El catolicismo español, en su versión más conservadora, se viste de largo este fin de semana. Tiene una de sus citas de vuelo más alto: el Congreso Católicos y Vida Pública, organizado por la Asociación Católica de Propagandistas y “su Obra”, es decir, la Fundación Universitaria San Pablo CEU. Aunque el congreso celebra su 22ª edición con las limitaciones que impone el coronavirus, el formato a distancia no impide observar cómo el evento reúne en torno a una agenda provida al Vaticano, la Conferencia Episcopal, representada por alguno de los obispos de perfil más integrista, puntales del ala religiosa de Vox y organizaciones del florido movimiento antiabortista y antieutanasia. El lema es: “¡El momento de defender la vida!”. Patrocina el banco Santander.
Los promotores del congreso, que empezó este viernes y concluye el domingo, han calentado motores en la antesala del evento. En la presentación, que tuvo lugar el miércoles, el presidente de la Asociación Católica de Propagandistas y de la Fundación Universitaria San Pablo CEU, Alfonso Bullón de Mendoza, puso las cartas sobre la mesa. De su enfoque se desprende que estamos ante un evento religioso, sí. Pero cultural y político también. Casi más. Y no sorprende. Bullón de Mendoza forma parte del núcleo de los más convencidos, dentro del espectro ultracatólico, de la necesidad de librar la guerra cultural contra la izquierda y el supuestamente hegemónico pensamiento progresista.
Los Propagandistas son impulsores clave de la Plataforma los 7.000, junto con la flor y nata del movimiento: Jaime Mayor Oreja (One of Us), Ignacio García Juliá (Foro de la Familia), Juan Antonio Perteguer (Plataforma por las Libertades), Alicia Latorre (Federación Española de Asociaciones Provida), Josep Miró (E-Cristians)... Durante el confinamiento, Bullón de Mendoza participó en los foros de agitación católica contra el Gobierno, acusado de usar la pandemia para acelerar su programa “totalitario”. Sus palabras: "Una crisis sanitaria como la actual será un estímulo muy poderoso a la actuación de esta ideología, al tiempo que parecerá justificarla […]. Si queremos evitar el triunfo de una izquierda totalitaria que nos lleve al desastre, sólo cabe mirar a la derecha”, para que esta impulse "el retorno del buen español al sentido religioso de nuestros mayores".
Durante la presentación del 22º Congreso Católicos y Vida Pública, Bullón de Mendoza cargó contra la anunciada reforma de la Ley del Aborto: “Resulta que para tomar unas cañas tienes que tener una edad pero abortar es algo que se puede hacer sin conocimiento”. Sobre la eutanasia: "No se puede decir que una postura progresista sea la del sí a la eutanasia. En ese sentido, los nazis hubieran sido unos tipos tremendamente modernos, o los espartanos que tiraban a los niños por las rocas", añadió Bullón de Mendoza, que echa “de menos” las “movilizaciones ciudadanas” pero se atiene a las reglas del estado de alarma. El director del Congreso Católicos y Vida Pública, el catedrático de Historia Medieval Rafael Sánchez Saus, rector Honorario de la Universidad San Pablo-CEU, se preguntó: “¿Debemos callar? Creo que no”. A juicio de los Propagandistas Católicos, organizadores del congreso, es crucial “dar el combate contra el aborto”, porque se trata de “la madre de todas las batallas”.
Así explica el congreso su propia vocación: “La vida humana, en función de su valor único e indiscutible, debe ser protegida 'en todas sus etapas, desde el momento de la concepción hasta la muerte natural', como recordaba el papa Benedicto XVI en su célebre discurso de 30 de marzo de 2006 [...]. Ese valor se expande, pues, desde los comienzos a las fases finales de la vida, pasando por los derechos de la familia, institución llamada a generarla y preservarla”. Esas son las prioridades, totalmente alineadas con las de la rama teocón de la Iglesia española, dominantes desde la etapa de Antonio María Rouco Varela y que aún tiene fuerte arraigo en el episcopado, a pesar de los esfuerzos renovadores del papa Francisco, que centra más su mensaje en la pobreza (aunque sin descuidar tampoco la defensa de la vida).
