Elecciones primarias de bajo relieve y sin sobresaltosbajo relieve. Dos brochazos de una jornada electoral en el PSOE que se vivió con menos intensidad que hace cuatro años –una pelea copada por Tomás Gómez y Trinidad Jiménez en Madrid– y en la que casi todo discurrió según lo previsto. Ganaron, en Navarra y Ceuta, los candidatos autonómicos mejor vistos por sus aparatos regionales y por la dirección federal (María Chivite y José Antonio Carracao), y ganaron, por regla general, los aspirantes a alcalde con más respaldo orgánico, caso de Valencia (Joan Calabuig), Castellón (Amparo Marco) u Oviedo (Wenceslao López). Pero la sorpresa, relativa, se produjo en Canarias. Allí venció la diputada nacional Patricia Hernández. Ya se había destacado en la primera liza, la de los avales, por encima de sus dos rivales, Gustavo Matos y Carolina Darias, pero ella no era ni del gusto del barón regional, José Miguel Pérez –sus choques con él han sido frecuentes–, ni del actual secretario general, Pedro Sánchez. A fin de cuentas, Hernández apoyó a Eduardo Madina en la carrera por el liderazgo del partido.
El PSOE atravesó este domingo, 19 de octubre, su primer gran Rubicón de elecciones internas con vistas a las municipales y autonómicas de mayo de 2015. Urnas en 69 municipios (todos de más de 20.000 habitantes) de diez federaciones y una ciudad autónoma (primarias cerradas, entre militantes) y en dos comunidades (abiertas a la ciudadanía). Se anotó una alta participación, del 50,23% a las 14 horas y por encima del 70% al finalizar la jornada, aunque Ferraz no tenía a última hora del domingo los datos cerrados. Una matización: son 69 municipios, y no 70, como la dirección federal computó el viernes, porque durante el domingo se retiró uno de los dos contendientes en San Vicent del Raspeig (Alicante). La segunda gran tacada vendrá el 30 de noviembre.
En Canarias, la jornada arrancó con el estupor de la anulación, comunicada por Ferraz a última hora de la noche del sábado, de 3.755 inscripciones de ciudadanos de un total de 10.015 registrados, el 37,49%. A las dos de la tarde, la participación en las islas era sensiblemente más baja que en el resto de España, del 28,66%, explicable por la diferencia horaria y los efectos del fuerte temporal.
La partida en Canarias era a tres bandas, entre la diputada en el Congreso Patricia Hernández; el director general de Comercio de las islas, Gustavo Matos, y la portavoz socialista del Cabildo grancanario, Carolina Darias. La batalla ya se prefiguraba ajustada desde el arranque. Al final, la victoria de Hernández, de 34 años, fue incontestable. Por 454 votos: obtuvo 3.379 papeletas (38,5%), por los 2.925 de Darias (31,8%) y los 2.790 (29,7%) de Matos. Hernández ganó con claridad en su provincia de origen, Tenerife, por un 52%, igual que Darias venció en la suya, Las Palmas (67%). Por islas, Hernández se impuso en Tenerife y El Hierro, y la portavoz del Cabildo ganó en Gran Canaria, Lanzarote, Fuerteventura y La Gomera. Matos sólo logró quedar primero en La Palma.
Hernández fue uno de los más activos apoyos de Madina en su campaña y ha sido una de las voces más críticas con José Miguel Pérez, vicepresidente del Gobierno del archipiélago (los socialistas comparten el Ejecutivo con Coalición Canaria) y secretario de Educación de la dirección de Pedro Sánchez. Para estos dos, su preferida era Darias. La candidatura de Hernández comenzó a madurarse durante el verano, poco antes de que Pérez anunciara que no repetiría como candidato. Al final, consiguió derribar el obstáculo de última hora: la anulación de 3.755 inscripciones del censo, buena parte de ellas procedentes de Santa Cruz y Adeje. Igual que pudieron perjudicarle las inundaciones en Tenerife.
En Las Palmas de Gran Canaria, venció en las urnas el aspirante más previsible, Augusto Hidalgo, consejero en el Cabildo insular, frente al empresario Gabriel Corujo.
Joan Calabuig y Amparo Marco en Valencia y Castellón
En Navarra, se hizo con la candidatura a la Presidencia del Gobierno foral María Chivite, a quien Pedro Sánchez eligió como portavoz en el Senado, pese a que apoyó a Madina en la consulta para la Secretaría General del pasado verano. Como portavoz en la Cámara alta, se sienta en la ejecutiva federal. Chivite cosechó un total de 2.506 votos (el 58,59%), entre papeletas de militantes y ciudadanos inscritos, frente a los 1.771 (41,41%) sufragios de la aspirante de la corriente crítica, la exparlamentaria Amanda Acedo. Se emitieron 4.306 votos (el 79,61% del censo), de los que tres –el 0,03%– fueron nulos y 26 (el 0,6%) en blanco, con el cien por cien escrutado.
El foco de la contienda municipal se hallaba en Valencia, la ciudad más grande (792.000 habitantes) de todas aquellas en las que se abrieron urnas en las agrupaciones socialistas. Allí se hizo con la candidatura (por segunda vez consecutiva) Joan Calabuig, líder local, actual portavoz municipal y un hombre de la total confianza del barón regional, Ximo Puig –secretario de Reformas Democráticas de la ejecutiva de Sánchez–. Según datos facilitados por el PSPV, Calabuig logró 580 votos, por los 245 del edil valenciano Pedro Miguel Sánchez. 34 militantes votaron en blanco y otras 11 papeletas fueron declaradas nulas. En Castellón venció también la favorita de Puig, Amparo Marco, portavoz en el Ayuntamiento, frente a Germán Renau (259-238).
