El recuerdo de Manu Leguineche, el jefe de la tribu, sobrevoló este miércoles la presentación de infoLibre y tintaLibre en el teatro Cánovas de Málaga en el mismo día de su muerte. El director editorial del diario digital y de la revista, Jesús Maraña, desgranó los cambios del periodismo a lo largo de los años y subrayó que la principal misión del periodista, como lo hacía a la perfección el periodista vasco fallecido, era “ser testigo de lo que está pasando y trasladarlo al resto de la gente”, esto es, estar en primera línea. “Parte de esa función ahora está en manos de los propios ciudadanos”, añadió en su intervención ante 350 personas que llenaron el aforo del Cánovas en el que le acompañaban el músico Joaquín Sabina, el poeta Luis García Montero y el periodista y director del Centro Andaluz de las Letras, Juan José Téllez.
El periodismo ha cambiado. Ese fue el eje central de la charla-coloquio centrado en las nuevas formas del oficio y las alternativas al periodismo tradicional. El ciudadano es tan partícipe hoy del periodismo que “puede empezar a enviar mensajes diciendo que helicópteros están sobrevolando su casa, están disparando, están aterrizando…”. Y media hora después se conoce que esa persona que enviaba tuits estaba informando de la muerte de Bin Laden.
El ciudadano cumple su papel, se puede erigir en testigo, en voz de los acontecimientos. Pero no está solo, no debe estarlo. En opinión de Jesús Maraña, lo que pasa horas después, las circunstancias en las que se producen los acontecimientos, a dónde es trasladado Bin Laden, si a Estados Unidos, si a una prisión en cualquier país del mundo o si es arrojado directamente a las profundidades del Atlántico… “Todo eso ya es una función del periodista; tiene que haber periodistas que asuman la responsabilidad de que con los datos que dan los que tienen ya la información o parte de la información en sus manos, que son los ciudadanos, tengan la responsabilidad de contrastarla, de investigarla, de hacerse responsables de ella y de firmarla”, apostilló.
De la misma forma que la revolución digital transforma el papel del ciudadano y lo convierte en testigo de lo acontecido, como parte activa de la noticia, los cambios en el propio periodismo traen la aparición de proyectos como infoLibre y tintaLibre, que emanan de la experiencia francesa de Mediapart. En ese tubo de ensayo, los periodistas son los directivos y no son los tradicionales magnates los que se meten en la redacción de los periódicos. Y los ciudadanos son pequeños accionistas y partícipes de la información que quieren recibir.
“A los poderes políticos y económicos jamás les ha interesado que se cuenten las cosas, les ha interesado que se cuenten sus cosas y la forma de ver las cosas que ellos mismos tienen”, afirmó el director editorial de infoLibre. De otra forma no se habría podido informar de cómo el actual presidente del Gobierno, Mariano Rajoy compatibilizó ingresos "como político y como registrador de la propiedad”; o si "los propietarios de los grupos empresariales que se quedan con hospitales privatizados son los que dicen ser o son fondos que están en paraísos fiscales”, aseguró Maraña, quien recalcó que todo esto se ha podido comprobar en las páginas de infoLibre. “En definitiva, la información pretende ser útil a la sociedad, y esto es lo que de verdad merece la pena”, apostilló.
Independencia frente al poder político y económico
El poeta Luis García Montero no pudo evitar reconocer “echarse las manos a la cabeza” al leer algunos editoriales defendiendo “cosas realmente disparatadas que tienen que ver con los intereses de un banco o un grupo de inversores y no con la ciudadanía”. Independencia frente al poder político e independencia frente a los poderes económicos. “Si no queremos que los bancos sean dueños de nuestra información, los ciudadanos tenemos que ser los dueños de nuestra información, y tenemos que invertir en ella, y tenemos que acostumbrarnos a pagar, ya sea en el quiosco digital o en el quiosco de la calle, el trabajo de los periodistas serios”, dijo el autor y profesor granadino.
El cantautor Joaquín Sabina se declaró adicto de algunas cosas, pero sobre todo de la prensa: “Sé que uno tiene que tener su periódico. ¿Cuál es mi periódico? Mi periódico es cualquier lugar donde esté Jesús Maraña”. Tras declararse analfabeto digital, Sabina señaló que para él está claro que el olor y el tacto de la tinta es una sensación superior a pasar las hojas sobre una pantalla. Por eso deja su impronta, que ayer avanzó al auditorio de Málaga, a través de sus versos en las páginas de tintaLibre.
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El periodista y director del Centro Andaluz de las Letras, Juan José Téllez, aprovechó para remarcar el carácter literario del periodismo: “El mejor periodismo es literatura y la mala literatura no es periodismo”, aseveró. Téllez destacó que conviene destacarlo en un momento en el que “el periodismo parece tocado de muerte, al menos tal y como lo conocíamos hasta ahora”. En este panorama, dijo, "están surgiendo una serie de iniciativas, entre las que destaca tintaLibre, que ofrece una propuesta bastante insólita”, afirmó el periodista.
Para el director del Centro Andaluz de las Letras, infoLibre “viene a sumarse a esa búsqueda de nuevos espacios para el periodismo bajo una premisa, y es que quizás la crisis de la prensa, la radio y la televisión no esté tanto motivada por la crisis económica sino que puede que venga motivada por la crisis de contenidos y de la propia concepción de la profesión periodística”.
García Montero evocó las palabras escritas en los años 30 por Antonio Machado en Juan de Mairena para describir la situación actual y subrayar que la defensa de un periodismo libre es parte fundamental de la democracia: “La verdadera libertad no es poder decir lo que pensamos, sino poder pensar lo que decimos”.
El recuerdo de Manu Leguineche, el jefe de la tribu, sobrevoló este miércoles la presentación de infoLibre y tintaLibre en el teatro Cánovas de Málaga en el mismo día de su muerte. El director editorial del diario digital y de la revista, Jesús Maraña, desgranó los cambios del periodismo a lo largo de los años y subrayó que la principal misión del periodista, como lo hacía a la perfección el periodista vasco fallecido, era “ser testigo de lo que está pasando y trasladarlo al resto de la gente”, esto es, estar en primera línea. “Parte de esa función ahora está en manos de los propios ciudadanos”, añadió en su intervención ante 350 personas que llenaron el aforo del Cánovas en el que le acompañaban el músico Joaquín Sabina, el poeta Luis García Montero y el periodista y director del Centro Andaluz de las Letras, Juan José Téllez.