A ocho meses de que se celebren las elecciones municipales, los comuns vuelven a estar inmersos en su propio enredo interno. La dimisión de Xavier Domènech como líder de Podemos Cataluña y de Catalunya en Comú hace unas semanas reavivó las tensiones en un espacio en el que conviven desde federalistas hasta algunos independentistas, y la reorganización de la ejecutiva que certificaron los comuns hace unos días amenaza con afectar también a su grupo parlamentario en el Parlament de Cataluña, donde algunas corrientes apuestan por descabalgar del puesto de portavoz a Elisenda Alamany. Además, la nueva secretaria general de Podemos Cataluña, Noelia Bail, ha dejado claro que su apuesta que el partido morado colabore con Catalunya en Comú, pero sin integrarse en la formación unitaria, lo que implica que en las próximas elecciones el partido morado podría concurrir en solitario en algunos municipios.
Bail fue proclamada nueva secretaria general de Podemos Cataluña el pasado lunes al vencer por tan solo 19 votos al candidato oficialista, Jaume Durall. La nueva líder de la formación formó parte de la ejecutiva del malogrado Albano Dante Fachin, fue uno de sus apoyos más firmes hasta que abandonó el cargo y, aunque no lo acompañó en su salida de Podemos –Fachin dejó el partido morado el pasado noviembre tras meses de tensiones con la dirección estatal liderada por Pablo Iglesias–, Bail sí comparte con el polémico ex secretario general su rechazo a integrarse en Catalunya en Comú junto a ICV, EUiA y Barcelona en Comú.
La reticencia de Fachin a la hora de incorporar Podemos al partido unitario liderado por Ada Colau fue una de las causas que provocaron que comenzaran a deteriorarse sus relaciones con la dirección estatal de Iglesias, y de hecho una de las primeras decisiones que tomó el partido tras la salida de Fachin fue la de iniciar la integración de la rama catalana del partido en Catalunya en Comú. La elección de Domènech como líder tanto de los comuns como de Podemos Cataluña fue un fuerte espaldarazo a este proceso de integración, y todo apuntaba a que el bloque liderado por Colau iba a contar con el partido morado para las elecciones del año que viene.
Pero la dimisión de Domènech y su sustitución por Bail lo cambian todo. Este martes, en una entrevista ofrecida al programa Els Matins de TV3, la nueva secretaria general defendió que Podemos y Catalunya en Comú deben colaborar, sí, pero sin que su alianza vaya más allá de una coalición, la misma fórmula utilizada en las últimas elecciones catalanas. Es decir, sin integrarse orgánicamente en el partido de Colau, y teniendo que negociar de manera independiente cada alianza puntual. En ningún caso, aseguró Bail, las siglas de Podemos quedarán diluidas en un sujeto más amplio.
Lo cierto es que Bail no lo tendrá tan fácil para bloquear la integración de Podemos en Catalunya en Comú: pese a que ella es la nueva secretaria general, el Consejo Ciudadano del partido en la comunidad –su máximo órgano entre congresos– aún está férreamente controlado por los afines a Domènech, por lo que es posible que se produzcan choques entre sectores por este asunto. No obstante, Bail afirmó este martes que las direcciones municipales de Podemos Cataluña tendrán en los próximos comicios locales "autonomía territorial" para definir su política de alianzas con otras fuerzas, y aseguró que "respetará" sus decisiones, lo que abre la puerta a que Podemos pueda presentarse en solitario en algunos municipios catalanes en las próximas elecciones.
Así lo admiten fuentes de la propia Catalunya en Comú, que sacan a Barcelona de esta ecuación –la capital "tiene sus propias dinámicas", señalan–, pero se reconocen resignadas a no poder presentarse en todos los lugares como un bloque unitario de la izquierda no independentista a la izquierda del PSC. "Habrá geometría variable, y no descarto que puedan presentarse solos en algún caso", admite un dirigente de Catalunya en Comú, que se muestra convencido de que la dirección estatal de Podemos no va a presionar para cerrar alianzas en todos los municipios con los comuns. "No es lo mismo integrarse en una Catalunya en Comú con Xavi Domènech al frente" que tener que reconstruir Podemos Cataluña desde una posición de debilidad en el partido unitario, explican estas fuentes.
Alamany, en el punto de mira
Pero los reposicionamientos en el espacio de los comuns no solo afectan a Podemos, sino también a la propia Catalunya en Comú. Tras la dimisión de Domènech, la formación unitaria se ha embarcado en un proceso de reorganización interna que comenzó con la elección de Ramón Arnabat y Candela López como cocoordinadores de la formación junto a Colau, pero que también ha afectado al reparto de puestos en la ejecutiva y a la portavocía del partido, que deja de ocupar Elisenda Alamany para pasar a manos de Joan Mena, diputado de En Comú Podem en el Congreso.
Noelia Bail, nueva secretaria general de Podem Catalunya tras obtener el 32% de los votos
Voces de los comuns critican esta reorganización porque, aseguran, está sirviendo para alejar de los puestos de poder a algunos de los fieles a Domènech –como es el caso de la propia Alamany– mediante una alianza interna entre el entorno de Colau e ICV, que ha ganado peso en las últimas fechas. Pero los cambios en el partido, lejos de quedarse ahí, podrían extenderse al grupo parlamentario de Catalunya en Comú Podem, y la principal perjudicada podría ser la misma Alamany, que se ha quedado sin su gran valedor y podría perder el puesto de portavoz también en el Parlament.
Las diferencias internas con respecto a su figura no son nuevas. Desde hace tiempo, la dirigente suscita recelos internos entre los sectores más federalistas –identificados en gran medida con ICV– por su perfil más soberanista y su independentismo declarado, y a estas críticas se une ahora Podemos: en su entrevista del martes, Noelia Bail señalaba abiertamente que "a nadie se le escapa" que Alamany "tiene un posicionamiento diferente" al del partido morado y al de una parte de los comuns.
Así las cosas, esta semana será clave para el futuro del grupo parlamentario de Catalunya en Comú Podem, ya que no solo se baraja la sustitución de la portavoz, sino cambios en los equipos técnicos que conformó Domènech con personas de su confianza y que llevan trabajando apenas unos meses. Fuentes de la formación explican que la cúpula se ha dado hasta el próximo domingo para solucionar el asunto, por lo que los movimientos, de producirse, tendrán lugar en los próximos días.
A ocho meses de que se celebren las elecciones municipales, los comuns vuelven a estar inmersos en su propio enredo interno. La dimisión de Xavier Domènech como líder de Podemos Cataluña y de Catalunya en Comú hace unas semanas reavivó las tensiones en un espacio en el que conviven desde federalistas hasta algunos independentistas, y la reorganización de la ejecutiva que certificaron los comuns hace unos días amenaza con afectar también a su grupo parlamentario en el Parlament de Cataluña, donde algunas corrientes apuestan por descabalgar del puesto de portavoz a Elisenda Alamany. Además, la nueva secretaria general de Podemos Cataluña, Noelia Bail, ha dejado claro que su apuesta que el partido morado colabore con Catalunya en Comú, pero sin integrarse en la formación unitaria, lo que implica que en las próximas elecciones el partido morado podría concurrir en solitario en algunos municipios.