El magistrado no se abstiene en el 'caso Gürtel' pese a admitir que se siente agradecido al Partido Popular

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Enrique López, recusado por su cercanía al PP por cuatro acusaciones populares como miembro del tribunal que juzgará el caso Gürtel y cuestionado por Anticorrupción, no se abstendrá voluntariamente. Si la Audiencia Nacional no le obliga a apartarse, será él quien redacte la sentencia. Y justamente en este caso, tanto la exministra Ana Mato, que participó directamente en su nombramiento como magistrado del TC, como el propio Partido Popular, hacia el que López confiesa unos "naturales sentimientos de agradecimiento", figuran como presuntos responsables civiles.

El magistrado admite haber cobrado 11.102 euros netos desde 2003 de FAES, la fundación que preside José María Aznar, pero despacha el asunto diciendo que "esas cuantías mal pueden generar interés alguno en este magistrado". El salario anual mínimo se cifra en una cantidad inferior: 9.080 euros brutos.

En sus alegaciones a los escritos de recusación y al de la Fiscalía, López subraya que ningún elemento aconseja su abstención en esta causa pese a que él mismo reconoce su agradecimiento hacia el Gobierno y el PP, partido que en esta pieza separada –la denominada Primera Época (1999-2005) y que se deriva de la principal– ostenta la condición de presunto partícipe a título lucrativo. O, lo que es lo mismo, presunto beneficiario de dinero ilícito manejado por la trama. 

Nada, escribe López, "podrá impedir actuar a este Juez con plena imparcialidad en el actual proceso, puesto que los naturales sentimientos de agradecimiento por tales nombramientos [el de vocal del Poder Judicial y, luego, el de magistrado del Tribunal Constitucional] en modo alguno crean algún tipo de interés en lo que acontezca en el procedimiento". El magistrado aduce que, en la sesión tras la que la Asamblea de Madrid le propuso en 2008 magistrado del TC, fue votado "en propuesta conjunta entre el Partido Popular y el Partido Socialista".

En otro momento del escrito, López abunda así en su razonamiento: "Tales nombramientos, tanto el de vocal del CGPJ, como el del Tribunal Constitucional, en modo alguno generan en este magistrado especial interés alguno en el procedimiento y ello aunque el Partido Popular sea parte en este procedimiento".

La tesis de López radica en que ni el hecho de que el Senado le designara vocal del Poder Judicial, ni que varias Asambleas autonómicas [las controladas por el PP] le propusieran años después como candidato al Constitucional (TC), ni sus constantes colaboraciones con FAES ni que finalmente se convirtiese en 2013 en miembro del TC por decisión del Gobierno del PP, nada de ello tiene ningún efecto negativo sobre su imparcialidad.

Que la hoy exministra Ana Mato, presunta partícipe a título lucrativo en esta rama del caso Gürtel, participase en el Consejo de Ministros que en junio de 2013 le aupó al TC tampoco reviste relevancia, sostiene López. Ni que su cuñado, "felizmente casado" con su única hermana, fuese directivo de las empresas de José Luis Ulibarri, uno de los principales imputados en la pieza principal del caso.

El magistrado subraya que, mientras que Anticorrupción ha incidido en cómo cinco acusados participaron en votaciones para nominarle como vocal del Poder Judicial o magistrado del TC, nadie ha esgrimido la participación directa de Ana Mato en su nombramiento para el TC. "Sin embargo -escribe López– el Ministerio Fiscal no introduce otro hecho no alegado por las partes, no sé si porque no han caído en la cuenta, o no lo consideraron importante, tal cual es que cuando realmente fui nombrado magistrado del Tribunal Condicional, lo fui a propuesta del Gobierno de la Nación, y del citado Gobierno formaba parte en ese momento como ministra de sanidad Ana Mato, parte en este procedimiento como partícipe a título lucrativo".

López dedica el párrafo final de sus alegaciones a plasmar su queja por el vapuleo a que se siente sometido: "Al hilo de legítimos comentarios críticos sobre la apariencia de imparcialidad que se haya podido haber generado, han corrido ríos de tinta y minutos de tertulias, donde se me ha descalificado, cuestionado como profesional, mofado e injuriado".

"Hace poco más de un año  –remata– por la mente de este magistrado no podría pasarse ni por asomo el verse en esta situación, no buscada ni mucho menos deseada". López se incorporó a la Audiencia Nacional en el verano de 2014 tras dimitir como magistrado del TC después de ser interceptado por la Policía mientras conducía en moto sin casco y con una tasa de alcohol en sangre superior a la permitida.

Ana Mato participó en el Consejo de Ministros que aupó al TC al juez que dictaminará si se lucró con la 'Gürtel'

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También la segunda magistrada recusada por las acusaciones, Concepción Espejel, justamente la encargada de presidir el tribunal, ha desechado abstenerse. Espejel, cuya supuesta amistad con María Dolores de Cospedal destacaron las acusaciones en sus escritos, desmiente categóricamente que exista relación de "amistad íntima" con la expresidenta de Castilla-La Mancha. 

Asimismo, niega haber interferido en provecho del PP en la investigación sobre el incendio de Guadalajara, que en 2005 costó la vida a 11 personas. Espejel expone así su relato: "La Audiencia de Guadalajara durante el período durante el cual yo la presidí, no dictó ninguna resolución revocatoria de la de Juez de Instrucción en la que se ordenara imputar y, menos aún, procesar a algún miembro de la Junta de Comunidades ni a ningún político de la Administración socialista".

"Parece obvio –apostilla Espejel– decir que los hechos falsos o interesadamente tergiversados no se convierten en verdaderos, por mucho que se repitan con una finalidad de desprestigio".

Enrique López, recusado por su cercanía al PP por cuatro acusaciones populares como miembro del tribunal que juzgará el caso Gürtel y cuestionado por Anticorrupción, no se abstendrá voluntariamente. Si la Audiencia Nacional no le obliga a apartarse, será él quien redacte la sentencia. Y justamente en este caso, tanto la exministra Ana Mato, que participó directamente en su nombramiento como magistrado del TC, como el propio Partido Popular, hacia el que López confiesa unos "naturales sentimientos de agradecimiento", figuran como presuntos responsables civiles.

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