Según la web del Ministerio de Interior, la participación en el conjunto del país ha subido ligeramente, sólo 0,17 puntos, al pasar de 69,67 en las elecciones de 2015 a 69,84 en esta ocasión.
Aunque el segundo avance de participación ofrecido por el Ministerio del Interior se situaba en el 51,22%, el más bajo a esa hora de toda la democracia, con el 100% de los votos escrutados se coloca en el 69,84%, a niveles similares a las de otras elecciones generales.
La explicación de ese bajo nivel de participación a la hora del segundo avance se debe a que muchos votantes han aprovechado el buen tiempo para salir de sus ciudades y votar, por tanto, a última hora del día y al voto por correo que en estas elecciones supera los 1,5 millones.
Las comunidades donde más participación ha habido fue en La Rioja, Comunidad Valenciana y Madrid, donde se superó el 74% frente a Baleares, con un 62,58%. Pese a la baja participación en estos comicios, las elecciones generales de marzo de 1979 y de marzo de 2000 tuvieron menor afluencia y sólo concitaron al 68,04% en el primer caso y 68,71% en el segundo.
Por el contrario, las elecciones de 1982 fueron las que consiguieron que más personas acudieran a las urnas, con el 79,97, por delante de los primeros comicios de la democracia, en junio de 1977, que lograron un 78,73% de afluencia.
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El siguiente cuadro recoge, por comunidades autónomas, el último porcentaje de participación en las elecciones este domingo y su comparativa con las generales de 2011.
En el barómetro preelectoral del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), un 71% de los encuestados afirmó que iría a votar con toda seguridad. En diciembre ese porcentaje era del 75,3% –ha caído 4,3 puntos– y la participación en las urnas fue finalmente del 73,2%. En segundo lugar, un 11,2% adicional dijo que probablemente iría a votar –en diciembre fueron el 11,6%–. Por último, un 13,3% de los ciudadanos aseguraron que probablemente no irían a votar o que tenían decidido quedarse en casa el 26-J, una cifra que en diciembre era del 10,3%, informa Ibon Uría.
En este sentido, el dato más alto de participación final fue la registrada en 1982 –primera victoria del PSOE en las generales–, cuando ejercieron su derecho al voto 21.469.274 personas, un 79,97% del censo electoral de la época.
Según la web del Ministerio de Interior, la participación en el conjunto del país ha subido ligeramente, sólo 0,17 puntos, al pasar de 69,67 en las elecciones de 2015 a 69,84 en esta ocasión.