Ningún miembro de la Mesa del Congreso ha renunciado al 'sobresueldo' de una comisión casi inactiva

Ninguno de los nueve miembros de la Mesa del Congreso de los Diputados ha renunciado, hasta la fecha, al complemento económico que les corresponde como integrantes también de la Mesa de la Comisión de Reglamento de la Cámara Baja. Así lo confirman a infoLibre desde la Secretaría General de la institución. La renuncia a este complemento había sido algo inédito hasta la breve XI Legislatura (enero-julio 2016), cuando lo hicieron los socialistas Patxi López y Micaela Navarro.

"En la XII Legislatura, ningún miembro de la Mesa del Congreso de los Diputados ha renunciado al complemento que le corresponde como miembro de la Mesa de la Comisión de Reglamento de la Cámara", figura en el documento remitido el 19 de enero después de una consulta en el portal de la transparencia. Además, recuerda que los integrantes del órgano de Gobierno del Congreso "pueden recibir un complemento mensual por razón del cargo que ocupen en alguna de las Comisiones de la Cámara de la que formen parte". "Si bien, –añade– si formasen parte de varias como portavoces o miembros de las Mesas, solo podrían percibir uno de ellos, de conformidad con lo establecido en el régimen económico de los diputados".

Es costumbre que los miembros de la Mesa del Congreso pasen automáticamente a integrar la Mesa de la Comisión de Reglamento. Esto implica que esos nueve parlamentarios complementen sus ingresos mensuales con cantidades que van desde los 697,65 hasta los 1.431,31 euros según el cargo. Todo ello en 14 pagas.

Durante la X legislatura, la comprendida entre diciembre de 2011 y enero de 2016, esos nueve miembros de la Mesa se embolsaron 441.429.07 euros por ocupar un puesto en dicha Comisión de Reglamento, que sólo se reunió en dos ocasiones en cuatro años. En total, 49.047 euros de media por cada uno de los nueve diputados.

En lo que va de XII Legislatura, esta comisión no legislativa sólo se ha reunido en una ocasión. Fue el 12 de septiembre de 2016. Y lo hizo para constituirse. La sesión se abrió a las cuatro y cinco minutos de la tarde y se cerró cinco minutos después. Lo mismo ocurrió en la corta legislatura anterior.

La estructura de la Mesa de la Comisión de Reglamento es calcada a la de la Mesa del Congreso. La integran ahora Ana Pastor (PP, presidenta), José Ignacio Prendes (Ciudadanos, vicepresidente primero), Micaela Navarro (PSOE, vicepresidenta segunda), Rosa María Romero (PP, vicepresidenta tercera), Gloria Elizo (Unidos Podemos, vicepresidenta cuarta), Alicia Sánchez-Camacho (PP, secretaria primera), Juan Luis Gordo (PSOE, secretario segundo), Marcelo Expósito (En Comú Podem, secretario tercero) y Patricia Reyes (Ciudadanos, secretaria cuarta).

Estos ingresos complementarios se suman al sueldo base de los parlamentarios, conocido como "asignación constitucional", fijado en 2.813,87 euros y a la "indemnización" –dieta– que, también en 14 pagas, reciben en función de la circunscripción por la que fueron elegidos. Esta cantidad, libre de impuestos, está fijada en 870,56 euros para los parlamentarios que fueron en la lista de Madrid y en 1.823,86 euros para el resto. También hay que sumar a estos conceptos los propios complementos que les corresponde por formar parte del órgano de Gobierno del Congreso: van de los 9.121 de la presidenta a los 2.440 de los secretarios.

La renuncia del PSOE y el anuncio de Podemos

Hace casi un año, el 12 de febrero de 2016, Patxi López, por aquellas fechas presidente del Congreso, y Micaela Navarro anunciaron que el día 3 de ese mismo mes habían presentado de forma oficial una renuncia a percibir el complemento al que tenían derecho por integrar la Comisión de Reglamento. Dos semanas antes infoLibre había desvelado que los nueve diputados que la integraron en la X Legislatura se embolsaron de media 49.000 euros.

El 16 de febrero, los miembros de Podemos en la Mesa del Congreso de los Diputados anunciaron que "en los próximos días" renunciarían también a este 'sobresueldo'.

Hasta aquí lo anunciado. Porque después todo lo anunciado no se cumplió. El 13 de junio, tras una solicitud de información de este periódico sobre qué diputados habían renunciado a este ingreso de forma oficial, desde la Secretaría General del Congreso respondieron que lo habían hecho dos parlamentarios.

Desde la Cámara no identificaron personalmente a los parlamentarios alegando motivos de protección de datos, pero este diario pudo comprobar, en fuentes parlamentarias y del Grupo Socialista, que se trataba de López y Navarro, ambos del PSOE.

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La información facilitada por la Cámara baja puso de manifiesto que el grupo de Unidos Podemos, que en su día aseguró a este periódico que iba a renunciar a ese complemento, no formalizó la petición. 

El partido de Pablo Iglesias llegó a las instituciones con la promesa de la renuncia de "privilegios": limitación de salarios, no a los coches oficiales, no a las tarjetas de taxi, no a la conexión a internet en sus domicilios a costa de los presupuestos de las Cámaras...

En el caso de los parlamentarios de Podemos, su código ético fija una limitación salarial para sus cargos públicos de tres salarios mínimos (1.965,6 euros), por lo que estos complementos no habrían ido a engrosar directamente los bolsillos de sus diputados, sino al propio partido, asociaciones, ONG...