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Mónica García: "Somos feministas caiga quien caiga, estamos orgullosas de nuestra contundencia"

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Mónica García (Madrid, 1974) concede a infoLibre la primera entrevista en profundidad desde que saltase el escándalo. El jueves 24 de octubre, el fundador de su partido, Íñigo Errejón, hasta entonces también portavoz parlamentario de Sumar, presentaba su dimisión después de las acusaciones de violencia machista de varias mujeres. Unos días después llegó el momento de reconocer errores. También por parte de la líder de Más Madrid. "Desgraciadamente, no hemos sabido hacer lo suficiente", lamentó.

Se sienta en la redacción de este periódico también como ministra de Sanidad, desde donde avanza "orgullosa" en su defensa de la sanidad pública. Y advierte de que si cae el "modelo anacrónico de Muface", el sistema podrá reaccionar. "Estaremos encantados de recibir a los funcionarios con los brazos abiertos. Y mucho más a los mayores que a la privada no le son rentables, porque para la pública siempre lo serán", defiende.

Se cumplen tres semanas de la dana que asoló la provincia de Valencia y otros puntos de Castilla-La Mancha. Durante los primeros días se habló de esos riesgos sanitarios que podían emerger con el tiempo, ¿cuál ha sido el papel de su Ministerio y cómo es la situación ahora?

El Gobierno de España ha estado ahí desde el minuto menos uno y el Ministerio de Sanidad, por supuesto, también. Nos ofrecimos a la Conselleria para evaluar todos los riesgos de salud pública que pudieran aparecer y para ofrecer todos nuestros recursos como, por ejemplo, el CCAES [Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias] o nuestra Dirección General de Salud Pública. Desplazamos a parte del Ministerio a Valencia para organizar la vigilancia epidemiológica de enfermedades infecciosas, tanto de las que pudieran surgir de las aguas estancadas como de la proliferación de los vectores.

Tenemos un grupo en colaboración con la Generalitat que está haciendo un trabajo muy riguroso y muy exhaustivo a la hora de monitorizar y rastrear cualquier inicio de cualquier tipo de brote. Hasta ahora hemos tenido un pequeño repunte de gastroenteritis y algunos casos muy aislados de leptospirosis, pero ningún indicio para pensar que haya algo especialmente preocupante. Estamos teniendo un trabajo bastante bueno de colaboración, y desde el rigor y la evidencia científica también estamos trabajando en contra de todos los bulos y la desconfianza que pueda poner en riesgo la salud.

Hasta ahora hemos tenido un pequeño repunte de gastroenteritis y algunos casos muy aislados de leptospirosis, pero no tenemos ningún indicio para pensar que haya ningún brote especialmente preocupante

Habla de buena colaboración, algo que puede incluso chocar con los mensajes públicos que se han ido desplegando.

El Gobierno de España siempre ha estado dispuesto, ofreciendo su ayuda, incluso, como ya dijo el general de la UME, antes de que se pidiera. Pero es obvio y es palmario que el que tiene la competencia y el conocimiento del terreno es el Gobierno valenciano, que es al que nosotros tenemos que apoyar. Se está haciendo desde todos los lugares, desde todos los ministerios y desde el minuto uno. Tenemos un gabinete de crisis todas las mañanas para poder evaluar en qué más podemos ayudar a los valencianos y valencianas.

¿Llegó tarde o a demanda el Gobierno de España? ¿De qué manera se puede mejorar cómo se coordinan las diferentes administraciones?

Hace falta confianza, en las instituciones y en los organismos que hacen que éstas funcionen, como por ejemplo la AEMET y la Conferencia Hidrográfica. Los que monitorizan la situación no son los que toman las decisiones, eso corresponde a los políticos. Siempre pongo el ejemplo de un quirófano, que es donde estoy acostumbrada a trabajar: el cirujano tiene sus competencias y el anestesista tiene las suyas. Podemos ayudarnos para salvar al paciente, pero ninguno puede suplantar al otro. Es difícilmente achacable una responsabilidad de no llegar a tiempo por parte de aquellos que tenían la responsabilidad de llegar a tiempo. Ya se depurarán responsabilidades, ahora es el momento de ponerse a trabajar por los valencianos y las valencianas.

¿Mazón debe dimitir?

El momento de depurar responsabilidades vendrá.

¿Cuándo?

