El propio Risto Mejide contaba en estos términos su iniciativa. Sacaba a subasta, al mejor postor, su columna del domingo en El Periódico de Catalunya; el dinero recaudado iría a parar a la Plataforma de Afectados por la Hipoteca:
La puja iba viento en popa:
Hasta que llegó este misterioso tuit, al que seguirían las algunas más:
Poco después, los más de 1,3 millones de seguidores de Risto, pudieron leer esta llamada al boicot:
Sus incondicionales, no se lo han pensado:
De forma paralela, la compañía justificaba en estos términos la decisión:
El propio Risto Mejide contaba en estos términos su iniciativa. Sacaba a subasta, al mejor postor, su columna del domingo en El Periódico de Catalunya; el dinero recaudado iría a parar a la Plataforma de Afectados por la Hipoteca: