El Gobierno moviliza 200.000 millones para evitar que el coronavirus tumbe el empleo y hunda la economía

La mayor movilización de recursos públicos de la historia democrática de España. El Consejo de Ministros puso este martes sobre la mesa un plan para movilizar 200.000 millones de euros —el 20% del PIB anual de España— para atajar la catástrofe que se cierne sonde el empleo, las empresas y los autónomos españoles como consecuencia de la paralización de la actividad económica provocada por la declaración del estado de alarma y las medidas de confinamiento que han detenido bruscamente todo el país en un intento de frenar la expansión del coronavirus que, a día de hoy, ya ha causado 491 muertes y ha infectado a 11.178 personas. Hasta 83.000 de esos 200.000 millones saldrán del sector privado, explicó en rueda de prensa el presidente Pedro Sánchez. “Haremos lo que sea necesario, cuando sea necesario y donde sea necesario”, repitió un día más.

El objetivo de semejante desembolso, que tendrá lugar además en un breve espacio de tiempo, es evitar que la paralización de la economía deje daños permanentes en el empleo y el tejido productivo español, de manera que cuando la crisis sanitaria se supere, un objetivo que el Gobierno sigue creyendo que se puede alcanzar en uno o dos meses, trabajadores y empresarios estén en condiciones de relanzar el crecimiento “sin dejar a nadie atrás”. Salir del la crisis del coronavirus en forma de V y no de L, explicó Sánchez de forma gráfica.

Las medidas aprobadas este martes incluyen 600 millones para la prestación de servicios básicos a comunidades autónomas y entes locales, garantías para los suministros y los servicios de comunicaciones y una moratoria de las cuotas de hipotecas para personas de situación de especial vulnerabilidad —no se aplicará la misma medidas a quienes vivan de alquiler—.

El grueso del dinero se destinará a una línea de avales con valor de hasta 100.000 millones que, según los cálculos del Ejecutivo, permitirá movilizar entre 150.000 y 200.000 millones en el sistema económico con la incorporación del sector privado, así como una línea de avales de 2.000 millones para empresas exportadoras con mecanismos ágiles y medidas para facilitar la reestructuración de créditos a exportación agrarias afectadas por la sequía.

“Entramos en una fase trascendental”, subrayó Sánchez en la que vendrán “días muy duros” y durante los cuales será esencial  “mantener la unidad” y alejarse “del ruido”. “Tiempo habrá”, añadió en referencia indirecta a las críticas que ha recibido durante las últimas semanas, para “sacar lecciones”. Aunque la primera de ellas, anticipó, tendrá que ser que “hay que reforzar el sistema nacional de salud y el estado de Bienestar”. 

Del mismo modo, al hilo de las críticas que han comenzado a arreciar contra el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias del Ministerio de Sanidad, Sánchez quiso hacer una defensa expresa de los técnicos y científicos en cuyo criterio está apoyando todas y cada una de sus decisiones y, especialmente, de la la figura de su director, el doctor Fernando Simón.

Durante la rueda de prensa el presidente enfatizó en varias ocasiones la importancia de que todo el mundo contribuya a luchar contra el virus y a proteger la economía española. La duración de la pandemia, subrayó, va a depender “de todos nosotros”. Será “muy importante mantener la disciplina social cuando lleguen los días más duros”. “La contribución de todos hará que esto pase antes”.

La crisis sanitaria, recordó, será temporal. Pero será necesario formar “una cadena de solidaridad” en la que participen trabajadores y empresarios con el fin de “moderar el impacto” de sus consecuencias económicas. La “movilización colosal” se rcursos opúbvlicas aprobada este martes no será duficiente , remarcó, si los empleados y las empresas mo asumen que se trata de una situaciónt temporal “que debe tratarse como temporal”.

Sánchez defendó también el trabajo de su Gobierno y negó la existencia tanto de discrepancias como de falta de confianza en el buen hacer del equipo humano al servicio del Ministerio de Sanidad. “Los debates son necesarios” dentro del Consejo de Ministros, especialmente en “horas críticas” como las que estamos viviendo. Pero “actúa unido” y con una “única voz”, advirtió. Tampoco, aseguró, hay problemas con las comunidades autónomas, a las que volvió a agradecer su trabajo y su colaboración, “aunque pueda haber distintas visiones”, admitió.

El presidente quiso además poner un horizonte en cuatro fases en la pelea contra el virus en el que, señaló, habrá varios “hitos” a superar. El primero será “doblegar” la curva de propagación, algo que el Gobierno espera conseguir en apenas “unos días”, gracias a las medidas de confinamiento puestas en marcha este fin de semana.

El segundo llegará cuando registremos más altas médicas que nuevos infectados, lo que según los técnicos tendrá lugar en “semanas”. El tercero, que nos acercará a la “victoria” sobre la pandemia, será cuando los nuevos contagios caigan a la misma velocidad con la que que crecen estos días. La victoria “será total”, explicó, cuando seamos capaces de dar con una vacuna capaz de erradicar la enfermedad.

Regulaciones de empleo

Las medidas aprobadas en el Consejo de Ministros incluyen la exoneración del pago de cotizaciones a aquellas empresas que, en lugar de despedir trabajadores, se acojan a expedientes de regulación de empleo temporales (ERTE) . Todos los ERTE se considerarán realizados por fuerza mayor, se gestionarán con rapidez, y todos los trabajadores afectados por estos procedimientos tendrán derecho a cobrar el paro aunque no cumplan con el periodo de cotización mínimo exigido para ello. Además, no se considerará consumido el tiempo que dure la percepción de esta prestación.

El Estado será el que se haga cargo de las prestaciones por desempleo de todos los trabajadores que se vean afectados por ERTE mientras dure la crisis sanitaria. “Se prioriza así la suspensión de contratos y reducción de la jornada frente a los despidos”, subrayó Sánchez al tiempo que hacía llamamiento a los empresarios para que se acojan a estas medidas en lugar de recortar plantillas.

El decreto aprobado este martes incluye también medidas para impulsar el teletrabajo a través de una dotación “importante” a las empresas para la compra de ordenadores y de facilidades para su aplicación, al tiempo que permite a los trabajadores adaptar y/o reducir su jornada laboral para el cuidado de personas a su cargo (hasta segundo grado), siendo posible una reducción del 100% de la jornada, sin que puedan ser sancionados o despedidos por ello.

La norma, según fuentes de Trabajo, incluye además beneficios específicos para los trabajadores fijos discontinuos, a tiempo parcial y cooperativistas, a los que se les facilitará el cobro de prestaciones por desempleo.

El Ibex 35 retrocede un 3,44% en la sesión y se queda por debajo de los 6.300 puntos

Ver más

Asimismo, el decreto permitirá la prórroga automática de prestaciones por desempleo para impedir que se pierda el derecho al no poder acudir a las oficinas de los servicios públicos de empleo.

El presidente avanzó además que se flexibilizará el acceso a la prestación por cese de actividad de los autónomos. En realidad, se establece una prestación extraordinaria, distinta al cese de actividad ordinario, a la que podrán acogerse aquellos autónomos que hayan cerrado sus negocios por la crisis sanitaria o que hayan reducido de manera significativa su actividad.

Los autónomos con trabajadores a su cargo que apliquen un ERTE o aquellos sin asalariados que pidan esta prestación estarán exentos del pago de cotizaciones durante el tiempo que dure la situación extraordinaria, siempre que hayan solicitado y estén percibiendo esta prestación.