Ante las elecciones en Andalucía, el Observatorio de Sostenibilidad y Blogsostenible han analizado el que muy probablemente es el principal problema al que se presentan los andaluces en el futuro: el cambio climático. La conclusión es que en Andalucía se han incrementado las emisiones de CO2 desde que existen datos y además se observan cada vez más evidencias del cambio climático en el territorio, por lo cual puede concluirse que Andalucía no avanza hacia la descarbonización y, por ello, tampoco hacia un futuro más sostenibledescarbonización.
Respecto a las emisiones de gases de efecto invernadero, se observa que el total de las emisiones de CO2 entre 2016 y 2017 se han incrementado un 6.5% (ton CO2 eq). A eso tenemos que sumar el 30.1% que se incrementaron las emisiones en 2016 respecto a 1990. Respecto a las emisiones de sectores fijos (energéticas, cementeras, refinerías…) las emisiones se han incrementado casi un 10% en un año.
Veamos un resumen de tan importante informe para Andalucía. El informe completoincluye gráficas y datos precisos.
Andalucía debe preocuparse por el cambio climático
Algunas de las razones argumentadas son la subida de las temperaturas que Andalucía está ya sufriendo, así como la subida del nivel del mar. En la costa de Málaga, los expertos han constatado una subida media del mar de 2,5 mm por año (periodo 1970-2005). Sin embargo, algunas zonas son mucho más vulnerables que otras y en Andalucía los puntos críticos se localizan en las marismas de Doñana, las lagunas de Cabo de Gata y el Golfo de Cádiz, con valores probables de retroceso de las playas de hasta 15 metros para 2050. Mientras esto sucede, el proyecto más emblemático para Doñana es usar su entorno para que la empresa Naturgy almacene gas, o sea, seguir apostando por las energías fósiles y contaminantes.
El cambio climático favorecerá la expansión de especies parásitas, como ciertos hongos patógenos. En particular, el pinsapo (Abies pinsapo), un abeto andaluz en peligro de extinción, está viéndose perjudicado por el cambio climático; no solo por el mayor estrés hídrico, sino también por plagas y enfermedades. Por otra parte, los efectos del cambio climático son especialmente perceptibles en las áreas de alta montaña: un glaciar de alta montaña, el único que había en Andalucía, desapareció completamente en 1995, según se constató en un informe anterior del Observatorio de la Sostenibilidad (en Sierra Nevada, en el Corral del Veleta). También son muy evidentes los efectos negativos en las aves alpinas.
Además, se ha evidenciado un adelanto en la foliación, la floración y la maduración de los frutos en el sur de España. Esto puede conllevar disminución de poblaciones de insectos, aves… y, en definitiva, pérdida de biodiversidad. Todo esto se une a otras amenazas concretas como la multitud de especies invasoras que proliferan en Andalucía, como por ejemplo el helecho Azolla filiculoides, especie exótica invasora que se está instalando en Doñana, así como multitud de aves que están cruzando el estrecho para asentarse en la península Ibérica.
Todo esto puede desequilibrar los ecosistemas andaluces y puede afectar gravemente a sectores como la agricultura, la cual puede ver disminuida su producción por multitud de causas (sequía, calor, plagas, salinización…).
¿Quién contamina en Andalucía?
En un estudio anterior ya se concluyó que las mayores emisiones de gases de efecto invernadero corresponden a la provincia de Cádiz, seguida por las de Almería y Huelva. Esas tres provincias emiten aproximadamente el 80% del total emitido por Andalucía.
Dado que las empresas más contaminantes de Andalucía son Endesa y E.ON, entendemos que la Junta de Andalucía debería reunirse urgentemente con ambas empresas y concertar un plan para la reducción de sus emisiones. En particular, Carboneras en Almería es la localidad con más emisiones de Andalucía. Solo allí se emite cerca de la cuarta parte de las emisiones totales andaluzas, y las empresas responsables son Endesa y Holcim. Por otra parte, San Roque en Cádiz y Palos de la Frontera en Huelva tienen también una preocupante cantidad de emisiones debidas a sus complejos petroquímicos.
El sector más contaminante de Andalucía es la quema del carbón y de ahí que el principal punto negro de Andalucía esté en Carboneras, por la central de Endesa, aunque también encontramos emisiones excesivas en Los Barrios (Cádiz) y en Espiel (Córdoba), ambas responsabilidad de E.ON.
