El Parque Nacional de Doñana no recuperará por ahora su puesto en la prestigiosa Lista Verde de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, en inglés), la mayor red global de organizaciones defensoras de la biodiversidad. Tras años de evaluaciones de los expertos de este organismo, la Junta de Andalucía sigue sin aportar parte de la documentación que necesitan los supervisores del IUCN, a lo que se suma el pésimo estado de la naturaleza y la fauna por la escasez de agua. La desesperación del gobierno andaluz provocó que la Junta llegase incluso a acusar el pasado junio a los técnicos del organismo de boicotear al humedal onubense, pero la IUCN ha defendido ahora a sus investigadores y mantiene vigente la suspensión de este sello.
La disputa se remonta a diciembre de 2020, cuando el IUCN endureció los criterios ambientales para permanecer en la Lista Verde y Doñana suspendió el examen para mantener su puesto. Tras dos años de gracia para enmendar los errores, el humedal andaluz perdió el sello oficialmente en junio de 2022, uno de los mayores galardones internacionales para un parque que premia su buena gestión. En enero de 2023, el equipo de expertos españoles que trabaja con la organización internacional volvió a publicar un nuevo informe sobre la situación de Doñana, con otro suspenso en 17 de los 50 puntos estudiados y en tres de las cuatro áreas: gobernanza y gestión; planificación; coherencia y efectividad de las políticas; y resultados de conservación del parque.
El nuevo suspenso de Doñana en el examen de la Lista Verde coincidió con el intento de la Junta de Andalucía durante la pasada primavera de sacar adelante una ampliación de las tierras de regadío en el entorno del humedal, lo que habría empeorado el estado de las reservas subterráneas de agua del parque, que ya se encontraban al límite. La propuesta de ley del Parlamento Andaluz supuso un enfrentamiento abierto entre la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, y el presidente andaluz del PP, Juanma Moreno.
En medio de esas discusiones y con la presión de la comunidad científica y ecologista, la Junta mandó el pasado 22 de junio una queja al IUCN en la que acusó a sus expertos de tener un "conflicto de intereses" a la hora de verificar el estado de Doñana, de suspender indicadores que fueron aprobados en 2014, y afirmó tener "la sospecha de que [los expertos] podrían haber sido condicionados en sus evaluaciones por la proposición de Ley en Andalucía", en referencia a la ley de ampliación de regadíos. El equipo de voluntarios que colabora desde España con el IUCN está compuesto por una decena de académicos con experiencia en supervisión de parques nacionales o biología, hay dos miembros de asociaciones ecologistas (WWF y SEO Birdlife) y está dirigido de forma rotatoria por Javier Zapata, exdirector del Programa Áreas Marinas del Organismo Autónomo Parques Nacionales, dependiente del Miteco.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza respondió el pasado 30 de noviembre por carta a Juan Pedro Castellano, director del Espacio Natural Doñana, para rechazar cada una de las acusaciones y trasladar "una invitación al Espacio de Doñana a mantener su compromiso con la Lista Verde”, según la misiva, que ha podido ver infoLibre. Aunque la carta se entregó hace 14 días, su existencia fue revelada este lunes por El País, aunque el consejero andaluz de Medio Ambiente, Ramón Fernández-Pacheco, negó este lunes que haya recibido nada. Además, dijo que a la dirección del Parque Nacional "no le consta" que inspectores de esta organización hayan ido a Doñana para ver sobre el terreno la realidad del Parque. "No nos parece creíble que una organización tan prestigiosa haya trabajado de oídas por un informe de terceros, en lugar de desplazarse al territorio, más cuando la sede de la UICM mediterránea está en Málaga", afirmó a la prensa.
