Tribunal Supremo sobre la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE. “Tan pronto esté todo claro”, añadió, “nosotros procederemos adecuadamente, hablando con nuestros clientes y buscando los intereses de ambas partes”. Es decir, para empezar a pagar los bancos esperarán a que el Supremo se pronuncie sobre la retroactividad dictada por el tribunal europeo, que contraviene su propia sentencia, donde se limitó hasta mayo de 2013 la devolución de lo cobrado indebidamente.
El real decreto aprobado este viernes da de plazo a los bancos un mes para poner en marcha el procedimiento extrajudicial de reintegro de los importes indebidos. Y tres meses más como máximo para llegar a un acuerdo con cada cliente. La idea del Gobierno es que los primeros perjudicados cobren su dinero en un plazo de cuatro meses.
En la radio, José María Roldán no reconoció expresamente que la desaparición de las cláusulas suelo de las hipotecas vaya a encarecer las hipotecas. “Todo dependerá de los tipos de interés y de la competencia que exista en el sector”, aseguró el presidente de la patronal bancaria.
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Lo que sí está negro sobre blanco y firmado es la parte de la factura de las devoluciones que se pagará con dinero público: el 85% de lo cobrado en exceso por Abanca. Según el documento de compra firmado con el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), éste debe hacerse cargo de ese porcentaje, hasta un importe máximo, por la responsabilidad de Abanca “derivada de las reclamaciones relativas a la comercialización de préstamos hipotecarios con cláusulas suelo concedidos a partir de octubre de 2008”. El FROB vendió Novagalicia al venezolano Bandesco en diciembre de 2013 por 1.003 millones de euros, después de haberle inyectado más de 9.000 millones para rescatarla. Entonces se convirtió en el actual Abanca.
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Las entidades financieras han enviado el 23 de enero a la CNMV comunicaciones de hechos relevantes sobre el impacto de la devolución de las cláusulas suelo en sus cuentas. Tras la entrada en vigor del real decreto aprobado por el Gobierno el viernes anterior, Caixabank informa de que ese impacto aumentará en 110 millones. El Banco Popular, por el contrario, reduce su efecto en 105 millones de euros. El resto de los bancos – BBVA, Banco Sabadell, Bankia y Liberbank– mantienen inalteradas las cifras que comunicaron en su día.
El presidente de la patronal bancaria, José María Roldán, anunció este viernes que la las entidades financieras españolas devolverán a sus clientes entre 2.000 y 3.000 millones de euros por las cláusulas suelo, que el Supremo anuló por opacas y abusivas, y cuyo reintegro retroactivo dictaminó el Tribunal de Justicia de la UE el pasado diciembre. La cantidad representa la mitad de los 4.200 millones de euros en que el Banco de España calculó el impacto de la sentencia europea hace un mes.