La crisis de los medios
La agencia Efe pierde 9,8 millones en 2016, el año en que tenía previsto volver a los beneficios
La agencia Efe terminó 2016 con unas pérdidas de 9,8 millones de euros, lo que supone volver casi a los números rojos de 2012rojos, cuando el ejercicio se saldó con un resultado negativo de 10,8 millones. Precisamente 2016 era el ejercicio en que la empresa pública tenía previsto regresar a los beneficios tras cuatro años de recortes de gastos, de plantilla y salariales.
Sin embargo, la agencia, que forma parte de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), al igual que RTVE, ha encadenado un año más de pérdidas, que comenzaron en 2009, cuando registró un resultado negativo de 1,5 millones de euros. En 2015 Efe perdió 7,5 millones y en 2014, 4,3 millones de euros.
Según la propia agencia, el aumento de las pérdidas a motivos extraordinarios, como la inclusión de 15 trabajadores no previstos en el Expediente de Regulación de Empleo que comenzó en 2012 y cuyas indemnizaciones sumaron 1,5 millones de euros adicionales a las cantidades inicialmente presupuestadas. Otros 1,5 millones proceden de la recuperación de los salarios que se habían recortado a los trabajadores durante los últimos cuatros años mientras estuvo vigente el ERE. La agencia tuvo que gastar un millón más por la sentencia del Tribunal Supremo que la obligó a pagar con carácter retroactivo la promoción de los redactores senior. Y otro millón de euros se debe a la inflación en Venezuela, asegura Efe a infoLibre, que al dispararse hasta el 550% devalúa la moneda local a cero. “Si no fuera por estos factores”, asegura un portavoz de la agencia, “los resultados serían similares a los de los años anteriores”.
Además, advierte, se trata de “cifras provisionales”, a la espera de que el Congreso apruebe en junio las aportaciones del Estado adicionales que le corresponderán a la agencia tras haber sido reconocida por la Comisión Europea como Servicio de Interés Económico y General (SIEG). Aunque no se sabe aún qué cantidad se le abonará a Efe por este concepto, en teoría puede superar hasta en un 20% los 38 millones de euros que recibe actualmente. Esos 38 millones es la cuantía congelada que ha percibido del Estado la agencia los últimos cuatro años. Posee la categoría de SIEG, por ejemplo, la agencia France PresseFrance Presse, a la que el Estado francés concede cada año 127 millones de euros. Se trata de las actividades de servicio comercial que Bruselas considera que “cumplen misiones de interés general” y están “sujetas a obligaciones específicas de servicio público”. Pueden ser redes de transporte, energía, comunicación y servicios postales.
Sin embargo, estas razones no convencen al comité de empresa de Efe. UGT y la FeSP (la Federación de Sindicatos de Periodistas) han denunciado en un comunicado a la plantilla la “nefasta gestión y pésima provisión de gastos” de la agencia. Según denuncian, mientras la plantilla ha sufrido “cuatro años de rebaja salarial y recortes”, el capítulo de gastos se multiplicaba. De hecho, tachan de “poco ético, inmoral e irracional” que la plantilla haya “entregado” a la empresa 16 millones de euros anuales, mientras la dirección de la agencia cobra pluses de productividad a pesar de las pérdidas récord. Unos incentivos que el comité pide a los ejecutivos que devuelvan a las arcas de la empresa.
Además, los sindicatos acusan a los gestores de Efe de multiplicar los contratos y los “gastos fastuosos” en las delegaciones de la agencia en el extranjero. Cifran en 700 los trabajadores de Efe en España, y de 500 en el exterior, “contratados locales con condiciones desconocidas” para el comité.
La agencia Efe lleva dos años sin el órgano que defiende a sus redactores frente a las presiones profesionales
Ver más
Un ERE para casi 300 trabajadores
El ERE firmado en 2012 afectó a casi 300 personas. Además de la jubilación forzosa de quienes tuvieran 60 años y del compromiso de retirarse de los que tenían más de 57 años cuando llegaran los 60, un centenar de trabajadores sufrieron una reducción de jornada del 50%, con la correspondiente rebaja salarial y otros 200, un recorte de jornada y sueldo del 25%. Estas medidas se revirtieron el año pasado.
Los dos sindicatos citados acusan a los responsables de Efe de “imprudentes” por no haber previsto, dicen, el aumento de la masa salarial que iba a suponer el fin del ERE. También por haber incluido en la partida de ingresos de 2016 la aportación extra que supone la declaración de SIEG. Una contribución que finalmente no se produjo. “Esos ingresos no vienen de un cambio en la política del negocio o de una exitosa gestión comercial”, advierten también, sino de la aportación del Estado. Efe lleva años intentando aumentar sus fuentes de ingresos abriendo nuevas líneas de negocio, en un intento por compensar la peligrosa caída del número de sus clientes que ha sufrido durante la crisis.