Según una persona que sigue el caso, el equipo de expertos en España del UICN no visitó el parque de Doñana para realizar la evaluación que finalizó en enero de 2023, pero añade que es el modo de trabajo de este organismo internacional, presente en 60 países. “Hay una guía de procedimiento que incluye una visita de campo para comprobar aspectos dudosos, pero ese viaje se hace al final del proceso”, explica. Y añade que en la fase inicial las evaluaciones se hacen a partir de documentos oficiales o informes de otros investigadores. De hecho, en la carta enviada a la Junta, el IUCN aclara que la visita del parque está pendiente, pero antes el equipo de expertos españoles necesita recibir toda la documentación que necesitan para cerrar esta fase del estudio. Una vez que se haga la visita presencial, la junta del UICN votará en Suiza si volver a meter al humedal español en la lista o mantenerlo fuera, por lo que la suspensión es de momento temporal.
La UICN también aprovecha la carta para enviar un mensaje a los representantes de la Junta que siguen insistiendo en que Doñana no ha perdido el sello verde: "En este momento, el Parque de Doñana se encuentra en fase de candidatura, ya que su certificado de Lista Verde fue suspendido el 30 de junio 2022. Es esencial que la comunicación en relación a esta situación sea clara y coherente por parte del ENP Doñana, y que se eviten declaraciones diferentes a comunicar que el parque está en fase de candidatura, a fin de evitar ambigüedades y malentendidos".
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Sobre las acusaciones de conflicto de intereses, la UICN defiende que en sus estatutos se contempla la posibilidad de que los académicos puedan tener algún conflicto de interés con el proyecto que supervisan, pero que están vetados de la votación final. Sobre los puntos que fueron aprobados en 2014 y suspendidos en 2023, argumentan que los estándares han sido actualizados y que los datos también han cambiado desde entonces. Por último, sobre el impacto que tiene la ley de regadíos (que no ha llegado a ver la luz), el UICN afirma que no ha sido "significativo" porque los expertos se basan "exclusivamente en el estado actual de las evidencias objetivas en el momento de la evaluación". El IUCN destaca además que la queja de la Junta no tiene ni siquiera sentido porque el sistema de evaluación de este organismo no admite recursos, y de hecho tuvieron que definir un proceso de admisión de quejas este verano porque no habían tenido ninguna hasta ahora.
La IUCN es una organización ligada a las Naciones Unidas fundada en 1948, con sede en Suiza, y es la mayor red global dedicada a la naturaleza, formada por más de 1.400 organizaciones y apoyada por más de 18.000 científicos. En 2014 esta entidad creó la Lista Verde, la primera que premia los espacios naturales que están bien gestionados y que pueden servir de ejemplo a otros administradores, y en ella entró primero el parque nacional de Sierra Nevada y en julio de 2015 la reserva de Doñana. Sierra Nevada también está en proceso de candidatura, como Doñana, porque con la revisión de los criterios salió de la lista, aunque se espera que vuelva en cuanto termine el proceso de evaluación.
Precisamente este lunes se reunió en Sevilla el Consejo de Participación de Doñana, donde la Junta se reúne con expertos y organizaciones civiles para debatir sobre el estado del parque. La Junta presentó allí datos actualizados sobre las lluvias en el humedal, y concluye que en el ciclo hidrológico 2022-2023, que acabó el 31 de agosto, llovieron 88 litros menos por metro cuadrado de la media, el segundo nivel más bajo en 24 años.
El Parque Nacional de Doñana no recuperará por ahora su puesto en la prestigiosa Lista Verde de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN, en inglés), la mayor red global de organizaciones defensoras de la biodiversidad. Tras años de evaluaciones de los expertos de este organismo, la Junta de Andalucía sigue sin aportar parte de la documentación que necesitan los supervisores del IUCN, a lo que se suma el pésimo estado de la naturaleza y la fauna por la escasez de agua. La desesperación del gobierno andaluz provocó que la Junta llegase incluso a acusar el pasado junio a los técnicos del organismo de boicotear al humedal onubense, pero la IUCN ha defendido ahora a sus investigadores y mantiene vigente la suspensión de este sello.