Corrupción política
Matas sale de prisión durante seis días y sólo volverá para firmar su salida ‘definitiva’
El expresidente del Govern Jaume Matas ha salido esta mañana de la cárcel de Segovia, tras obtener un permiso penitenciario de seis días, tras los cuales tendrá que regresar a la prisión previsiblemente sólo para firmar su salida definitiva, al cumplirse los nueve meses a los que fue condenado por un delito de tráfico de influencias por el primer juicio del caso Palma Arena. El exministro ingresó en la cárcel el 28 de julio de 2014.
Así lo han señalado fuentes jurídicas a Europa Press, que han apuntado que este permiso le acaba de ser otorgado por lo que ha podido abandonar este lunes la prisión segoviana. Además, prevé ser en breve intervenido quirúrgicamente de la tuberculosis que padece en el oído.
El exlíder del PP balear regresó al segundo grado a finales del año pasado después de que la Audiencia Provincial de Baleares confirmase la revocación del régimen de semilibertad del que gozaba y que supuso que el exministro de Medio Ambiente dejara la cárcel de Segovia y pasara a tener como instalación penitenciaria de referencia el Centro de Inserción Social de este penal.
En su auto, el tribunal de la Sección Primera aseveraba para ello que "nada ha cambiado" en la conducta del recluso que permitiese inferir en él "una capacidad para llevar en lo sucesivo una vida alejada del delito", aseverando que "limpiar la celda (una obligación de todos los internos), salir al polideportivo (pese a tener problemas de salud) y apuntarse a un campeonato de frontenis pueda considerarse un tratamiento que modifique la perspectiva criminológica de Jaume Matas".
La Audiencia recordaba además que sobre el exministro quedan pendientes "múltiples" causas en las que se encuentra inculpado, lo que, pese a que no puede ser considerado como "una presunción de culpabilidad –antes al contrario, presumimos su inocencia–", consideraba la Sala que no fue sido valorado a la hora de serle concedido el tercer grado.
Entre esas causas se encuentran los casos Nóos, por el que la Fiscalía reclama para Matas 11 años de cárcel; Over –ramificación de la trama Gürtel en Baleares– y Ópera –que investiga el contrato por el que el Govern encargó al arquitecto Santiago Calatrava, por 1,2 millones de euros, elaborar un anteproyecto de cara a construir un teatro de la ópera en Palma–, ambos enmarcados en el caso Palma Arena.
El tribunal subrayaba que la conducta por la que el exmandatario balear fue condenado "fue muy grave" en términos de "repercusión institucional y social, garante de una enorme desazón y un gran descrédito de nuestras instituciones, al ser cometido por el que fue presidente de esta Comunidad".
De hecho, recordaba que fue esta circunstancia la que justificó que no le fuera suspendida la condena –por ser menor a dos años de cárcel– ni que le fuera sustituida por una multa, ya que de haberle concedido estos beneficios "se generarían espacios de impunidad, siempre intolerables y de manera especial en unas conductas de corrupción que han alcanzado dimensiones profundas en la sociedad española, con el riesgo cierto de socavar los principios básicos de los regímenes democráticos".
Condenado en dos ocasiones
Inicialmente, la Audiencia condenó a Matas a seis años de cárcel al considerar probado cómo el exlíder del PP intervino en la contratación irregular por parte del Ejecutivo autonómico del articulista Antonio Alemany para la redacción de sus discursos, si bien el Tribunal Supremo rebajó la pena a nueve meses.
Mientras tanto, el Alto Tribunal confirmó el pasado mes de febrero la segunda condena que pesa sobre el expresidente balear y que le fue impuesta en 2013 por un delito de cohecho, en su consideración de pasivo impropio, concretada en el pago de una multa total de 9.000 euros y en el comiso de los 42.111 euros que recibió como regalo a través de la contratación ficticia de su mujer por parte de un conocido hotelero mallorquín.