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Las contradicciones del PP con los presupuestos: Ayuso y Mañueco suben más sus gastos que el Gobierno

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, durante su intervención en la clausura de la convención sectorial "Juventud, un proyecto de vida. A la altura de un gran país", el pasado lunes en el Centro Cultural Casa del Reloj.

De muchos números y mucha política. El Gobierno consiguió sacar adelante el primer gran debate de los presupuestos esta semana, logrando tumbar las enmiendas a la totalidad. Dos días de intenso parlamentarismo, que tuvo su momento álgido en el cara a cara entre la titular de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, y la portavoz del PP, Cuca Gamarra. Y con la popular dibujando su particular ‘España negra’ para desgastar al Ejecutivo y desprestigiar las cuentas para el año que viene. 

El PP lleva semanas machacando con el proyecto de presupuestos, presentándolo como irreal y con previsiones que no se ajustan al clima de incertidumbre. Su mensaje ante la ciudadanía: sólo el PP puede llevar la economía. Una estrategia que siempre han utilizado los conservadores: la imagen de buenos gestores y con la máxima de el caos o yo. Pero tanto el discurso de Gamarra como el de otros dirigentes del PP estas semanas hace aguas por muchos lados y presenta contradicciones. Y lo que critican… luego lo hacen con creces en autonomías donde gobiernan.

“Gastar, gastar, gastar”, repitió Gamarra contra Montero, ahondando en esa crítica que lanzan de Gobierno derrochador. Los presupuestos generales diseñados por Hacienda tienen un techo de gasto para 2023 de 198.221 millones de euros, una cifra récord, superior en un 1,1% del monto del año pasado (196.142 millones de euros). Un incremento porcentual que es muy inferior al de los presupuestos que presentaron esta semana Madrid y Castilla y León.

Los presupuestos de Ayuso y Mañueco

El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso aprobó unas cuentas para el año que viene con un gasto de 25.738 millones de euros, lo que supone un incremento del 11,7% respecto a 2022. Y ese aumento se hace con una previsión de crecimiento del proyecto de un 1,8%. Es decir el “gastar, gastar, gastar” que decía Gamarra es mucho más aplicable a la Puerta del Sol.

Pero esta pauta criticada por el PP en el Congreso de los Diputados tiene un ejemplo todavía más abultado en la comunidad de Castilla y León. El Gobierno del Partido Popular y Vox presentaron este jueves su primer proyecto de cuentas, que son las “más altas de la historia”, como presumieron. En total, el gasto será de 13.809 millones de euros, lo que significa un 12,35% más que el anterior. Una cifra muchísimo más alta que la de Hacienda central y, por tanto, esta administración va a gastar mucho más porcentualmente que el Gobierno del PSOE y Unidas Podemos. 

Gamarra deslizó durante todo el debate que el Gobierno hacía esas cuentas expansivas con fines electorales y achacó el incremento del gasto social a ese intento de ganar votos. Pero ese supuesto elemento electoral también estaría también en las cuentas de los gobiernos del PP, ya que se enfrentan a elecciones autonómicas y municipales en mayo del año que viene. Por lo tanto, en su argumentación, el incremento de Ayuso debería ser también para ganar votos en las urnas dentro de siete meses. Y, además, las dos administraciones presumen de incrementar su gasto social, justo lo que se le achaca a Moncloa.

Otra de las contradicciones del Partido Popular es acusar al Gobierno de no proteger realmente a la clase trabajadora. Lo que no recordó Gamarra es que, por ejemplo, la bajada de impuestos en Andalucía no ha ido a ese sector precisamente, sino a las clases altas a través de la eliminación del Impuesto de Patrimonio, que afecta sólo al 0,2% de la población y supone dejar de recaudar unos 93 millones de euros. Ese tributo ya está eliminado en Madrid y Galicia anunció hace unas semanas que lo rebajará al 50%.

De sueldos y cargos

Gamarra, al igual que ha hecho el PP en las últimas semanas, se lanzó contra el sueldo del Gobierno y el número de altos cargos. Los miembros del Ejecutivo ganarán un 4% más el año que viene, aplicándose el acuerdo pactado en la mesa de funcionarios. Por ello, la nómina anual de Pedro Sánchez ascenderá en 2023 a 90.010 euros. El de las tres vicepresidentas (Nadia Calviño, Yolanda Díaz y Teresa Ribera) será de 84.600,72 euros. Estos sueldos son más bajos que algunos de los cargos de las administraciones gobernadas por el Partido Popular y que son referentes para Génova 13. José Luis Martínez-Almeida es el alcalde mejor pagado de España, con 108.517,80 euros, e Isabel Díaz Ayuso cobra 103.090,32 euros.

Y sobre los altos cargos, el Gobierno del PP y Vox en Castilla y León ha aumentado de 93 a 99. Según los datos que maneja Hacienda, en la Administración General del Estado hay un alto cargo por cada 62.000 habitantes, que en Castilla y León es por cada 32.000 habitantes y en Andalucía por cada 57.000 habitantes.

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El Partido Popular también incurrió en otra contradicción. Ahora pide extender, más allá del 31 de diciembre, la reducción del IVA al 5% en luz y gas, cuando se ha abstenido hasta en dos ocasiones y una vez votó en contra del paquete de medida que incluía rebajas en este impuestos. Ya en la última votación del jueves sobre el decreto presentado por Teresa Ribera sí se sumó al sí.

Los presupuestos también han sido criticados por cargos del Partido Popular con otros argumentos durante estas semanas. Por ejemplo, desde el Gobierno de Madrid se ha acusado a María Jesús Montero de ir contra la comunidad. De hecho, la presidenta llegó a acusar a Sánchez de querer “anular” a esta autonomía en las cuentas de 2023. Pero en la inversión territorializada es de las autonomías que más sube este año, con un 13,37% respecto a 2022. Además, la comunidad con mayor inversión por parte del Gobierno central es precisamente una gobernada por el PP, Andalucía. Y luego aparece Cataluña, cuyo Govern es de ERC. La primera socialista está en cuarto lugar: la Comunidad Valenciana.

Estas contradicciones del PP son a nivel externo y también internacional, dentro de su familia política europea. Gamarra le afeó a Montero: “Su balance con los fondos europeos se llama ineficacia”. Justo esta misma semana, Bruselas reiteró al PP europeo que desembolsa el dinero de los fondos a España porque “los objetivos se cumplen”. 

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