El congreso lleva impreso el carácter de la Asociación Católica de Propagandistas, fundada en 1908. Su objetivo original era “despertar al adormecido catolicismo español de principios del siglo XX” y para ello “llevar a cabo mítines de propaganda católica por toda España”. Durante el franquismo los Propagandistas encarnaron el espíritu nacionalcatólico, declinante conforme avanzaron las décadas y se producía el ascenso de los tecnócratas del Opus. Los Propagandistas pueden presumir de que Leopoldo Calvo-Sotelo, que fue presidente del Gobierno (1981-1982), fue uno de ellos. También José María Gil Robles, destacado líder de la derecha durante la Segunda República. Tienen importante tradición en el campo de los medios de comunicación, vinculado a nombres como El Debate, Ideal e Granada, La Verdad de Murcia, Hoy de Extremadura, El Ideal Gallego, Ya, la agencia Logos... Con sus dominios mediáticos menguados, los Propagandistas sí conservan pegada en el terreno educativo, con el Grupo CEU de colegios y con sus universidades Cardenal Herrera y San Pablo. También tiene, como los jesuitas y el Opus, su business school. Este es el conglomerado que hay detrás de este evento provida.
Dentro del movimiento católico conservador español, los Propagandistas dejan notar su pedigrí universitario. Sus foros rebosan de académicos. No comparten el estilo insolente de Hazte Oír o de la Asociación Española de Abogados Cristianos, que practican el activismo antiizquierdista desde una retórica desbordada. El enfoque del congreso es más intelectual. Pero el abanico de preocupaciones es similar. Se observa en sus talleres: El abismo demográfico español, La maternidad y su promoción, La defensa del nasciturus, La familia y las políticas familiares, La defensa de la vida en los medios de comunicación, La defensa de la vida y los jóvenes...
Participa en los talleres Red Madre, un referente del apoyo a la maternidad desde el embarazo, que cuenta con la colaboración de súper marcas como Telefónica, Caixabank, Bankia y El Corte Inglés. Con Red Madre colabora One Of Us, lobby y think tank de ámbito europeo, con 48 organizaciones y presencia en 19 países, que tiene como cabeza visible al exministro del PP Jaime Mayor Oreja. Es frecuente que el movimiento adopte la forma de muñeca rusa de asociaciones.
También participa en los talleres la Federación Española de Asociaciones Provida, paraguas bajo el que se reúne una treintena de grupos integrados a su vez –junto a los Propagandistas– en la Plataforma Sí a la Vida, agregación de organizaciones de esta cuerda para su movilización.
Provida es una de las firmantes de una reciente carta enviada al papa Francisco, a las puertas de su reunión con Pedro Sánchez, advirtiéndole contra las “leyes profundamente divisivas” del Gobierno, citando aborto, eutanasia y educación. El espinazo de las prioridades del movimiento ultracatólico español.
Política
En el taller Eutanasia y cuidados paliativos participa Joaquín Fernández-Crehuet, coordinador del comité andaluz de lucha contra el coronavirus, de acreditada trayectoria de oposición a la eutanasia y al aborto. La conferencia Eutanasia. Un análisis a la luz de la ciencia y la antropología corrió este viernes a cargo de Manuel Martínez-Sellés, presidente del Colegio Oficial de Médicos de Madrid, otro reconocido provida.
El movimiento ultracatólico está permeado por políticos y expolíticos. Son del PP y, especialmente, de Vox. La diputada de Vox Lourdes Méndez Monasterio, que preside Familia y Dignidad Humana y es miembro del “grupo de expertos” de One of Us, es el rostro de Vox de perfil más alto dentro de este movimiento, pero no el único. Dos de los más destacados, el diputado en el Congreso Francisco José Contreras y la parlamentaria en la Asamblea de Madrid Gádor Joya tienen un papel en el evento de los Propagandistas.
Contreras, que el año pasado participó con la conferencia Educación y encrucijada espiritual europea, es miembro de la Comisión Ejecutiva del congreso, que fue la que decidió su tema de ese año, “la Vida”. Joya, médico de profesión, impartirá la conferencia La defensa del derecho a la vida: un compromiso de todos. Esta diputada en Madrid realizaba ecografías a las puertas de las clínicas de aborto a las mujeres que acudían a las mismas, como explicó ella misma en la Asamblea.