Cuando acabe la crisis. Cuando hay un cirujano que lo está haciendo mal no le apartas, le ayudas, y hasta que no termina la cirugía no le pides cuentas. Aquí estamos en lo mismo. Es un error haber creado desconfianza y haber intentado echar balones fuera, porque eso no ayuda ni a los valencianos ni al crédito y a la confianza que tenemos que tener en nuestras instituciones.

Es difícilmente achacable una responsabilidad de no llegar a tiempo por parte de aquellos que tenían la responsabilidad de llegar a tiempo. Ya se depurarán responsabilidades, ahora es el momento de ponerse a trabajar por los valencianos y las valencianas

Hablaba antes de los bulos y la desinformación. ¿Cree que la antipolítica ha tenido una oportunidad en esta tragedia para avanzar?

La antipolítica y la anticiencia, va todo en el mismo pack. Los bulos, la mentira, la desinformación y la información tóxica han operado de manera muy obscena en este caso, pero llevan haciéndolo desde hace mucho tiempo. Si la información y la ciencia salvan, la desinformación, los bulos y la toxicidad siembran miedo. En el terreno de la salud pública, de hecho, sabemos que la desconfianza juega en contra de nuestra salud. Aquí no ha fallado toda la política, sino determinadas decisiones. Hay un caldo de cultivo de la antipolítica del que se nutre la ultraderecha de todo el mundo. Una manera de defender la democracia es defender la información veraz.

Han pasado varias semanas desde la dimisión de Íñigo Errejón. ¿Cómo de profundo es el daño que ha hecho a Más Madrid y a Sumar?

Nadie niega que ha sido un shock, pero también ha sido un triunfo del feminismo. El compromiso de Más Madrid en contra de las violencias machistas es absolutamente inquebrantable, caiga quien caiga. Tenemos que estar orgullosos de esa contundencia más allá de lo que ha supuesto para nosotros. Creo que la reflexión que queda es que el feminismo va ganando espacios. Antes se hubiera dirimido entre complicidades de señores y silencios y ahora se ha hecho con un cese instantáneo. No vamos a tolerar que un espacio profundamente feminista esté representado por personas que no siguen las normas básicas del feminismo.

Hay quien se pregunta todavía cómo esto ha podido pasar en una formación como Más Madrid. Las tres coportavoces dijeron que no eran conscientes del alcance y hay una exdiputada de su grupo que dijo que la dirección sí estaba al corriente. Dice que está orgullosa pero, ¿por qué no se hizo una investigación? ¿Qué se puede hacer para que no vuelva a pasar?

El machismo está instaurado en nuestra sociedad y por eso nos tenemos que defender de él. El hecho de que esto haya ocurrido en Más Madrid no es una anomalía, es el reflejo de que el machismo está metido en los engranajes más profundos de nuestra sociedad. La diferencia es que hemos respondido con total contundencia, nos ha dado igual que fuera una de las personas más representativas de nuestro espacio, hemos decidido cesar fulminantemente a Íñigo Errejón y tenemos que estar orgullosos. No conocíamos lo que había detrás. En el momento en el que tuvimos la más mínima sospecha hemos actuado. Somos firmemente feministas aunque esto tenga un coste.

No vamos a tolerar que un espacio profundamente feminista esté representado por personas que no siguen las normas básicas del feminismo

Ya ha pasado casi un mes desde que se conocieron todos estos hechos, ¿están ustedes trabajando con las víctimas?

Nos pusimos a disposición de Cristina Fallarás y de toda aquella mujer que se haya sentido agredida, no solamente en este caso por el que fuera el portavoz sino por cualquier persona de Más Madrid. Tenemos un protocolo muy riguroso en el que contamos con figuras externas que evalúan cualquier caso y determinan si hay que denunciar o no. ¿Tenemos que mejorar? Sí, claro que tenemos que mejorar. Siempre cabe la reflexión de 'cómo no nos dimos cuenta'.

¿Y qué responde?

Es muy complicado. Como dijo Rita Maestre, detrás de una persona normal, un compañero normal o un novio normal nadie se puede imaginar que que haya un presunto agresor sexual. Esto lo conocen él y las víctimas. Cuando nosotros le preguntamos qué credibilidad le daba a esas denuncias que estaban saliendo es él mismo el que dice que va a dimitir. 

