Qué obsesión tiene Antonio Garamendi con nuestros sueldos.
Cada pocos meses, el presidente de la CEOE aparece en algún medio volviendo a repetir lo mismo. El martes pasado, una vez más, la misma cantinela: “Pensamos que los trabajadores deberían recibir el sueldo bruto. Solo piensan en lo que han visto ingresado en el banco y si vieran que casi es el doble dirían: 'Bueno, pero, ¿a dónde va ese dinero'”?
Otra vez a repetirnos que todo va mal y que somos pobres porque el Estado nos quita mucho dinero en impuestos, que el problema es ese y no que cobremos una mierda. Todo esto es aún más divertido cuando recordamos que el propio Garamendi se posicionó completamente en contra de la subida del salario mínimo interprofesional mientras él se las apaña con un humilde sueldo de 380.000 euros al año.
Vamos a empezar pidiendo a Antonio que no nos tome por tontos. Eso de “a los ciudadanos les quitan la mitad de su sueldo” no creo que se aplique a la grandísima mayoría de los españoles que cobramos un salario mediano de 24.000 euros al año (15 veces menos que él, nada menos, y eso con suerte). Y, Antonio, ya sabemos perfectamente cuál es nuestro sueldo bruto y cuál es la diferencia con el dinero que de verdad llega a nuestra cuenta: viene literalmente en nuestra nómina. Tenemos en nuestra mano toda la información sobre nuestras deducciones, sobre el IRPF, sobre las cotizaciones a la Seguridad Social.
Garamendi nos anima a que nos preguntemos: “¿A dónde va el dinero que nos quitan de la nómina?”. Ya lo sabemos, Antonio: va a sufragar los gastos en sanidad, educación e infraestructuras que tanto necesitamos los que no tenemos un sueldo de 380.000 euros y no podemos permitirnos depender de los servicios privados. Pero, ya que haces la pregunta, sí que sería interesante tener toda la información sobre a dónde va ese dinero. Teniendo en cuenta que la CEOE se mantiene prácticamente gracias a subvenciones, parece que gran parte va para pagar tu exorbitante sueldo.
Garamendi nos anima a que nos preguntemos: “¿A dónde va el dinero que nos quitan de la nómina?” Ya lo sabemos, Antonio: va a sufragar los gastos en sanidad, educación e infraestructuras que tanto necesitamos
También el presidente de la CEOE mostró su disgusto con respecto a la propuesta de las “autobajas” médicas de tres días para los trabajadores. La propuesta fue duramente criticada por economistas que aseguraron que la baja de tres días costaría, en un primer cálculo, 2.274 euros por cada trabajador debido, sobre todo, a la “ausencia de productividad”. Parecerá una simpleza, y por supuesto que habría que detallar estas cifras y contextualizarlas, pero, ¿de verdad la confederación de empresarios nos dice que es una locura que un trabajador cobre 1.134 euros brutos al mes, pero que si ese trabajador falta tres días a trabajar, esos tres días de su ausencia le cuestan más de 2.000 euros a la empresa?
Repito, esto es una reducción al absurdo y depende de cada caso. Pero, de todas formas, nos recuerda una cosa: que el argumento de que es el empresario el que “crea riqueza” hace años que dejó de colar, y que sabemos perfectamente que quien crea esa riqueza es el trabajador. Ya sabemos perfectamente cuánto dinero nos “quita” el Estado en impuestos; lo que sería realmente interesante conocer es cuánto dinero nos quita el empresario en esa diferencia abismal existente entre lo que producimos y lo que nos paga.
“Nosotros bastante hacemos con generar riqueza”, decía en una entrevista hace unos años Garamendi cuando le preguntaban sobre el hecho de que en España existieran 2,5 millones de personas que, pese a tener un trabajo, estaban en el umbral de la pobreza. Yo diría que no estás generando riqueza, Antonio. Yo diría, más bien, que lideras a quienes nos la están robando a nosotros.
Qué obsesión tiene Antonio Garamendi con nuestros sueldos.