El enfrentamiento entre Susana Díaz y Pedro Sánchez por el control del PSOE quedó patente este jueves con la entrega de los avales. La presidenta de la Junta de Andalucía se impuso y batió récords con más de 63.610 firmas, pero el equipo del ex secretario general le siguió de cerca al superar las 57.369 rúbricas. Casi 6.000 apoyos separan a Díaz y Sánchez, a falta de que se complete el proceso de verificación. El equipo de Patxi López, en un distante tercer lugar, entregó 12.000 avales.
Así las cosas, los tres superaron con cierta holgura el listón de los 9.368 avales necesarios para competir en el proceso. La cifra equivale al 5% del censo provisional de 187.360 militantes que Ferraz dio a conocer el 20 de abril, cuando comenzó la fase de recogida de avales. El censo definitivo para las primarias es de 187.949 militantes, pero como se conoció después de comenzar la recogida de avales, los precandidatos acordaron calcular las firmas necesarias sobre el censo provisional.
Susana Díaz partía en principio con ventaja en esta fase gracias a que cuenta con el apoyo de la mayoría del aparato del partido. La candidata andaluza veía en esta fase "la primera gran batalla" de las primarias y quería "avasallar" y "apabullar" a Sánchez con una demostración de fuerza, presentando un gran número de avales. De hecho, consideraba que si su resultado y el de Sánchez eran similares, esto supondría una inyección de moral para el antiguo secretario general, ahora sin casi apoyos orgánicos.
Tras registrar los avales, Nino Torre, secretario general de Juventudes Socialistas y miembro del equipo de Susana Díaz, afirmó que la cifra de 63.610 avales logrados por la aspirante refleja la "ilusión" que despierta la presidenta andaluza. Agregó que no tiene "ninguna duda" de la victoria de Díaz en las primarias y sostuvo que después vendrá la "gran victoria del PSOE al PP en las próximas generales". Preguntado por la cifra de avales de Sánchez, pidió esperar a las "cifras oficiales" del recuento.
Sánchez y López, en cambio, habían tratado de restar importancia estas semanas al número de avales. Los partidarios del exlíder afirmaban que las firmas eran sólo "un trámite" donde "las presiones" del aparato podían beneficiar a Susana Díaz, porque el aval es público, mientras que en la votación del 21 de mayo pronosticaban "sorpresas" y "voto oculto" a favor de Sánchez, al que veían con opciones de victoria. El propio exlíder había admitido en los últimos días la posible victoria de Díaz en avales.
Sin embargo, la cifra de 57.369 firmas registradas supone casi un empate técnico con Susana Díaz y supera, por ejemplo, en 16.000 los avales que consiguió en 2014, cuando tenía el apoyo de la mayor parte del aparato, mientras que ahora carece de grandes apoyos orgánicos. "No contamos con los aparatos que cuentan otros", recalcó Santos Cerdán, secretario de Organización del PSOE de Navarra y representante de la candidatura, que agregó que "ni en los mejores presagios" esperaban reunir tantas firmas.
Cerdán insistió en que los socialistas tienen que volver a "ser el referente de la izquierda de este país", pidió a los militantes que "piensen en qué proyecto quieren para el PSOE" y agradeció su trabajo a las plataformas de militantes que, "sin contar con estructuras territoriales", han dejado al exlíder a un paso de superar a la dirigente andaluza en esta primera fase de las elecciones internas. "Las previsiones han sido sobrepasadas. Compañeros, mil gracias. En sus manos está el futuro del partido", concluyó.
López, en tercer puesto
El equipo de López, por último, había avanzado que no entraría en un "campeonato de avales" y se limitaría a presentar las firmas "imprescindibles" para poder participar, siempre con un margen de seguridad suficiente. La candidatura del vasco rechazaba que la posibilidad de ser tercera en la recogida de avales implique que tiene menos opciones de ganar las elecciones internas, y este jueves insistió en esa idea tras quedar en un distante tercer lugar, habiendo registrado 12.000 rúbricas.
El senador Óscar López, coordinador de la campaña del exlehendakari, aseguró que la entrega de avales no es "una meta volante" sino la "parrilla de salida", y que se han limitado a "cumplir un requisito estrictamente". Agregó que el equipo del aspirante vasco había logrado más firmas, pero que optó por no entregar todas y por ceñirse a un número redondo que incluyera, además, un "colchón" suficiente.
López rechazó que ser terceros en avales implique ningún "desánimo" o que reduzca las opciones de victoria del exlehendakari. Expresó que a su juicio los militantes "conocen la organización" y saben que el aval "no es más que un requisito", de modo que, mientras otros optan por "llenar mítines con autobuses" o "traer no sé cuántos avales", los partidarios de Patxi López seguirán manteniendo una campaña "sencilla" y "honesta". "Esta candidatura mantiene intactas sus esperanzas de ganar este congreso", zanjó.
El precedente de 2014
En las primarias de 2014, en las que se enfrentaron Pedro Sánchez, Eduardo Madina y José Antonio Pérez Tapias, el primero de ellos se impuso en la ronda de avales y fue después el ganador de las elecciones internas. Sánchez logró unos 41.000 avales por los 26.000 de Madina y los aproximadamente 10.000 del representante de Izquierda Socialista. La ventaja de Sánchez se debió en buena parte al resultado en Andalucía: allí logró 14.389 firmas por sólo 2.698 de Madina.
La participación de las bases socialistas en la fase de avales también se ha incrementado mucho con respecto a aquellas elecciones internas. Entonces avaló a algún precandidato en torno al 40% de los afiliados del PSOE, mientras que ahora unos 130.000 de los 187.949 militantes del PSOE han participado en este proceso avalando a uno de los tres aspirante, lo que supone un porcentaje de en torno al 70%.
Jornada de recuento
Sánchez pide a López que se una a su candidatura e incorpora 12 de sus propuestas
Tras concluir a mediodía el plazo de entrega de avales, Ferraz se encargará de su recuento. A las cifras facilitadas por las tres candidaturas habrá que sumar los avales que los afiliados hayan remitido directamente a la sede del partido. En el caso de la candidatura de Susana Díaz son en torno a 900 firmas adicionales, que podrían llevarla a superar el listón de las 63.000. El resto de equipos no facilitaron cifras.
Según informó el PSOE, el proceso de verificación se desarrollará en la sala Ramón Rubial de la sede socialista, donde habitualmente se celebran las reuniones del Comité Federal. El acceso a la sala estará controlado durante todo el proceso y solamente podrán acceder miembros de la Comisión de Ética y Garantías y del Comité Organizador, y dos representantes de cada precandidatura.
En primer lugar, se realizará un recuento manual de los avales presentados por las diferentes precandidaturas, verificando que los impresos son los oficiales y vienen firmados por los representantes autorizados. Una vez se completen todas las fases de verificación, los avales válidos serán destruidos inmediatamente, dejando solamente los avales invalidados y sobre los que exista reclamación. Se espera que el resultado del recuento se conozca muy avanzada la jornada del jueves, ya por la noche. De haber alguna polémica, deberá resolverse antes del lunes 8 de mayo, cuando se proclamarán como tarde las candidaturas.
El enfrentamiento entre Susana Díaz y Pedro Sánchez por el control del PSOE quedó patente este jueves con la entrega de los avales. La presidenta de la Junta de Andalucía se impuso y batió récords con más de 63.610 firmas, pero el equipo del ex secretario general le siguió de cerca al superar las 57.369 rúbricas. Casi 6.000 apoyos separan a Díaz y Sánchez, a falta de que se complete el proceso de verificación. El equipo de Patxi López, en un distante tercer lugar, entregó 12.000 avales.