En Elche (Alicante), tercera ciudad de la Comunitat, competían en principio cuatro candidatos. Pero este mismo domingo renunció José Pérez Ruiz, que se unió a la lista de Carlos Antonio González Serna, el preferido por la dirección autonómica. Y en Torrent (Valencia) también venció el mejor visto por el aparato, el histórico dirigente y exalcalde Jesús Ros.
En Madrid, 12 municipios celebraban primarias. No en la capital, donde ya fue proclamado Antonio Miguel Carmona, miembro de la ejecutiva regional de Tomás Gómez y diputado autonómico. En 9 ganó el candidato previsto y apoyado por el aparato del PSM: Natacha de Andrés (Alcorcón), Cristina Moreno (Aranjuez), José Antonio Martín Valdés (Boadilla, pero sólo por un voto frente a su rival, Cristina de Lara), Fernando del Valle (Colmenar Viejo), Ángel Viveros (Coslada), Jorge Cotallo (Galapagar), Pablo Sánchez (Parla, el municipio del que fue alcalde Gómez nueve años, con amplísimas mayorías), Juan Diego Ortiz (Pinto) y Serafín Faraldos (Valdemoro). En dos, el PSM se había mostrado más equidistante: Arganda del Rey (se impuso Pedro Guillermo Hita) y Rivas Vaciamadrid (ganó la secretaria local, Carmen Pérez Gil). Sólo en Leganés hubo sorpresa. El exregidor Rafael Gómez Montoya, en su día confrontado con el jefe del PSM pero que ahora era su apuesta y la de Pedro Sánchez, perdió frente a Santiago Llorente.
Renovación en Badajoz y Cáceres
En Andalucía, ninguna capital de provincia figuraba en el listado de 17 municipios con primarias cerradas. Las localidades más pobladas eran Jerez de la Frontera y Algeciras. En la primera venció Mamen Sánchez, diputada en el Congreso y vicesecretaria general de la agrupación, y en la segunda, Fernando Silva, secretario de Relaciones Institucionales de la dirección local. En Chiclana, también en Cádiz, se coronó candidato José María Román, exalcalde, presidente de la ejecutiva municipal y portavoz en el Consistorio. En varias poblaciones ganaron los secretarios generales municipales: Manuel García en Roquetas, María Teresa Piqueras en Adra, Flor Almón en Motril, Rocío Espinosa en Almonte, Víctor Manuel Torres en Martos, Javier García León en Fuengirola, Fuensanta Lima en Mijas y Teresa Valdenebro en Ronda.
Casi 9.000 militantes eligen en primarias a los candidatos del PSOE en 29 municipios
Cuatro municipios celebraron primarias en Asturias: Oviedo, Avilés, Castrillón y Siero. En la capital del Principado el más votado fue su secretario general, Wenceslao López, y en Avilés, al dejar su puesto vacante la alcaldesa, consiguió la candidatura la diputada nacional Mariví Monteserín. En Castrillón el puesto será ocupado por el líder local, Jesús Ángel Cabrales (ganó a otros dos oponentes), y en Siero, por el portavoz en el Ayuntamiento, Ángel García, Cepi.
Badajoz fue otro de esos puntos excepcionales donde no se proclamó candidato el rival teóricamente más fuerte. Allí competían el secretario general y favorito, Celestino Vegas, su oponente en el congreso de 2012, Ricardo Cabezas, y el concejal José Antonio Pajuelo. Ganó Cabezas. Por tres votos. La misma diferencia con la que conquistó el puesto Luis Salaya, líder provincial de Juventudes Socialistas. La militancia extremeña apostó, pues, por la renovación en las dos grandes ciudades. En Plasencia venció el secretario local, David Núñez.
En Logroño, quien se hizo con el favor de los afiliados fue Beatriz Arráiz, concejala de la ciudad y vicesecretaria general del PSOE riojano, una federación de la que aún es líder el número dos de Pedro Sánchez, César Luena. Reunió 210 votos frente a los 128 de su oponente, la abogada Eva Loza.
Elecciones primarias de bajo relieve y sin sobresaltosbajo relieve. Dos brochazos de una jornada electoral en el PSOE que se vivió con menos intensidad que hace cuatro años –una pelea copada por Tomás Gómez y Trinidad Jiménez en Madrid– y en la que casi todo discurrió según lo previsto. Ganaron, en Navarra y Ceuta, los candidatos autonómicos mejor vistos por sus aparatos regionales y por la dirección federal (María Chivite y José Antonio Carracao), y ganaron, por regla general, los aspirantes a alcalde con más respaldo orgánico, caso de Valencia (Joan Calabuig), Castellón (Amparo Marco) u Oviedo (Wenceslao López). Pero la sorpresa, relativa, se produjo en Canarias. Allí venció la diputada nacional Patricia Hernández. Ya se había destacado en la primera liza, la de los avales, por encima de sus dos rivales, Gustavo Matos y Carolina Darias, pero ella no era ni del gusto del barón regional, José Miguel Pérez –sus choques con él han sido frecuentes–, ni del actual secretario general, Pedro Sánchez. A fin de cuentas, Hernández apoyó a Eduardo Madina en la carrera por el liderazgo del partido.