En calidad de director del Observatorio Demográfico CEU, el expresidente de la Comunidad de Madrid con el PSOE Joaquín Leguina ofrecerá la conferencia Panorama y previsiones demográficas en la España de hoy.
Iglesia
La Iglesia –la Iglesia-Iglesia, la estructura diocesana– también se implica en el congreso. Y el Vaticano. En una mesa redonda enmarcada en los prolegómenos del evento, participaron monseñor Luis Argüello, secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal, así como los obispos Ginés García Beltrán (Getafe) y Juan Antonio Reig Pla (Alcalá de Henares). Reig acredita uno de los perfiles más reaccionarios del episcopado español. Su obsesión es el campo afectivo-sexual. Reig Pla dejó el titular más poderoso del encuentro: “España necesita políticos católicos”. La mesa redonda contó con la difusión de la Conferencia Episcopal. Javier Segura, delegado de Enseñanza de la Diócesis de Getafe, es responsable del taller La defensa de la vida y los jóvenes. Está programado para el domingo el seguimiento de una misa, retransmitida por TVE, a cargo de Carlos Osoro, arzobispo de Madrid.
La inauguración del congreso, celebrada este viernes, reunió a Bullón de Mendoza y Fidel Herráez, consiliario nacional de la Asociación Católica de Propagandistas, con Bernardito Auza, nuncio del Vaticano en España, que leyó un mensaje protocolario del papa Francisco. El director del congreso, Rafael Sánchez Saus, destacó que el congreso se ha convertido en el “principal punto de encuentro de los católicos españoles”, llamados a descartar la “pretensión, medio satánica medio infantil, de la total autonomía del hombre en la construcción no sólo de su destino, sino de su identidad y de su propio cuerpo”. “Los falsos dioses de ateos y paganos no sirven en tiempos de calamidad”, afirmó. Bullón de Mendoza expresó durante la inauguración su “rechazo a toda legitimación de la cultura de la muerte, el aborto, el infanticidio y la eutanasia”.
Patrocinio
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El congreso tiene entre sus patrocinadores al Santander, la Cope y Trece TV. Es conocida y obvia la relación de estos dos medios con la Iglesia. Más desapercibida suele pasar la del banco. Pero es estrecha. Es un financiador de las ONG de cabecera de la Iglesia, Cáritas y Manos Unidas. El ya fallecido Emilio Botín, en su etapa de presidente del Banco Santander, dio un decidido apoyo a la Universidad Francisco de Vitoria, vinculada a los Legionarios de Cristo, mediante las Becas Europa y la Escuela de Liderazgo.
El Santander, que en 2017 se quedó por un euro con el Banco Popular, banco históricamente ligado al Opus, es de las entidades que actualmente ofrecen a la Iglesia servicios de inversión a medida, tratando de reducir al mínimo las contradicciones entre fe y negocio. Es el caso de Santander Responsabilidad Conservador o Santander Solidario Dividendo Europa, como explicaba El Independiente en este artículo que situaba al Santander como “banco de referencia” de la Iglesia.
Ni el banco, ni la organización del congreso, ni los Propagandistas aclaran la cuantía del patrocinio, que no es exclusivo del Santander. Tampoco hay información pública sobre el presupuesto del congreso, una cita que –incluso en tiempo de pandemia– permite observar el creciente peso e influencia del ala más combativa de la Iglesia.
El catolicismo español, en su versión más conservadora, se viste de largo este fin de semana. Tiene una de sus citas de vuelo más alto: el Congreso Católicos y Vida Pública, organizado por la Asociación Católica de Propagandistas y “su Obra”, es decir, la Fundación Universitaria San Pablo CEU. Aunque el congreso celebra su 22ª edición con las limitaciones que impone el coronavirus, el formato a distancia no impide observar cómo el evento reúne en torno a una agenda provida al Vaticano, la Conferencia Episcopal, representada por alguno de los obispos de perfil más integrista, puntales del ala religiosa de Vox y organizaciones del florido movimiento antiabortista y antieutanasia. El lema es: “¡El momento de defender la vida!”. Patrocina el banco Santander.