Una vez cerrados los pactos a nivel local y elegidos los alcaldes en todos los municipios de España, el panorama de acuerdos a nivel autonómico se aclara. Entre el jueves y el viernes se han confirmado alianzas de izquierdas en Baleares, Canarias, Cantabria y La Rioja, y también un pacto entre PP y Ciudadanos en Castilla y León, mientras en lugares como Aragón, Madrid o la Región de Murcia aún se están ultimando las negociaciones para formar gobiernos autonómicos. Los pactos, en casos como el aragonés, el castellanoleonés o el asturiano, estarán influidos por las alianzas suscritas por los partidos a la hora de conformar los ayuntamientos la semana pasada.
Tras la celebración de las últimas elecciones, tan solo la Comunitat Valenciana ha elegido ya su nuevo gobierno, un ejecutivo de coalición liderado por Ximo Puig (PSOE) y con presencia tanto de Compromís como de Unidas Podemos. No obstante, ninguna de las 12 autonomías que celebraron elecciones el pasado 26 de mayo –las valencianas tuvieron lugar el 28 de abril– han elegido nuevo presidente todavía, aunque en la última semana se han rubricado pactos en cinco de ellas y los otros siete están negociándose con mayor o menor grado de avance. Extremadura y Castilla-La Mancha son las únicas donde la negociación es innecesaria, dada la mayoría absoluta obtenida por el PSOE.
Los pactos ya cerrados
Baleares
El pasado jueves, PSOE, Podemos y Més anunciaron haber llegado a un acuerdo de coalición para que la actual presidenta, la socialista Francina Armengol, continúe cuatro años más en el cargo. Los socialistas controlarán siete de las once consejerías, mientras que Més tendrá el control de otras dos –y elegirá, además, el senador de designación autonómica– y las dos restantes serán para Podemos, cuyo candidato autonómico, el exjuez Juan Pedro Yllanes, será vicepresidente. El Parlament balear se constituyó hace unos días, y la sesión de investidura de Armengol tendrá lugar el próximo martes.
El acuerdo a nivel autonómico ha venido precedido por su equivalente en la capital, Palma, donde el PSOE recuperará la alcaldía que se encontraba en manos de Més en virtud del pacto entre ambos partidos la pasada legislatura, cuando se repartieron el bastón de mando en periodos de dos años. José Hila será regidor durante los próximos cuatro años habiendo cedido tres concejalías a Podemos, cuyo exlíder autonómico Alberto Jarabo también tendrá la portavocía municipal, y otras tres a Més.
Canarias
Un formato similar es el que seguirá el pacto para que el PSOE recupere, más de dos décadas después, la presidencia autonómica de Canarias. El pasado jueves, los socialistas rubricaron un pacto con Nueva Canarias, Podemos y Agrupación Socialista Gomera por el cual Ángel Víctor Torres liderará un Gobierno en el que estarán presentes las cuatro formaciones firmantes. Este sábado se presentará públicamente el acuerdo, del que no obstante aún no se conoce el reparto de áreas y consejerías, que los cuatro partidos pretenden cerrar antes del próximo martes, cuando se constituye el Parlamento canario.
Los acuerdos por la izquierda para hacerse con las principales plazas de poder ya comenzaron, no obstante, la semana pasada a nivel municipal. El PSOE se ha hecho con la alcaldía de las dos capitales provinciales: en Las Palmas de Gran Canaria, Augusto Hidalgo ha renovado el bastón de mando con el apoyo de Podemos y Nueva Canarias, mientras en Santa Cruz de Tenerife el PSOE ha desalojado del gobierno municipal a Coalición Canaria pactando, a la vez, con Podemos y Ciudadanos.
Cantabria
Por el contrario, en Cantabria los socialistas serán el socio minoritario de un Gobierno comandado por el Partido Regionalista de Cantabria (PRC) de Miguel Ángel Revilla, que presidirá la comunidad reeditando el bipartito con el líder autonómico del PSOE, Pablo Zuloaga, que será su vicepresidente. Aún no hay fecha fijada para la investidura de Revilla, aunque lo más probable es que la sesión se celebre la semana que viene. Dentro del acuerdo global PRC-PSOE también se establece que el único parlamentario regionalista en el Congreso, José María Mazón, apoyará la investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno.