Se calcula que sólo un 8% de las agresiones sexuales se denuncian. El testimonio que se convierte en detonante surge a través de una cuenta de Instagram, pero evidentemente el sistema está fallando al no ser considerado por las mujeres como una opción adecuada.

La falta de denuncias da cuenta de la complejidad de este tema y de lo enraizado que está este problema en nuestra sociedad. No vale solamente con animar a las mujeres a que denuncien porque muchas veces tienen otros condicionantes que se lo impiden. Tenemos que hacer reflexiones profundas sobre cómo se apoya a las mujeres que denuncian y cómo se protege a las que no lo hacen. Y esto no lo tiene que hacer solo un partido, sino una sociedad. Siendo víctimas lo que tampoco es justo es que además seamos las responsables de la actitud de los agresores. A partir de ahí hay que trabajar para ver cómo las anulamos y cómo hacemos que las mujeres denuncien. 

¿Se ha empezado a trabajar en la mejora de los protocolos?

Yo siempre hago un análisis como el que se hace desde la ciencia y la medicina. El resultado final es un fallo, así que rebobinando hacia atrás deberíamos ver en qué punto deberíamos haber hecho algo más o investigado mejor. Más allá de esto, hay que acompañar a las mujeres, incluso previniendo estas actitudes. El problema es que no somos capaces de detectar estas actitudes antes de que se materialicen. Es muy complejo.

Tenemos que hacer reflexiones profundas sobre cómo se apoya a las mujeres que denuncian y cómo se protege a las que no lo hacen. Y esto no lo tiene que hacer solo un partido, sino una sociedad

¿Cree que este caso daña la lucha feminista o su credibilidad? Se produce en uno de los partidos que más abanderado los avances del feminismo.

Excepto para los cínicos e hipócritas, yo creo que esto es el resultado de años de feminismo que ha conseguido que, con contundencia, un partido que se dice feminista aparte de la primera fila a una de sus mayores figuras tras recibir indicios de una actitud machista. Esto es un éxito del feminismo, independientemente de que los cínicos e hipócritas lo utilicen como un arma arrojadiza. Los de Nevenka y los que aplaudieron a Plácido Domingo no nos van a dar lecciones a las que hemos sido contundentes y férreas en nuestros principios feministas.

Un informe de su Ministerio publicado este lunes ve "razonable" acabar con el modelo de Muface ahora que las aseguradoras que prestaban servicio han decidido dejar de hacerlo. ¿Por qué es un servicio "insostenible" desde su punto de vista?

Hemos hecho una evaluación ante la situación de que las aseguradoras abandonen el concierto y a los mutualistas, seguramente porque no les es rentable. Lo que decimos ahora es que la sanidad pública está preparada para asumir ese 2,4% más de población que vendría. Como ministra orgullosa de nuestra sanidad pública creo que a nuestros funcionarios les podemos ofrecer el mejor servicio que hay. Precisamente el valor por el que las aseguradoras consideran que no les es rentable este servicio es por el envejecimiento de la población, que se vería beneficiado de una sanidad pública donde está la atención primaria. No obstante, la pelota ahora mismo no está en nuestro tejado. 

Las aseguradoras han dicho que asumir ese 1,5 millones de funcionarios provocaría un colapso de la sanidad pública. ¿Han calculado la financiación que haría falta?

De ese millón y medio ya hay medio millón que ha elegido la pública. El colapso de la sanidad no viene porque tengamos que asumir a los funcionarios sino por la mala gestión, por la corrupción y por unas listas de espera mal gestionadas en aquellas comunidades donde no le dan a la sanidad la importancia que tiene. Más allá de esto [incorporar a los asegurados por Muface a la pública] tendría que venir acompañado de esos 1.300 millones, que es lo que se les está ofreciendo a las aseguradoras para que traten a los a los funcionarios.

Hemos hecho una evaluación ante la situación de que las aseguradoras abandonen el concierto y a los mutualistas y la sanidad pública está preparada para asumir ese 2,4% más de población

Hace unos días Sumar y el PSOE firmaron un acuerdo en el que, entre otras cosas, se pactaba acabar con la exención a las primas de seguros privados. Los defensores de la sanidad pública abogan también por acabar con las exenciones fiscales a las que tienen derecho las empresas que contratan pólizas colectivas para sus trabajadores. ¿El Gobierno también se plantea acabar con esto?

