La ONG Oxfam Intermón se mostró este jueves preocupada por el desplome de la ayuda humanitaria en España durante los años de crisis. Así, recogió en su infome La Realidad de la Ayuda queel retroceso de esta dotación presupuestaria, que ha pasado de 319 millones de euros en 2009 a 42 millones en el año 2013, es "un castigo incomprensible". Poco importa que en 2014 se reaccionase "in extremis a través de la dotación de créditos extraordinarios" para elevar a 57 millones de euros esta cantidad: "Todavía son muy insuficientes para que España cumpla con su cuota justa para responder a los conflictos armados (Siria, Yemen, República Centroafricana...) y desastres naturales", recoge el documento.
"España ha reducido al mínimo su ayuda humanitaria, destinando para ello un presupuesto similar al que tenemos en Oxfam", señala en conversación con infoLibre Jaime Atienza, director de Campañas y Ciudadanía de Intermón, que añade que nuestro país "se ha convertido en una ONG mediana como actor humanitario". En este sentido, recuerda que ese dinero "está destinado a personas que sufren crisis tremendas o que huyen de los conflictos armados y se ven obligadas a vivir en campos de refugiados". "Está dirigido a aquellos lugares con una necesidad mayor", repite.
Una decisión "poco responsable"
"Estamos ante un Gobierno que deja de apostar por ayudar a los más vulnerables", apunta en este sentido Blanca Carazo, responsable de Programas y Emergencias de Unicef España, que añade que afectará a "muchos niños y niñas" en un momento en el que "las necesidades humanitarias se han disparado". Por ello, considera que la reducción en ayuda humanitaria es algo "poco responsable" pero celebra que la sociedad española sea "solidaria" a la hora de colaborar con organizaciones como Unicef. "Mientras la ayuda estaba cayendo en picado, nosotros hemos aumentado nuestro número de socios", detalla.
En este sentido, pone el foco en Haití, un país con un 54% de la población viviendo en una situación de pobreza extrema y que ha pasado de recibir 105 millones de euros en 2009 a menos de 10 millones en el año 2014. "Que le recorten la ayuda es algo terrible. Estamos hablando de un país que es una tragedia en sí mismo", dice Atienza. Sin embargo, el director de Campañas y Ciudadanía de la ONG señala también otros casos alarmantes: Malí, que vio reducidas las aportaciones de 21,4 millones a 9,5; Guatemala, de 81,5 a 12,6 millones; Mozambique, de 49,5 a 8,6 millones; Sudán del Sur; o Etiopía, cuyas ayudas se redujeron de 29,8 a 6 millones. "Hay países en los que la disminución es especialmente sangrante", concluye.
El desmantelamiento de la ayuda al desarrollo
En cifras generales, la cooperación internacional, tal y como denuncia la ONG, "ha sido la política pública más recortada" durante los años de crisis. Así, según los datos facilitados por Oxfam Intermón, la ayuda oficial al desarrollo (AOD) –incluye la ayuda bilateral, que se otorga directamente a los países y que engloba la partida de ayuda humanitaria, y la multilateral, que se da a terceros organismos– se ha reducido un 70% desde el año 2008 –pasando de 4.762 millones de euros a 1.415–. Si ponemos el foco sólo en la última legislatura, la caída ha sido del 53%, reduciéndose de 2.988 millones de euros en 2011 a dedicar a esta materia un total de 1.415 millones en el año 2014, último del que se tienen datos.
"Es una aportación marginal y miserable", critica Atienza. El director de Campañas y Ciudadanía de Oxfam Intermón también hace referencia al desplome de las ayudas multilaterales que reciben otros organismos. "Las aportaciones al Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo se han reducido un 94% desde 2011, un 88% a Unicef, un 90% a ACNUR y un 91% a ONU Mujeres", explica, añadiendo a renglón seguido que se han producido "recortes brutales" en "todos los campos". "Esta reducción refleja una falta de compromiso con los derechos humanos", añade Carazo.
"Relanzamiento urgente"
Grupos de la oposición en el Congreso acuerdan con Oxfam elevar a 150 millones los Presupuestos para ayuda humanitaria en 2018
"Plantear recortes en este sentido tiene un impacto directo sobre millones de personas en el mundo", recuerda Atienza. Es por esto que el informe publicado este jueves pide "un relanzamiento urgente" de la política de cooperación y desarrollo para que España "vuelva a jugar en la comunidad de donantes el papel que nunca debió abandonar". "Es como si hubiese dimitido de su papel en la comunidad internacional", señala el responsable de Oxfam Intermón, que pone la vista en el papel que jugaba nuestro país durante el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero.
Actualmente España invierte en ayuda oficial al desarrollo un 0,13% del PIB, muy por debajo del objetivo del 0,7% marcado por Naciones Unidas y del 0,42% de promedio dentro de la Unión Europea. Sólo dedica menos a esta materia Grecia, con un 0,10%, mientras que países como Francia (0,36%) y Alemania (0,41%) doblan la cifra. Atrás quedaron los años en los que España se encontraba entre los 11 países que más dinero dedicaban en cooperación internacional y ayuda al desarrollo, llegando a alcanzar el máximo del 0,45% del PIB en el año 2009.
"El siguiente Ejecutivo tiene la responsabilidad de recuperar este papel que teníamos hace unos años", afirma Atienza. En este sentido, y con la vista puesta en los partidos políticos con el objetivo de llegar a acuerdos, el director de Campañas y Ciudadanía de Oxfam Intermón asegura que en los programas de las formaciones para las elecciones del 20-D se encuentran "propuestas bien orientadas". Sin embargo, afirma que en los debates políticos "los líderes dedican poco tiempo" a hablar sobre este tema. "El Gobierno que pueda ponerse en marcha tiene una gran responsabilidad", sentencia.
La ONG Oxfam Intermón se mostró este jueves preocupada por el desplome de la ayuda humanitaria en España durante los años de crisis. Así, recogió en su infome La Realidad de la Ayuda queel retroceso de esta dotación presupuestaria, que ha pasado de 319 millones de euros en 2009 a 42 millones en el año 2013, es "un castigo incomprensible". Poco importa que en 2014 se reaccionase "in extremis a través de la dotación de créditos extraordinarios" para elevar a 57 millones de euros esta cantidad: "Todavía son muy insuficientes para que España cumpla con su cuota justa para responder a los conflictos armados (Siria, Yemen, República Centroafricana...) y desastres naturales", recoge el documento.