El PSOE andaluz vive tiempos trémulos. El mal resultado en las pasadas elecciones autonómicas pesa mucho sobre sus hombros. No se consigue levantar cabeza. A pesar del cambio por Juan Espadas, la federación no logra tomar impulso. Es algo que preocupa entre muchos, con la vista puesta en las próximas elecciones municipales de mayo del año que viene.
Y en las últimas semanas hay una conversación privada que se repite mucho entre parlamentarios andaluces en las Cortes Generales: pérdida de peso político en la capital. Entre las principales quejas, según fuentes socialistas, es que la última remodelación del partido llevada a cabo durante este verano ha supuesto rebajar la representación del PSOE andaluz en Madrid en el día a día.
Los cambios llevados a cabo por Pedro Sánchez el pasado mes de julio supusieron varios movimientos de fichas. El jienense Felipe Sicilia fue cesado de su cargo como portavoz del partido a nivel nacional. Y, además, la remodelación del grupo parlamentario socialista en el Congreso ha provocado la salida de la cordobesa Rafi Crespín como secretaria general.
Esos giros supusieron, en cambio, el ascenso de la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, como vicesecretaria general del PSOE, en sustitución de Adriana Lastra. Pero para varios parlamentarios andaluces en Madrid eso no se traduce en el día a día. Tampoco les ha contentado la entrada en la dirección del Senado del malagueño Miguel Ángel Heredia.
“Contamos poco”, se queja un diputado andaluz en el Congreso. Además, muchos echan en falta un papel más potente en la capital del actual líder del PSOE-A, Juan Espadas, quien ahora tiene escaño en el Senado. El exalcalde de Sevilla ha llamado a los parlamentarios andaluces a una reunión este martes, convocatoria que se hizo a través de un mensaje. Para algunos diputados y senadores esta cita llega tarde, una vez ya ha empezado el curso político hace varias semanas.
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La federación socialista andaluza se prepara en estos momentos para la cita trascendental de las municipales de mayo del año que viene. Y varios parlamentarios confiesan que creen que debería verse y realzarse más el trabajo del PSOE andaluz, pensando en intentar retener el gran poder local que obtuvieron en aquella fecha. En 2019 los socialistas lograron en la comunidad 458 ayuntamientos (un 60% de los municipios), cosechando mayoría absoluta en 398. La dirección actual se ha marcado mantener ese poder, aunque, por ejemplo, si se proyectaran los resultados de las autonómicas en las municipales, perderían sus 15 principales corporaciones.
Estas quejas en privado de varios diputados y senadores no significan para nada una resurrección de la corriente susanista o la creación de un frente crítico frente a Espadas. Se trata de un lamento entre varios, pero se da ya por “amortizado” el liderazgo de la expresidenta de la Junta.
Lo que piensan estos parlamentarios, según las fuentes consultadas, es que se tendría que impulsar más el trabajo de los diputados del PSOE andaluz, la federación con más militantes de toda España y que siempre ha representado el corazón del socialismo español. Les gustaría tener más peso en función de los números: el PSOE-A consiguió en las pasadas elecciones generales 25 diputados (casi el 21% de los escaños ganados por el socialismo). Y reflexionan estos parlamentarios que si el PSOE quiere retener La Moncloa es indispensable que tire del tren Andalucía, ya que lo contrario supondría una derrota segura.
El PSOE andaluz vive tiempos trémulos. El mal resultado en las pasadas elecciones autonómicas pesa mucho sobre sus hombros. No se consigue levantar cabeza. A pesar del cambio por Juan Espadas, la federación no logra tomar impulso. Es algo que preocupa entre muchos, con la vista puesta en las próximas elecciones municipales de mayo del año que viene.