El director general de Rosoboronexport, Alexander Mijeev, ha asegurado este lunes que la guerra de Siria ha hecho aumentar el interés por el armamento y el material de defensa ruso, como consecuencia de la participación de las Fuerzas Armadas rusas en el conflicto apoyando a las fuerzas leales al presidente sirio, Bashar al Assad.
"Percibimos un mayor interés de socios extranjeros por las armas y los equipos cuyas características se han confirmado en el transcurso de la operación antiterrorista en Siria. Me refiero a los aviones de combate, helicópteros, materiales blindados, equipos de ingeniería, medios de combate navales, aéreos y terrestres", ha afirmado el director general de la principal empresa rusa exportadora de armamento, en declaraciones a la prensa durante feria de defensa DSA 2018, que se celebra en la capital de Malasia, Kuala Lumpur.
La comunidad internacional se compromete a aportar 3.600 millones en ayuda a Siria y la región en 2018
La cartera de pedidos de Rosoboronexport, según su director general, "está equilibrada y ronda los 45.000 millones de dólares". Los sistemas de defensa antiaérea y los equipos de guerra electrónica representan alrededor del 30 por ciento en este importe, ha señalado.
Mijeev ha dicho que su compañía suscribió unos 1.100 contratos en 2017. Con anterioridad, portavoces de Rosoboronexport informaron de la firma de contratos con 53 países por un valor total de 15.000 millones de dólares en 2017.
"Para preservar su posición en el mercado internacional del armamento, Rosoboronexport está preparando nuevas ofertas sin parangón para nuestros socios, en particular en lo que atañe al traspaso de tecnologías. Hacemos hincapié en la localización de las producción, así como en el servicio de posventa", ha subrayado, según informa la agencia de noticias rusa Sputnik.
El director general de Rosoboronexport, Alexander Mijeev, ha asegurado este lunes que la guerra de Siria ha hecho aumentar el interés por el armamento y el material de defensa ruso, como consecuencia de la participación de las Fuerzas Armadas rusas en el conflicto apoyando a las fuerzas leales al presidente sirio, Bashar al Assad.