Lunes 27 de diciembre. La versión impresa del diario británico The Guardian publica en su página 28 un artículo con declaraciones del ministro de Consumo español, Alberto Garzón, respecto al consumo de carne y al impacto ambiental de las macrogranjas. Desde la noche anterior, la pieza también se sube a la página web del periódico con un impacto prácticamente inexistente. “Aquí nadie se hizo eco de esas palabras, la repercusión fue nula”, cuenta a infoLibre desde Londres Alberto Muñoz, corresponsal en Reino Unido de laSexta.
El artículo no estuvo ni mucho menos entre los más leídos del día en The Guardian. De hecho, el número de visitas al mismo no se disparó hasta cuatro o cinco días después, con la mitad de las lecturas totales registradas desde España coincidiendo ya con el estallido de la polémica en nuestro país. Tanto es así que, una vez constatado el lío doméstico generado, The Guardian decide publicar otro artículo el día 6 de enero para trasladar esa disputa política desencadenada. “La verdad es que ha tenido más impacto en el Reino Unido la polémica de España que la entrevista original”, cuenta el corresponsal español.
Ningún impacto en las exportaciones
Tampoco parece relevante el impacto que las palabras de Garzón hayan podido tener en el Comercio Exterior de España. Según fuentes del propio ministerio de Industria, Turismo y Comercio, ninguna de las oficinas comerciales que España tiene en el exterior han planteado duda, consulta o queja alguna al Gobierno, que además reconoce que, respecto a ese tema, “la preocupación es ninguna”.
Preguntado expresamente por ello tras la rueda de prensa del Consejo de Ministros, el propio titular de Exteriores, José Manuel Albares, admitió “no tener ninguna constancia” de que las declaraciones del ministro de Consumo hayan tenido impacto alguno entre los países importadores de carne española. Aún así, desde el departamento de Reyes Maroto se especifica que los datos de comercio exterior suelen llegar con una diferencia de varios meses, aunque nada hace indicar que este episodio vaya a cambiar una tendencia muy positiva en todos los sectores respecto al volumen de las exportaciones, que se ha mostrado robusto incluso durante los peores meses de la pandemia.
Lo que nadie es capaz de explicar muy bien en el seno del Gobierno es la razón por la que desde el propio Ejecutivo se ha contribuido a avivar las llamas de un incendio que, a tenor de los datos, no se justifica por el impacto del artículo de The Guardian. El propio Pedro Sánchez recriminó en público este lunes en la cadena Ser las palabras de Alberto Garzón, una crítica en la que también incidió el ministro Luis Planas en varios medios de comunicación. A pesar de las insistentes preguntas de los periodistas, nadie en Moncloa ha querido pronunciarse respecto a la continuidad o no del ministro de Consumo en su puesto tras las peticiones de dimisión de PP, Vox y de incluso líderes socialistas como el aragonés Javier Lambán.
UP lo lamenta; el PP hace campaña
Ver másYolanda Díaz recuerda a Sánchez que la ganadería sostenible es un compromiso del Gobierno y de la UE
La conclusión en Unidas Podemos es que se trata de una cuestión de mera política interna: “Si no hay elecciones en Castilla y León no pasa esto, porque es que lo que ha dicho Garzón forma parte del programa de Gobierno y lo ha defendido en público hasta el propio presidente. No tiene sentido salvo por el miedo que le tienen a la derecha en zonas rurales de algunos territorios donde hay grandes intereses, pero creo que se equivocan”, razonan fuentes moradas.
Mientras, en el PP siguen percibiendo la disputa dentro de la propia coalición como el escenario ideal sobre el que hacer girar la campaña en Castilla y León y para ello también han extendido sus críticas hacia el exterior. Ante representantes de embajadas como Alemania, Francia, Portugal, Italia, Países Bajos y Polonia, dirigentes populares como Jaime de Olano o Valentina Martínez criticaron este martes que el ministro de Consumo “hablase mal”, según ellos, de la calidad de la carne española, según fuentes consultadas por Europa Press.
Dos semanas después de la publicación, desde Londres siguen sorprendidos por la polémica: “Reino Unido es uno de los países que más comida importa de España y aquí nadie ha puesto el grito en el cielo con el artículo”, explica el corresponsal Alberto Muñoz. “Si lees la entrevista en inglés en ningún momento se entiende que el ministro esté criticando a la carne española. Los colegas británicos lo interpretaron como una crítica a las macrogranjas, que es un debate que también está abierto aquí. La polémica en Londres no ha llegado a entenderse muy bien”, concluye.
Lunes 27 de diciembre. La versión impresa del diario británico The Guardian publica en su página 28 un artículo con declaraciones del ministro de Consumo español, Alberto Garzón, respecto al consumo de carne y al impacto ambiental de las macrogranjas. Desde la noche anterior, la pieza también se sube a la página web del periódico con un impacto prácticamente inexistente. “Aquí nadie se hizo eco de esas palabras, la repercusión fue nula”, cuenta a infoLibre desde Londres Alberto Muñoz, corresponsal en Reino Unido de laSexta.