En el último año las aseguradoras se han embolsado 9.000 millones, así que tienen una salud de hierro. Efectivamente, hay una serie de desgravaciones fiscales, como el Impuesto sobre Primas de Seguros, que es lo que se plantea que se pague. No tiene sentido que estemos pagando IVA por muchos servicios, incluso por otros seguros, y que este impuesto nos lo estemos ahorrando. Estamos dejando de recibir 425 millones.

Cumple ahora un año al frente del Ministerio de Sanidad. Cuando llegó prometió reforzar la sanidad pública, pero en este tiempo el porcentaje de ciudadanos que opinan que la sanidad necesita cambios profundos ha crecido más de tres puntos, según el barómetro sanitario. Y la sanidad privada sigue ganando terreno. ¿La sanidad pública está más fuerte o menos que hace un año?

Está más fuerte, sobre todo teniendo en cuenta que venimos de una década que fue nefasta. Primero fue la época de los recortes y luego llegó una pandemia que ha venido también a desbaratar todo y a abrir todas las costuras. La sanidad es robusta, pero eso no quita que tengamos que reforzarla en aquellos lugares donde necesitamos invertir para que además tenga un armazón que la blinde ante sucesivos intentos de ataque o ante nuevos retos. No podemos enfrentarnos a todos ellos sin reconstruir lo que previamente se ha deconstruido por parte de la derecha, que ha hecho incluso gala de ello. Todo esto hay que reconstruirlo y por eso vamos a impulsar la ley de sanidad universal y la primera que llevamos al Congreso fue la de la Agencia de Salud Pública.

Uno de los asuntos que más preocupan a los ciudadanos en relación a la sanidad es el que tiene que ver con las largas listas de espera. De hecho, la rapidez es el principal argumento para irse a la privada. Los últimos datos muestran que estamos muy lejos de las cifras que había antes de la pandemia. ¿Qué se está haciendo mal?

Estamos trabajando en el Real Decreto del año 2003, que se ha quedado completamente obsoleto, para dar transparencia y trazabilidad. Las listas de espera son ahora mismo una caja negra en la que no somos capaces de ver qué es lo que está pasando en cada una de las comunidades y en cada una de las patologías. 

¿Qué quiere decir eso? ¿Se hacen trampas con las listas de espera?

Más que eso es que cada comunidad da un número como en una especie de bingo. ¿Qué significa, por ejemplo, decir que hay 53 días de espera? ¿Para qué? Eso no significa nada, y mucho menos cuando ya sabemos que históricamente han sido datos en los que ha habido cierta ingeniería estadística para poder salir bien en la foto. Queremos saber cuánto ha pasado desde que se tiene un problema hasta que este problema se resuelve. Es decir, qué y por qué esperan nuestros pacientes. Si no somos capaces de saber qué está pasando, seremos incapaces de poner las soluciones.

Las listas de espera son ahora mismo una caja negra en la que no somos capaces de ver qué es lo que está pasando en cada una de las comunidades y en cada una de las patologías

En septiembre usted anunció un nuevo Plan de Acción para fortalecer la atención primaria. ¿En qué se concreta y cómo se puede garantizar que todas las autonomías lo pongan en marcha? 

La atención primaria es el corazón del sistema y en otros países nos miran con envidia por ella, pero hay que reformarla. Necesitamos que los pacientes confíen en ella.

¿Y desde el Ministerio que se puede hacer?

Estamos haciendo ese plan que tiene que abordar muchas áreas. La primera consiste en quitar burocracia, la segunda en introducir otros roles de otros profesionales como pueden ser las enfermeras o los equipos de apoyo. Y también necesitamos que se pueda trabajar en la prevención, porque nos estamos dejando de lado una de las joyas de la atención primaria. La competencia está en las comunidades, pero podemos ayudar desde el Ministerio para homogeneizar las buenas prácticas.

No hay benzodiacepina que mejore que no llegues a final de mes o que no puedas pagar el alquiler

El Ministerio ha situado también como uno de sus ejes la salud mental. Este año acaba el plan 2022-2024. ¿Se trabaja ya en el siguiente? ¿Y en qué medidas concretas?

La salud mental requiere un enfoque asistencial, de recursos. Desde que los gobiernos progresistas han llegado al Gobierno de España se han incrementado en un 76% el número de plazas de salud mental de todas las categorías. Sin embargo, también es necesario un enfoque de determinantes sociales de la salud. No hay benzodiacepina que mejore que no llegues a final de mes o que no puedas pagar el alquiler. Es decir, la salud mental no solo depende del Ministerio de Sanidad, sino de muchos otros. Presentaremos el nuevo plan de salud mental a finales de diciembre o enero, y también otro de prevención del suicio.

