Las 11 horas que permanecieron abiertas las urnas este 24 de mayo han fulminado las dos décadas de poder absoluto del PP en la Comunidad Valenciana, epítome y símbolo de la corrupción en España. Con el 91,65% de los votos escrutados, la conclusión es inequívoca: Alberto Fabra, presidente en funciones de la Generalitat y líder regional del partido, ha perdido el Gobierno y nada menos que casi la mitad de los votos cosechados en 2011.
En una Cámara donde la mayoría absoluta se localiza en 50 escaños, al PP, que retrocede desde 55 asientos hasta 31, ni siquiera le vale una eventual alianza con Ciudadanos. La formación de Albert Rivera entra en Les Corts con 13 actas.
Los socialistas de Ximo Puig, que se mantienen como segunda fuerza con 23 escaños -10 menos que en 2011-, solo necesitan para gobernar un pacto a dos bandas con Compromís o a tres si se suma Podemos.
La Policía detiene al delegado del Gobierno en la Comunidad Valenciana
Compromís, la formación de Mónica Oltra que en la precampaña destapó con el Ritaleaks los gastos suntuarios de la todavía alcaldesa Rita Barberá y su equipo, experimenta un salto vertiginoso que triplica sus escaños: de seis pasa a 19. Podemos llega a la Cámara autonómica con 13 parlamentarios.
Tras una campaña jalonada por revelaciones diarias sobre el caso de Alfonso Rus, el todavía alcalde de Xátiva -el PP se convierte allí en tercera fuerza- cuya voz muestran las grabaciones en el momento de contar billetes de banco, el PP aparece con el gran perdedor.
Paradójicamente, el segundo castigado de la noche es Esquerra Unida (EUPV), la organización regional de IU, que pierde sus cinco diputados. Fue EUPV la que destapó las cintas que delatan a Rus.
Las 11 horas que permanecieron abiertas las urnas este 24 de mayo han fulminado las dos décadas de poder absoluto del PP en la Comunidad Valenciana, epítome y símbolo de la corrupción en España. Con el 91,65% de los votos escrutados, la conclusión es inequívoca: Alberto Fabra, presidente en funciones de la Generalitat y líder regional del partido, ha perdido el Gobierno y nada menos que casi la mitad de los votos cosechados en 2011.