Ayuso apuesta por un gobierno continuista con solo dos nombres nuevos

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La recién investida presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, apuesta por un Gobierno continuista de cara a los dos años de legislatura, aunque algo más pequeño que el que tenía antes de que se precipitase el adelanto electoral. La nueva estructura estará integrada por nueve consejerías y no contará con vicepresidencia, una reducción algo menor que la que exigía la extrema derecha –Vox pedía siete–. En relación con los nombres, no hay grandes cambios. Siguen los consejeros conservadores que entraron con ella en 2019, a los que se suman Marta Rivera de la Cruz –formó parte del anterior gabinete pero de la mano de Ciudadanos–, Concepción Dancausa y Carlos Izquierdo.

El hecho de que Ayuso incluyese en los primeros puestos de su lista electoral a quienes le habían acompañado en sus primeros dos años en la Puerta del Sol hacía pensar que todos ellos, o al menos la gran mayoría, volverían a integrar un futuro Ejecutivo en caso de que la candidata conservadora consiguiese revalidar la Presidencia. Y así ha sido. Enrique López seguirá, durante los dos próximos años, como consejero de Presidencia, Justicia e Interior, mientras que Enrique Ossorio continuará como portavoz del Gobierno, una función que ha asumido desde la convocatoria electoral, y consejero de Educación, Universidades y Ciencia.

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La cartera de Economía, Hacienda y Empleo estará encabezada por Javier Fernández-Lasquetty. Y Paloma Martín se hará cargo de Medio Ambiente, Agricultura y Vivienda, una responsabilidad esta última que deja de asumir David Pérez, que durante los dos próximos años llevará las riendas de Transportes e Infraestructuras. Quien seguirá con sus funciones intactas será Enrique Ruiz Escudero, a quien Ayuso alabó por la gestión de la pandemia durante toda la campaña electoral y que continuará al frente de la Consejería de Sanidad durante esta legislatura.

También volverá a formar parte del Ejecutivo regional Marta Rivera de la Cruz, quien se hará cargo de la Consejería de Cultura, Turismo y Deportes. Aunque en esta ocasión no lo hará, como en 2019, de la mano de Ciudadanos, partido del que se dio de baja tres días después de los comicios electorales. Desde la convocatoria electoral para el 4M, la presidenta madrileña siempre hizo guiños a Rivera de la Cruz, que incluso llegó a acudir tras la ruptura del Gobierno a algún acto con Ayuso.

En el nuevo Ejecutivo habrá, por tanto, solo un par de nombres nuevos. El de la exdelegada del Gobierno en Madrid y expresidenta de la Asamblea, Concepción Dancausa, que pasa de ser viceconsejera de Vivienda para asumir el cargo de consejera de Familia, Juventud y Política Social. Junto a ella, asume por primera vez también una cartera en el Ejecutivo de Ayuso el diputado conservador Carlos Izquierdo. No es la primera vez que asume un cargo de responsabilidad. Ya ejerció como consejero de Políticas Sociales o Medio Ambiente entre 2012 y 2019.

La recién investida presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, apuesta por un Gobierno continuista de cara a los dos años de legislatura, aunque algo más pequeño que el que tenía antes de que se precipitase el adelanto electoral. La nueva estructura estará integrada por nueve consejerías y no contará con vicepresidencia, una reducción algo menor que la que exigía la extrema derecha –Vox pedía siete–. En relación con los nombres, no hay grandes cambios. Siguen los consejeros conservadores que entraron con ella en 2019, a los que se suman Marta Rivera de la Cruz –formó parte del anterior gabinete pero de la mano de Ciudadanos–, Concepción Dancausa y Carlos Izquierdo.

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