Crisis en Podemos
Iglesias recompone sus alianzas internas con el nombramiento de Echenique
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, anunció este viernes que Pablo Echenique se convertirá en el nuevo secretario de Organización del partido. "Encarna las características adecuadas para estar al frente en esta nueva etapa", argumentó. Esa será, al menos, la propuesta que el secretario general elevará al consejo ciudadano estatal –máximo órgano entre asambleas–, que deberá ratificar su elección el próximo 2 de abril. Ese acto será un mero trámite ya que la propuesta de Iglesias cuenta con amplísimo apoyo en el partido.
Iglesias compareció en una rueda de prensa después de reunir a sus barones territoriales este viernes. La cita se produjo tres días después de que, al filo de la medianoche del martes, el número uno de Podemos fulminara con un duro comunicado de por medio al hasta entonces encargado de la organización de la formación, Sergio Pascual, a su vez mano derecha de Íñigo Errejón –número dos y portavoz en el Congreso–.
El movimiento del líder del partido morado llega además un día después de que este jueves el secretario general en Madrid, Luis Alegre, hombre de la máxima confianza de Iglesias, eligiera de forma temporal a Alba Contreras como responsable regional de Organización. Contreras, del sector de los anticapitalistas, sustituye a Emilio Delgado, partidario de Errejón y que dimitió en medio de la crisis madrileña de la semana pasada.
Representantes de varias de las corrientes de Podemos coinciden en señalar a infoLibre que, con la suma de estos dos movimientos, Iglesias recompone sus alianzas internas: integra a Echenique –que en la asamblea fundacional de Podemos hizo frente al ahora secretario general– en la dirección nacional e incluye al sector más izquierdista de Madrid, donde Alegre fue elegido en su día por escaso margen frente a la lista de los anticapitalistas.
El nombramiento de Echenique también ha sido bien recibido por quienes se sitúan en las tesis de Juan Carlos Monedero. "Es una decisión astuta. Echenique es querido por las bases y tiene sentido de partido. Sabe que sin los círculos la cosa no marcha, pero entendió que no somos el 15-M. Sólo los neoburócratas de Podemos no estarían de acuerdo", fue la lectura de Monedero, uno de los fundadores del partido.
Una nueva etapa
Pablo Iglesias sostuvo en su comparecencia que, para estar "a la altura del momento histórico que vive el país", Podemos necesita "nuevos elementos". Entre ellos citó un "mayor protagonismo de los territorios", una "mayor democratización", la "creación de más dispositivos participativos"... En definitiva, un "nuevo estilo organizativo" para que "el protagonismo de la gente siga siendo la seña de identidad de Podemos".
El líder del partido morado no avanzó medidas concretas, pero apuntó en varias ocasiones la necesidad de una mayor participació. Aseguró que ya ha encargado a Echenique que confeccione un documento de propuestas que se someterán a debate y afirmó que su elección había sido recibida con "entusiasmo" por los barones. El aragonés, concluyó, tiene además "enorme prestigio entre los círculos y las bases".
Echenique, por su parte, señaló que recibió la propuesta de Iglesias este jueves y que aceptó "por responsabilidad" e "ilusión". "Ya sabemos cómo se hacen las cosas mal: nos lo han enseñado las viejas fuerzas políticas. Tenemos la oportunidad de probar una forma completamente nueva: esa es la parte ilusionante", agregó. Además, precisó que aspira a ejercer sus nuevas responsabilidades sin abandonar la dirección del partido en Aragón.
Sumar a los críticos
Las fuentes consultadas por este diario destacan que, con este movimiento, Iglesias "une a su equipo a quienes fueron críticos en la asamblea fundacional". También se gana el favor del sector que ha denunciado un "progresivo alejamiento" de las bases y los círculos que dieron origen a Podemos por parte de la dirección estatal.
Estas mismas voces afirman que Echenique despierta "simpatías" en amplios sectores de la militancia. Todos los sectores de la formación morada le reconocen haber demostrado tener "voz propia", hacerse valer y significarse en varias ocasiones a favor de un acercamiento a los mecanismos de participación, precisamente el argumento que esgrimió Iglesias.
En las últimas horas se había barajado otros nombres para el cargo, entre ellos Irene Montero y Rafael Mayoral, las dos personas más cercanas a Iglesias en este momento. Pero escoger a cualquiera de ellos, explican fuentes de Podemos, habría lanzado el mensaje de que el líder se encastillaba junto a su núcleo duro.Con Echenique, en cambio, el mensaje es de "integración".
La otra cara de la moneda, agregan, se la queda el número dos del partido, Íñigo Errejón. Varios cargos morados señalan que por ahora se queda "sin aliados internos". Al tiempo, casi todos los sectores de Podemos muestran cierta incomprensión por su silencio. Desde el martes, cuando se conoció el cese de Pascual, está desaparecido.
Iglesias afirmó en la rueda de prensa de este viernes que Errejón trabaja con "normalidad", que mantendrá sus "funciones habituales" y que él mismo le "comunicó" la elección de Echenique "como al resto de miembros" de la dirección del partido.
Iglesias celebra los diez años de Twitter compartiendo un artículo que escribió con Errejón
Ver más
Un debate en clave interna
Finalmente, y en su comparecencia ante los medios, Iglesias desvinculó los movimientos internos del proceso de formación de Gobierno. Reafirmó al comienzo de su intervención que sólo hay dos "posibilidades muy concretas": una "gran coalición" o un Ejecutivo "a la valenciana". Y reiteró poco despúes que "hay unanimidad en la dirección de Podemos" en que la apuesta del partido es una gran coalición de izquierdas.
Iglesias sostuvo que esa vía es "posible" porque podría alcanzar un "acuerdo sensato" con el PNV. "E incluso diríamos a Ciudadanos que tuviera la responsabilidad de abstenerse", remató. El secretario general de Podemos, de hecho, avanzó que le pedirá al socialista Sánchez en su próxima reunión que emplee la "buena relación que ha construido" con Rivera para convencerle de que no rechace un Ejecutivo PSOE-Podemos.