Pablo Casado, candidato a liderar el PP a partir del próximo congreso nacional del partido, lleva desde que dio un paso al frente erigiéndose en el garante de los "principios y valores" que llevaron a la formación a amplias mayorías absolutas. Y este martes su candidatura buscó un golpe de efecto sumando el apoyo de María San Gil.María San Gil La exlíder de los conservadores de Euskadi es vista por un sector de la derecha como una referente moral que fue injustamente tratada por Mariano Rajoy en los meses previos al XVI Congreso Nacional del PP, celebrado en Valencia en junio de 2008. Por aquellas fechas, San Gil dio un portazo a su jefe de filas, abandonó la redacción de la ponencia política para el citado cónclave y después de desvincularía del PP vasco.
El apoyo de San Gil se suma al de Esperanza Aguirre, expresidenta de la Comunidad de Madrid y al de antiguos colaboradores de la lideresa. No obstante, en el equipo de Pablo Casado niegan que la suya sea la candidatura del pasado o que pueda plantearse como una batalla del aznarismo contra el marianismo. El candidato, insisten, no reniega del pasado del PP, pero piensa en el futuro. "No tiene mochila. Su idea siempre es sumar, no purgar. No debe nada a nadie", relata uno de sus fieles en conversación con infoLibre.
En este sentido, destacan que, si gana, su idea es integrar a compañeros de todas las candidaturas que concurrieron a las urnas el pasado 5 de julio porque el grueso de las ideas que defendían encajan con su proyecto de PP. "No tenemos tan claro que si gana Soraya [Sáenz de Santamaría] la integración vaya a ser tan amplia como la que pretende Pablo", añaden.
"¿La revancha?"
Hay un sector del PP que estos días dice estar asistiendo a una reedición de las tensiones previas al congreso que se celebró hace poco más de 10 años en Valencia. "Hubo un gran frente anti-Rajoy", asegura un diputado que comparte esta tesis. "Nos equivocaríamos mucho si nos tomamos este congreso como una especie de revancha", añade.
"No miramos atrás, somos el futuro, pero eso no implica que tengamos que renegar de lo mejor de nuestra historia y que no podamos, desde la lealtad, decir que hay cosas que se pueden hacer mejor", sostiene un diputado regional que se ubica en el sector pablista.
Frente a estos argumentos hay en el PP quienes creen que el candidato está haciendo una campaña "bastante agresiva" y dudan de que el tono y los mensajes vayan encaminados a consolidar al partido como la referencia en el centroderecha.
Casado escogió la Casa de Vacas del parque de El Retiro en Madrid como marco del acto, sobre libertades, en el que fue acompañado por San Gil. La elección no fue casual. Es una de las comunidades autónomas en las que está más fuerte. También fue en Madrid donde Aguirre acogió a los fieles a la expresidenta del PP vasco cuando esta se marchó del partido.
Casado "avanza" en Andalucía
Pero en el equipo de Casado aseguran que les va "bastante bien" y no sólo en Madrid. Sostienen que en Andalucía avanzan "cada día" hasta el punto de "estar muy igualados con Soraya Sáenz de Santamaría".
Santamaría venció en cinco de las ocho provincias andaluzas, el resto fue para Cospedal. De hecho, esta comunidad fue la clave de la victoria de la exvicepresidenta del Gobierno.
En el entorno del exresponsable de Comunicación del PP aseguran que hay "sintonía" con la candidatura de María Dolores de Cospedal y que dirigentes de la máxima confianza de la secretaria general como Vicente Tirado y Agustín Conde ya están colaborando con su equipo.
"Se están haciendo llamadas y el reparto de compromisarios va bien", destacan. En esta fase ya no votan los afiliados inscritos, sino los compromisarios. La decisión final, pues, está en manos de 3.184 delegadosestá en manos de 3.184 delegados. Mas de 1.000, calculan en el círculo de confianza de Cospedal, están con ella pese a no ser ya candidata y el grueso de ellos optarían por Casado.
Esperando un gesto de Feijóo
A la espera de un pronunciamiento de Alberto Núñez Feijóo, que podría inspirar el voto de los compromisarios gallegos, en el entorno de Casado se ven con posibilidades en todas las comunidades menos en Castilla y León, la Comunidad Valenciana y Euskadi. Los conservadores de esta última comunidad están en manos de Alfonso Alonso, exministro de Sanidad y uno de los apoyos de Santamaría, aunque es una comunidad que aporta muy pocos delegados
Este miércoles, a las 18.45, Casado se reunirá con compromisarios de Galicia en el Hotel Palacio del Carmen de Santiago, el mismo hotel en el que Feijóo anunció, para sorpresa de casi todos sus compañeros de partido, que no iba a pelear por suceder a Mariano Rajoy. Está previsto que el candidato coincida con el presidente de la Xunta de Galicia.
En la candidatura de Sáenz de Santamaría consideran que su rival "ha inflado" los apoyos con los que dice contar y creen que es "peligroso hacer según qué cálculos" porque el voto es secreto. Mientras, desde la de Casado se quejan de que su rival esté "ofreciendo cargos a lo compromisarios" a cambio del voto en el congreso que se celebrará los días 20 y 21 de julio en Madrid y aseguran que "cada vez son menos los barones" que piden una candidatura única.
Otras fuentes del partido precisan que hay que tener en mente a la hora de hacer análisis que la gente va a votar a quien creen en condiciones de ganar y asegurarles su futuro. Así, se muestran convencidos de que algunos de los mensajes de Casado de los últimos días criticando decisiones del Gobierno de Rajoy no están gustando entre quienes votaron a Cospedal porque ella, como Santamaría, son dos grandes defensoras de la labor del expresidente.
El debate pierde fuerza
La decisión de los fieles a Cospedal: votar por lealtad o por conveniencia
Este jueves la Comisión Organizadora del Congreso (COC) se reunirá para ir cerrando flecos de cara al congreso. Sobre la mesa también estará la petición de Casado de que se celebre un debate. Una idea, no obstante, que parece destinada a caer en saco roto porque ni entusiasma al equipo de Santamaría ni tampoco a la dirección del partido. No creen que sea buena idea "regalar" a sus adversarios políticos una ración de pelea interna entre dos cargos del PP en horario de máxima audiencia.
En el equipo de Casado no entienden por qué no se ve con buenos ojos que ambos expongan sus programas. Pero aseguran que no van a dar batalla por ello.
Este martes, a partir de las 21.00 horas, los integrantes del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso estaban convocados a una cena en un restaurante próximo a la Cámara Baja. Estaba previsto que coincidiesen los dos candidatos que, al cierre de esta edición, seguían teniendo un encuentro pendiente.
Pablo Casado, candidato a liderar el PP a partir del próximo congreso nacional del partido, lleva desde que dio un paso al frente erigiéndose en el garante de los "principios y valores" que llevaron a la formación a amplias mayorías absolutas. Y este martes su candidatura buscó un golpe de efecto sumando el apoyo de María San Gil.María San Gil La exlíder de los conservadores de Euskadi es vista por un sector de la derecha como una referente moral que fue injustamente tratada por Mariano Rajoy en los meses previos al XVI Congreso Nacional del PP, celebrado en Valencia en junio de 2008. Por aquellas fechas, San Gil dio un portazo a su jefe de filas, abandonó la redacción de la ponencia política para el citado cónclave y después de desvincularía del PP vasco.