Castilla y León
Este viernes fue el día elegido por PP y Ciudadanos para suscribir un acuerdo programático de 100 medidas en las que se incluyen propuestas relativas a la regeneración como la limitación de mandatos, pero también otras de carácter económico, fiscal o relativas a los servicios públicos. Ambas formaciones están de acuerdo en conformar un Gobierno de coalición, pero aún no han decidido cómo repartirse las consejerías, un reparto en el que Ciudadanos aspira a conseguir más puestos de poder de los que le corresponderían estrictamente por su representación (tiene 12 procuradores autonómicos por 29 del PP).
El acuerdo, no obstante, está encarrilado desde que el PP cedió varias plazas municipales castellanoleonesas a cambio del apoyo de Ciudadanos para seguir gobernando en la Junta. En virtud de este acuerdo, los conservadores entregaron al partido naranja la alcaldía en Palencia y Burgos pese a tener más concejales que Ciudadanos, aunque el pacto no ha terminado de salir bien: en la capital burgalesa, los concejales de Vox se negaron a votar a favor del candidato de Ciudadanos al no haber sido incluidos en este pacto, mientras que en la palentina la ultraderecha acusa al regidor naranja de mentir al asegurar que no acordó nada con Vox.
La Rioja
Por el contrario, en La Rioja el PP saldrá del Gobierno autonómico después de 24 años tras el pacto anunciado el jueves por PSOE y Unidas Podemos para hacer presidenta a la socialista Concepción Andreu. La alianza ya dio su primer fruto con la elección de Jesús María García (PSOE) como presidente del Parlamento, y ahora las dos formaciones negocian el reparto de carteras de un Gobierno que no será monocolor, como pretendía en un primer momento el PSOE, sino que tendrá algún consejero de Unidas Podemos.
Los pactos que aún están negociándose
Aragón
El PSOE, liderado en la región por Javier Lambán, aún está a la espera de iniciar formalmente las negociaciones a su izquierda para reeditar el Gobierno. Hace semanas, los socialistas firmaron un acuerdo con el conservador y regionalista Partido Aragonés (PAR), lo que frustró las posibilidades de un cuatripartito PP-Ciudadanos-Vox-PAR, que hubiera sumado la mayoría absoluta. Y ahora, el PSOE se encuentra negociando el apoyo de Podemos, la Chunta Aragonesista e IU, cuyos apoyos son necesarios –junto al del PAR– para que Lambán siga siendo presidente de Aragón.
Pese a que, inicialmente, PSOE y PAR instaron a Ciudadanos a unirse a su acuerdo, la negativa del partido naranja ha obligado a los socialistas a mirar a su izquierda. La semana que viene, el PSOE se reunirá con Podemos, IU y Chunta, pero no con Ciudadanos, que a juicio de los socialistas se ha "autodescartado" de las conversaciones. Los aragonesistas, por su parte, aspiran a entrar en el Ejecutivo y, aunque rechazan la presencia de Podemos en el mismo, no ponen pegas para aceptar sus votos.
En este sentido, el viernes se produjo el primer ejemplo del posible entendimiento de PSOE y PAR con las fuerzas de izquierdas en la sesión de constitución de las Cortes, cuando el socialista Javier Sada fue elegido presidente del parlamento con el apoyo de PSOE, PAR, Podemos, Chunta e IU. Esa misma alianza se repitió en la designación de Itxaso Cabrera (Podemos) como secretaria primera de la Mesa, aunque con una salvedad: el PAR votó en contra, señal de que quiere limitar al máximo posible los acuerdos con la formación morada.
Asturias
El panorama asturiano es similar al aragonés, aunque en el Principado son los pactos municipales los que han alejado la opción de un pacto con Ciudadanos para que el PSOE se mantenga en el Gobierno. La formación naranja pactó la semana pasada para devolver la alcaldía de Oviedo al PP, lo que ha enfriado sobremanera las relaciones con los socialistas, cuyo líder asturiano, Adrián Barbón, ya avisó de que este acuerdo por la derecha influiría en los pactos a nivel autonómico y ha demostrado su enojo por que Ciudadanos no haya prestado sus votos al candidato ovetense del PSOE, Wenceslao López.
Pese a todo, y a diferencia de otras comunidades, Ciudadanos sí está dispuesto a negociar con el PSOE el Gobierno autonómico, para el que solo hay otra opción: que Barbón se entienda con Podemos e IU. Las conversaciones, no obstante, están aún en un momento muy preliminar: por el momento, los socialistas han iniciado una ronda de conversaciones con todos los partidos salvo Vox para configurar la Mesa de la Junta General del Principado, el parlamento autonómico. Los acuerdos que se alcancen para ese órgano, que se constituirá el próximo martes, pueden ser claves para determinar los futuros pactos de Gobierno.
