Los contratos temporales crecen diez veces más que los indefinidos a las puertas del verano

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El verano se acerca, la hostelería se prepara para la temporada alta y las cifras del paro lo reflejan. Por partida doble. Las oficinas públicas de empleo registran un descenso en el número parados de registrados de 117.985 personas, una cifra que el Gobierno considera una señal de que la “recuperación es real”. Pero esa caída es básicamente producto, un año más, de la estacionalidad. Y se traduce en un freno de los contratos indefinidos acompañado del despunte de los temporales. Los primeros han sido en mayo sólo el 7,92% de los contratos firmados, el menor porcentaje de lo que va de año –el máximo, un 10%, se alcanzó en marzo, cuando coincidió el final de la tarifa plana de cuotas a la Seguridad Social de 100 euros con el comienzo de la nueva de 500–. Respecto a abril, los indefinidos sólo han crecido un 0,93%. Por el contrario, los temporales se han disparado un 10% en comparación con el mes anterior; es decir, han aumentado 10 veces más.

Otro tanto había ocurrido ya en abril respecto a marzo: los contratos indefinidos cayeron un 14,4%. Ese mes incluyó la Semana Santa, cuando empieza a remontar la contratación temporal para hacer frente a la nueva temporada turística y hostelera.

Y es que es el repunte estacional de la actividad en el sector servicios el que tira del empleo. Así, es Baleares la comunidad autónoma en la que más ha caído el paro en mayo: un 11,87%. El doble que en La Rioja y casi el triple que en la Comunidad de Madrid y Cataluña. Lo confirman las cifras de afiliación a la Seguridad Social: en el último mes el 50,5% de los nuevos cotizantes del Régimen General –los asalariados–procede de la hostelería y el comercio. El mayor aumento se lo ha llevado ese primer subsector, con 65.563 nuevos afiliados del total de 168.840 del Régimen General. Le sigue la agricultura, con un crecimiento del 4,95% en un mes.

En la presentación de los datos del paro de mayo, la secretaria de Estado de Empleo, Engracia Hidalgo, ha destacado que “cada vez entran más personas en el mercado laboral con un contrato estable”. Pero lo cierto es que no sólo se ha disparado la temporalidad para hacer frente a la mayor actividad estacional del sector servicios, sino que también se ha convertido en una tendencia sólida el aumento del contrato temporal a tiempo parcial, la fórmula más precariala fórmula más precaria. En mayo se firmaron 505.222 de estos contratos, un 24,1% más que el mismo mes del año anterior. Son ya el 34,87% de los temporales. Además, crecen a mayor ritmo que los temporales a jornada completa, tanto en el último mes –un 10%– como en el último año –un 8,17%–.

En cualquier caso, 4,21 millones de personas continúan registradas en las oficinas de paro, de las cuales 2,28 millones son mujeres. El paro femenino ha bajado un 4,20% casi la tercera parte que el masculino, un 11,75%, en el último año.

2,31 millones de parados sin ayuda pública

También continúa un mes más el desplome en el número de parados que cobran una ayuda pública: un 12,8% en abril –los datos sobre prestaciones se publican con un mes de retraso respecto de los del desempleo–. Así, la cobertura, el porcentaje de quienes disfrutan de esa protección social, ya está en el 54,87%. Es decir, 2,31 millones no reciben ni prestación contributiva ni subsidios asistenciales. El número de quienes cobran la primera se desploma casi un 24% en un año: son 800.124 beneficiarios, frente a los más de un millón que perciben el subsidio –426 euros al mes–.

Entre el descenso del número de perceptores y el aumento proporcional de quienes cobran las de inferior cuantía, el Estado se gastó en abril un 17,8% menos que en 2014. Por beneficiario se gastó sólo 782,9 euros al mes, mientras que en 2013 la cifra ascendía a 901,5 euros. El Programa de Activación para el Empleo, la nueva ayuda para parados de larga duración que hayan agotado el resto de los subsidios y tengan responsabilidades familiares, cuenta ya con 43.994 perceptores.

Lento y temporal

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Tanto CCOO como UGT han criticado los “discursos triunfalistas” del Gobierno sobre el descenso del paro. El primero considera “insuficiente” el 2,7% de bajada registrado en mayo. A su juicio, ese ritmo es “insoportablemente lento”: “Hasta el 2021 no volveríamos al nivel previo a la crisis”, advierte el sindicato encabezado por Ignacio Fernández Toxo.

UGT, por su parte, destaca el aumento del empleo precario. A su juicio, los indicadores corresponden a “un clásico” del mercado de trabajo español: la reducción del paro y el aumento de la afiliación a la Seguridad Social “en actividades ligadas a la estacionalidad, eso sí, a través de empleos temporales”.

Finalmente, la CEOE subraya los “20 meses consecutivos de descenso del paro, en términos interanuales, desde octubre de 2013”, lo que a su juicio “demuestra que se consolida la recuperación de la economía española y del empleo”.

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