El PSOE abre otro flanco en su propuesta de reforma de la Constitución en clave federal: la Justicia. Incluir la descentralización de uno de los tres grandes poderes del Estado no estaba entre las previsiones iniciales del partido, pero ahora incorporará ese punto de cara a la reunión del Consejo Territorial del próximo 6 de julio en Granada, el foro en el que Alfredo Pérez Rubalcaba se reunirá con sus barones para discutir un nuevo modelo de Estado. Los contornos de esa iniciativa, no obstante, están por definir.
El líder de los socialistas hizo el anuncio en la rueda de prensa que siguió a la reunión de la ejecutiva federal de este lunes en Ferraz. Según explicó, fueron varias las federaciones que pidieron que se abordara este asunto. Cuatro, en concreto: Andalucía, Comunitat Valenciana, Cataluña y Aragón. Todas con mucho peso orgánico y de militancia, excepto la última. La dirección, narró, vio con "simpatía" esa iniciativa "razonable", así que ahora la someterá a debate con los secretarios generales, a fin de que el documento final que sancione el Consejo Territorial introduzca "alguna cosa".
Rubalcaba recordó que el PSOE ya votó a favor de territorializar la Justicia cuando pasaron por las Cortes los estatutos de autonomías de segunda generación, singularmente el de Cataluña. Precisamente el Tribunal Constitucional (TC) ya se pronunció sobre este en su sentencia sobre 2010, y lo que hizo fue desmantelar casi en su totalidad el título dedicado a Justicia. El Estatut preveía la creación de un Consell de Justícia –un Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) catalán–, con amplias prerrogativas, y la concepción del Consell como un "órgano desconcentrado" del CGPJ. El TC también dejaba claro que el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya no podía "contraer la competencia" del Tribunal Supremo. El PSC propone, en el documento que envió a Ferraz, blindar el poder del TSJC, reservar al TS la capacidad de "unificación de doctrina" y desproveer de peso al CGPJ.
El secretario general, desde luego, no ha llegado a tanto. "Permítanme que empecemos la discusión y ya fijaremos posición. No es un tema nuevo en el PSOE. Hemos votado ya a favor de la descentralización de la Justicia. Otra cosa es ver hasta dónde la llevamos". Todas las veces que se le inquirió, todas las veces lo despachó con una respuesta semejante. Esperar y ver. En cualquier caso, no se contempla que en el texto que se apruebe en Granada se vaya hasta el último detalle. Como insistió, se trata de incluir en la Constitución "principios", no un desarrollo completo. No tendría mucho sentido, alegó, porque en la Carta Magna no conviene la concreción más absoluta, y también porque ese documento, en cualquier caso, será la propuesta del PSOE, que deberá ser discutida con el resto de formaciones. No obstante, el oficiado hoy es un giro importante, pues hasta ahora la dirección federal no se sentía cómoda con el debate abierto por los socialistas catalanes.
"No va a haber desembarco del PSOE en Cataluña"
Rubalcaba escenifica su apoyo a Tomás Gómez como candidato para Madrid
Este nuevo elemento de debate se cuela tras una semana agitada en las relaciones del PSOE y del PSC a cuenta del concierto vasco y convenio navarro y el cupo. El primer secretario de los socialistas catalanes, Pere Navarro, abrió la caja de los truenos el jueves pasado cuando sugirió eliminar los regímenes económicos y fiscales forales propios de Euskadi y Navarra. Enseguida le cayó un chaparrón de otros barones y el frenazo de Ferraz. Hoy Rubalcaba se atuvo a la tesis oficial: concierto "sí", cupo –la cantidad que las dos comunidades devuelven al Estado como pago por competencias no transferidas– "revisable" para que sea "más eficaz, justo y solidario", como es "revisable" el sistema de financiación en su conjunto para las CCAA del régimen común. "Hablé con Pere Navarro y me explicó que había hablado del cupo y no del concierto. Que era una propuesta que ellos habían hecho, me dio una explicación y punto, no hay más", zanjó. Tampoco hubo aclaración respecto a si País Vasco y Navarra deben participar de los fondos de solidaridad.
Ferraz no contempla que el tropiezo del concierto vasco distancie a PSOE y PSC. De hecho, frente a aquellos que, como el extremeño Guillermo Fernández Vara, vuelven a clamar por la ruptura, Rubalcaba recordó que la dirección federal no está en eso: "Puedo decir con toda rotundidad que no va a haber desembarco del PSOE en Cataluña. Va a haber un buen acuerdo con el PSC. Es mi pronóstico, mi opinión, mi deseo". Las conversaciones sobre la propuesta de reforma federal de la Constitución seguirán, al igual que el diálogo sobre el nuevo marco de relaciones entre los dos partidos hermanos. Sobre este último punto, respondió con total laconismo: "Las negociaciones van, confío en terminarlas pronto, son paralelas al modelo territorial". Dicho de otro modo: si el nuevo diseño del Estado es acordado con todas las federaciones y con el PSC, Ferraz no ve problema en la articulación de las nuevos lazos de PSOE y PSC. "Una cosa que ha durado 30 años no se cambia en media tarde", expresó.
Una última cuestión, aunque más aislada, emergió en la comparecencia: la escenificación de la unidad en Madrid y el respaldo al secretario general del PSM. Rubalcaba, sin embargo, quiso mostrarse hoy más cauto, alegando que sus buenas palabras de ayer se correspondían con las características del foro, un "acto electoral": "En Madrid puede haber primarias o no en función de si hay o no un candidato. Serán los militantes madrileños los que decidan. Si Tomás Gómez fuera el candidato, ganará y tendrá mi apoyo en la Comunidad de Madrid".
El PSOE abre otro flanco en su propuesta de reforma de la Constitución en clave federal: la Justicia. Incluir la descentralización de uno de los tres grandes poderes del Estado no estaba entre las previsiones iniciales del partido, pero ahora incorporará ese punto de cara a la reunión del Consejo Territorial del próximo 6 de julio en Granada, el foro en el que Alfredo Pérez Rubalcaba se reunirá con sus barones para discutir un nuevo modelo de Estado. Los contornos de esa iniciativa, no obstante, están por definir.