Comunidad de Madrid
Si lo ocurrido en Oviedo parece que influirá en lo que termine ocurriendo con el Gobierno de Asturias, el pacto de la derecha y la ultraderecha en Madrid capital puede terminar condicionando también su entendimiento a nivel regional. PP, Ciudadanos y Vox hicieron alcalde de Madrid la semana pasada al candidato conservador José Luis Martínez Almeida, pero están enzarzados desde entonces por el contenido de los pactos que lo hicieron posible. Pactos que el PP firmó por separado con la ultraderecha y con el partido naranja.
Vox asegura que el documento que firmó con el PP explicitaba su presencia en la Junta de Gobierno municipal, mientras Ciudadanos se niega a compartir gabinete con la ultraderecha y sostiene que su propio acuerdo con los conservadores establece que solo las formaciones de Almeida y Begoña Villacís tendrán concejalías. A la espera de que esto se aclare, Vox rompió hace unos días las conversaciones con el PP para hacer presidenta de la Comunidad de Madrid a la candidata conservadora Isabel Díaz Ayuso, que mientras tanto sigue negociando el apoyo de Ciudadanos pero que también necesita a la ultraderecha para que su candidatura salga adelante.
Navarra
El lío en la Comunidad Foral es aún más considerable, aunque con actores diferentes al de la Comunidad de Madrid. La semana pasada, el PSOE apoyó que Navarra Suma –la coalición de UPN, PP y Ciudadanos– recuperase la alcaldía de Pamplona tras cuatro años en manos de EH Bildu negándose a prestar sus votos a la formación abertzale. Pero el nivel autonómico es diferente, y las relaciones entre los socialistas y los nacionalistas dieron su primer fruto con el acuerdo adoptado por sorpresa para la Mesa del Parlamento de Navarra.
Ver másLas negociaciones siguen encalladas en Madrid, Navarra y Aragón al borde de la fecha tope para fijar la investidura
El pasado miércoles, los socialistas facilitaron a Geroa Bai (a grandes rasgos, la marca del PNV en Navarra) la presidencia de esa cámara y cedieron ante el deseo de Geroa Bai de dar un puesto en la Mesa a EH Bildu siempre y cuando no fuera con votos socialistas. Ese pacto allana el camino para que el PSOE gobierne la comunidad con su líder, María Chivite, al frente, aunque para ello debe sumar el apoyo tanto de Geroa Bai como de Podemos e IU y, además, necesita que EH Bildu al menos se abstenga. No obstante, el PSOE se niega a negociar con los abertzales, que serán claves para decidir si el próximo gobierno navarro es socialista o de Navarra Suma.
Región de Murcia
En la Región de Murcia, PP y Ciudadanos alcanzaron este jueves un acuerdo programático para conformar un Gobierno de coalición y ahora negocian el reparto de carteras. Pero eso no significa que el pacto esté cerrado, ni mucho menos, porque para salir adelante necesita de un tercer actor: Vox, con quien el partido naranja se niega a negociar y que exige, precisamente, estar en las conversaciones para dar su apoyo al PP. Por ello, en la reunión que mantuvo este viernes la portavoz de Ciudadanos, Isabel Franco, con el presidente de la Asamblea regional, Alberto Castillo, Franco declinó dar por sentado su apoyo al candidato del PP, Fernando López Miras, y dejó la puerta abierta a una eventual negociación con el PSOE si el acuerdo con el PP no saliera adelante.
Una vez cerrados los pactos a nivel local y elegidos los alcaldes en todos los municipios de España, el panorama de acuerdos a nivel autonómico se aclara. Entre el jueves y el viernes se han confirmado alianzas de izquierdas en Baleares, Canarias, Cantabria y La Rioja, y también un pacto entre PP y Ciudadanos en Castilla y León, mientras en lugares como Aragón, Madrid o la Región de Murcia aún se están ultimando las negociaciones para formar gobiernos autonómicos. Los pactos, en casos como el aragonés, el castellanoleonés o el asturiano, estarán influidos por las alianzas suscritas por los partidos a la hora de conformar los ayuntamientos la semana pasada.