La Fiscalía Anticorrupción, que dirige Antonio Salinas, investiga la cesión "gratuita" en 2005 por parte del Ayuntamiento del PP de Murcia de 135.577 metros cuadrados a la Universidad Católica de Murcia (UCAM), cuyo principal responsable es José Luis Mendoza, consultor del Pontificio Consejo para la Familia del Vaticano, según confirmó un portavoz oficial de este departamento a infoLibre: "La investigación no se va a archivar. Está plenamente vigente. Hemos pedido numerosa documentación, y ahora estamos a la espera de que nos la envíen", aseguró este portavoz, que confirmó también a este diario que las pesquisas están focalizadas en José Luis Mendoza, el presidente de la Fundación San Antonio, propietaria de la UCAM.
infoLibre tiene constancia de que las diligencias se iniciaron antes de abril de este año, y que desde entonces Anticorrupción ha solicitado numerosos documentos, como por ejemplo el convenio firmado en 2005, pero que no se ejecutó hasta un año después. Por su parte, José Luis Mendoza no ha querido hacer declaraciones a este diario, que el pasado 22 de noviembre le remitió por correo electrónico a su gabinete de prensa varias preguntas para conocer su versión de los hechos.
Donó casi 50 millones al Vaticano
Este empresario de Cartagena reconoció al diario El País haber donado casi 50 millones de euros al Vaticano desde que en 1986 creara la Fundación Universitaria San Antonio, con Juan Pablo II como pontífice. Su nombre saltó a la luz tras descubrirse que el que fuera mayordomo del papa Benedicto XVI, Paolo Gabriele, conocido como El Cuervo en la jerga vaticana, tenía en su poder un cheque de 100.000 euros cuyo origen era la propia Universidad Católica de Murcia (UCAM)El Cuervo .
La cesión de terrenos en la pedanía murciana de Guadalupe, según un convenio firmado en 2005 y al que ha tenido acceso infoLibre, fue "gratuita". Es decir, no incluyó ninguna compensación económica para el Ayuntamiento de Murcia, encabezado por Miguel Ángel Cámara (PP), imputado en el seno de la operación Umbra, que investiga la presunta cesión de terrenos a empresarios con importantes pérdidas para el Consistorio. En este caso también está imputado el que entonces era el concejal de Urbanismo de Murcia, Fernando Berberena, que fue uno de los impulsores del acuerdo.
El convenio firmado por el alcalde murciano y el propio Mendoza sí incluye, no obstante, el compromiso de la fundación de entregar al Ayuntamiento, "en concepto de donación para los fines y actividades sociales que la Administración determine, la suma de 2,3 millones de euros". Pero también se asegura que concedería becas a los estudiantes murcianos de esta universidad privada. También se anunciaba que el Consistorio podría tener acceso las instalaciones del centro docente, especialmente las deportivas. Según la oposición de IU, la mayor parte de estos puntos no se han llevado a cabo. Y esto es, entre otras cosas, la materia que está investigando la Fiscalía Anticorrupción.
Venta de los terrenos
Pero el Ministerio Público también trata de determinar la legalidad de otro punto del convenio, que permitiría que en 2019 Mendoza pudiera vender o incluso construir algún tipo de residencia o vivienda.
Mendoza, natural de Cartagena y con 14 hijos, ha mantenido lazos con el conocido movimiento cristiano Camino Neocatecumenal (los kikos). Es considerado como uno de los personajes laicos de mayor influencia en el Vaticano. De hecho, en 1996 consiguió que la Curia romana le respaldara en su decisión de crear una universidad católica. Tal y como destaca la página web de esta universidad privada, tanto Juan Pablo II como Benedicto XVI han confiado en Mendoza como consultor del Consejo Pontificio de la Familia.
A Mendoza se le atribuye también el haber convencido al entonces cardenal Joseph Ratzinger para que acudiera en 2003, tres años antes de ser elegido papa, a Caravaca de la Cruz (Región de Murcia) con motivo del año santo.
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Traslado de Reig Pla
Una prueba de su fuerza en el seno de la Iglesia, pese a ser laico, se atisba al recordar que en 2009 la Secretaría de Estado del Vaticano confirmó que la propiedad de la UCAM era de la Fundación San Antonio, presidida por Mendoza.
De esta forma, zanjaba una discusión iniciada nada menos que por el entonces obispo de la diócesis de Cartagena, Juan Antonio Reig Pla, que quería que el centro educativo fuera controlado por el obispado. Al final el prelado fue trasladado a la diócesis de Alcalá de Henares (Madrid).