Sobre el tabaco. ¿Cuánto poder tienen las grandes compañías en España hoy y cómo la están presionando?

Al margen del poder que tienen, hay un poder que es muchísimo mayor, que es el de la gente que ha dicho basta. Somos una sociedad consciente de que el tabaco se lleva 140 vidas al día y 50.000 al año y hay un consenso social después de que hace más de 15 años se empezasen a poner los primeros límites al consumo en los espacios comunes. Iba a ser la hecatombe, pero ahora la propia sociedad nos demanda que pongamos límites a este producto tóxico. Los propios fumadores nos demandan que pongamos medidas para preservar la salud de la población, no sólo con respecto al tabaco tradicional sino también respecto a los nuevos dispositivos que han aparecido en el mercado que suponen una puerta de entrada para los más jóvenes.

¿Se plantean implantar una prohibición de fumar para los más jóvenes como en el Reino Unido?

Vamos paso a paso. Nuestro plan busca tener todas las generaciones que podamos libres de humo. 

Los propios fumadores nos demandan que pongamos medidas para preservar la salud de la población, no sólo con respecto al tabaco tradicional, sino también respecto a los nuevos dispositivos

¿Tiene futuro el Gobierno si no hay Presupuestos?

A este Gobierno se le están atribuyendo desde el principio fines precipitados. Estamos no sólo sobreviviendo, sino reivindicando que la buena política, la política valiente, es la que consigue que los gobiernos puedan ejercer y continuar. Por supuesto que son deseables unos nuevos Presupuestos, porque adaptan a la realidad actual los impuestos de los españoles y españolas. Ahora bien, podemos seguir con los Presupuestos prorrogados porque siguen siendo progresistas, pero hay que actualizarlos. Ahora mismo, por ejemplo, tienen que incluir la reconstrucción de la Comunitat Valenciana. Yo creo que al final vamos a ser capaces de sacarlos.

¿Está sano el espacio a la izquierda del PSOE? 

Yo puedo responder por una organización que es tremendamente sana, que es Más Madrid, que también ha puesto los pilares de esa nueva era del progresismo y que ha puesto siempre en el centro la fraternidad entre los diferentes actores políticos de los distintos partidos. Ha priorizado siempre que tengamos un Gobierno progresista y que se le empuje a que haga las políticas más valientes. Esa es la prioridad: demostrar que el espacio progresista a la izquierda del PSOE es el que materializa realmente las mejoras de esta sociedad. Esperamos que nos pongamos de acuerdo con el resto de actores políticos para demostrarnos que realmente somos nosotros los que empujamos este país.

La prioridad es demostrar que el espacio progresista a la izquierda del PSOE es el que materializa realmente las mejoras de esta sociedad

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Las diferentes formaciones políticas ya estamos hablando. Nos estamos poniendo de acuerdo en qué es ahora mismo la prioridad, que pasa por las políticas públicas que salgan del Gobierno. No es algo que tengamos que hacer en el último momento. Si algo hemos aprendido es que sólo remando juntos somos capaces de crear un espacio fraterno. No competimos entre nosotros, competimos contra la derecha y la ultraderecha que basa su política en los bulos, en las mentiras, en el cinismo y en echar balones fuera, como estamos viendo ahora en el Gobierno de la Generalitat.

¿Se ve como líder del espacio?

Yo soy una orgullosa líder de un espacio maravilloso que se llama más Madrid, que no hace más que crecer y demostrar que la buena política funciona. Además, soy una orgullosísima ministra de Sanidad que está súper centrada en reforzar nuestro sistema sanitario. Esas son mis labores y a eso me voy a dedicar.

Mónica García (Madrid, 1974) concede a infoLibre la primera entrevista en profundidad desde que saltase el escándalo. El jueves 24 de octubre, el fundador de su partido, Íñigo Errejón, hasta entonces también portavoz parlamentario de Sumar, presentaba su dimisión después de las acusaciones de violencia machista de varias mujeres. Unos días después llegó el momento de reconocer errores. También por parte de la líder de Más Madrid. "Desgraciadamente, no hemos sabido hacer lo suficiente", lamentó.

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