Un reciente estudio de las principales organizaciones ecologistas de España y de la Plataforma por un Nuevo Modelo Energético ha revelado que, solo por sus centrales de carbón, la empresa Endesa genera 410 muertes al año, unas 15.000 enfermedades respiratorias, la pérdida de unos 150.000 días de trabajo y un gasto sanitario que ronda los 1.200 millones de euros. Por tanto, cerrar las centrales de carbón nos ahorrará muchos millones y mejorará nuestra salud.
Por otra parte, la capital de provincia con mayores emisiones es Málaga, lo cual se debe a la central térmica de ciclo combinado de Naturgy (antigua Gas Natural) en Campanillas, y a la cementera conocida popularmente como de La Araña (cementera Heidelberg que se estudió en el citado informe).
Recomendaciones
El informe plantea unas cuantas recomendaciones importantes, de entre las cuales extraemos las siguientes:
- Los poderes públicos y las empresas privadas deben tomar medidas para frenar el cambio climático. En caso contrario, sus efectos tendrán un notable impacto en la economía de Andalucía y en la calidad de vida de sus ciudadanos. Los costes y los riesgos de no intervenir son mayores, pues las consecuencias podrían costar cientos de miles de millones a las arcas de la administración andaluza y estatal.
- Se deben tomar medidas para hacer frente en Andalucía al aumento del calor y al aumento del nivel del mar con estrategias adecuadas de adaptación que favorezcan especialmente a los más vulnerables (daños en las infraestructuras, problemas sanitarios, salinización, picos de consumo eléctrico en verano…).
Energía: Es urgente iniciar un tránsito urgente hacia la descarbonización de la economía.
- Se deben cerrar las centrales térmicas de carbón y progresivamente las de gas.
- Dado que Andalucía es una de las regiones españolas con mayor radiación solar, se debe fomentar el autoconsumo solar, con placas fotovoltaicas y energía solar térmica y aprovechando los tejados de todas las ciudades y de las industrias. Se debe regular y potenciar el balance neto. Una vez eliminadas trabas burocráticas y técnicas, junto con el absurdo impuesto al sol, se debe permitir vender la energía solar no consumida al precio de esa energía en la hora en la que se vierte a la red, de forma que se consiga mayor rentabilidad. Así, todos los que tengan un tejado podrán vender la energía solar que produzca y no utilicen.
- El informe también incluye recomendaciones para el sector forestal y para proteger la costa ya que ambos son sectores estratégicos para Andalucía, tanto económica como ecológicamente, pues son la base del sector turístico y residencial, y parte importante para el sector pesquero. Incluso, cita el caso de la construcción de la nueva academia de fútbol del Málaga en una zona inundable y de especial valor ecológico como Arraijanal, calificándolo de “error que no debemos permitir”. También se exige restaurar los terrenos del hotel ilegal de El Algarrobico.
- Córdoba y Málaga son dos ciudades firmantes del Pacto de Milán para promover una alimentación sostenible. Pero esa firma será poco efectiva si no cuenta con el apoyo del Gobierno andaluz. Uno de los objetivos del pacto es la reducción en el consumo de carne. Por su influencia directa en el cambio climático y en la contaminación, el Gobierno andaluz debe establecer mecanismos también para ese objetivo y todos los que incluye el citado pacto.
- La industria también debe ser mas ecológica y ser parte de la solución. Los astilleros, por ejemplo, pueden adaptarse para la fabricación de generadores eólicos, lo cual podrá impulsar la economía andaluza sin depender de la fabricación de barcos de guerra para Arabia.
Resumiendo, el informe pide que Andalucía sea referente en políticas ecológicas centrándose en reducir la dependencia de los combustibles fósiles como piedra angular para reducir la contaminación y dar un gran paso hacia la descarbonización. Es necesario que los ciudadanos y los políticos que sean elegidos se comprometan con esto y exijan compromiso a todas las empresas, empezando por las más contaminantes. Pero el primer paso es votar, votar con conciencia.
Ante las elecciones en Andalucía, el Observatorio de Sostenibilidad y Blogsostenible han analizado el que muy probablemente es el principal problema al que se presentan los andaluces en el futuro: el cambio climático. La conclusión es que en Andalucía se han incrementado las emisiones de CO2 desde que existen datos y además se observan cada vez más evidencias del cambio climático en el territorio, por lo cual puede concluirse que Andalucía no avanza hacia la descarbonización y, por ello, tampoco hacia un futuro más sostenibledescarbonización.