‘Kichi’, la punta de lanza de Podemos en las urbes andaluzas

Se llama José María González, pero todo el mundo en Cádiz lo conoce por su apodo: Kichi (Rotterdam, 1976). Ese es el nombre del nuevo alcalde de la capital gaditana, que a la cabeza de la agrupación de electores Por Cádiz Sí Se Puede –apoyada por Podemos– y con el apoyo de PSOE y Ganar Cádiz en Común –la formación donde están presentes partidos como IU y Equo– va a acabar con los 20 años de gobierno de la conservadora Teófila Martínez.

Kichi nació en Rotterdam (Países Bajos) hace 39 años, hijo de emigrantes españoles. No obstante, cuando él contaba con cuatro años sus padres se trasladaron a Cádiz, donde es un personaje conocido por su participación en la comparsa de carnaval Los Imprescindibles. Fue precisamente este grupo quien le cantó la canción Si yo fuera alcalde de Cádiz a las puertas de su casa la misma noche electoral, cuando Por Cádiz Sí Se Puede logró ocho concejales y el 28% de los votos, lo que colocaba como segunda fuerza de la ciudad a una formación que hace un año ni siquiera existía.

"Infancia y adolescencia en el barrio de la Viña, donde vivo. Allí empezó mi compromiso con la comunidad", explica el propio Kichi en el perfil que elaboró para presentarse a las elecciones primarias de su agrupación de electores, que ganó prácticamente por unanimidad al conseguir el 94,8% de los votos. Y es que en sus años de adolescente fue voluntario en una parroquia ayudando a menores en riesgo de exclusión social, una actividad que cambió por su participación en las protestas contra la subida de las tasas universitarias, mientras realizaba sus estudios superiores de Historia.

Precisamente esta licenciatura fue la que le permitió acceder a una plaza de profesor en 2003, cuando entró como interino y fue recorriendo centros de todas las provincias andaluzas –menos Huelva– hasta sacarse la oposición y obtener plaza en Tabernas (Almería). En 2012, la Unión de Sindicatos de Trabajadoras y Trabajadores En Andalucía (USTEA), la central sindical a la que está afiliado, lo liberó y desde entonces es su delegado en Cádiz. Allí, así como en Izquierda Anticapitalista –partido fundador de Podemos y que terminó disolviéndose en la formación liderada por Pablo Iglesias– o en movimientos como la marea verde, coincidió con Teresa Rodríguez, secretaria general de Podemos en Andalucía, que es actualmente su pareja.

Atajar el altísimo desempleo, la prioridad

Las propuestas que el nuevo alcalde de Cádiz ha puesto encima de la mesa son similares a las del resto de candidaturas apoyadas por Podemos. No obstante, la prioridad máxima para Kichi es el desempleo, que en la ciudad alcanza el 42% y alcanza la insoportable tasa del 72% entre los jóvenes. Su propuesta pasa por una reindustrialización de Cádiz en base a la reactivación de la actividad de empresas como Airbus, Dragados y Navantia, si bien se niega a prometer un número determinado de puestos de trabajo. "Mis vecinos saben que yo no tengo una varita mágica", asegura.

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Kichi reivindica la figura del Fermín Salvochea, alcalde y presidente del Cantón de Cádiz en 1873 y un icono en Cádiz como defensor de los desfavorecidos. En este sentido, el nuevo alcalde se ha declarado partidario de no permitir "ni un solo desahucio más" en la ciudad, una iniciativa que podrá llevar a cabo desde un despacho y no, como hasta ahora, recurriendo a la resistencia pasiva. Y es que el regidor participó por última vez en la paralización de un desahucio hace apenas unos días, el pasado día 2 de junio, cuando junto a otros ciudadanos se apostó en el portal de una familia que iba a ser desalojada.

De igual forma, el nuevo alcalde planteó en su programa electoral otra de las propuestas clásicas de Podemos y las candidaturas unitarias: garantizar a los ciudadanos que no puedan permitírselo el suministro básico de luz, agua, y alimentos, así como una auditoría de las cuentas del Ayuntamiento. "Cuando auditemos todo, veremos en qué se ha gastado el dinero. Cuando pongamos la lupa sobre los gastos de protocolo, sobre las concesiones, sobre las obras, sobre los servicios… Espero no encontrarme lo que me temo", afirmó Kichi en una entrevista. No obstante, su primera medida tendrá un carácter mucho más simbólico: rebajar tanto su sueldo como el de sus concejales a un máximo de tres salarios mínimos interprofesionales.

Si yo fuera alcalde de Cádiz, la canción que escuchó Kichi a la puerta de su casa en la noche electoral, plantea unos versos idealistas: "Si yo fuera algún día el alcalde / el alcalde de Cádiz, el que Cádiz requiere / si yo fuera algún día ese alcalde, / el que hace cien años que Cádiz no tiene / llenaría de trabajo las manos / de los gaditanos de nuestra bahía, / guardaría en un rincón las promesas, / llenaría las mesas del pan de cada día". Por de pronto, el nuevo regidor sólo promete "trabajar duro" para llevar a cabo su programa electoral. "Como decía Diamantino Garcia 'el primero en el oficio y el ultimo en el beneficio'".