Todo apunta a que la polémica entre Ferraz y el Partido Socialista de Madrid (PSM) se queda en nada. Tomás Gómez, líder del PSM y senador, no tendrá que votar al juez Gerardo Martínez Tristán como vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) porque su refrendo pasará por el Congreso, y no por la Cámara alta. Deshecho el lío, se espere que apoye el pacto trenzado entre los dos grandes partidos y no deje su escaño, tal y como había amagado con hacer. Y, por otro lado, el PSOE no espera "ninguna indisciplina de voto" esta tarde, cuando la Cámara baja elija oficialmente a los diez miembros del órgano de gobierno de los jueces que le corresponde designar.
La secuencia arrancó ayer lunes. Gómez fue informado de que uno de los 12 jueces que se incorporarán al nuevo CGPJ –los otros ocho proceden del cupo de juristas de reconocido prestigio– era Martínez Tristán, el magistrado que se arrogó la potestad de que la Sala de lo Contencioso del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), que él preside, decidiese sobre todos los recursos en contra de la privatización de la sanidad madrileña. Este juez fue recusado por el PSM también por ser el marido de una consejera del Gobierno manchego, que encabeza María Dolores de Cospedal. Gómez escribió una carta automáticamente a Alfredo Pérez Rubalcaba, donde calificó de intolerable el acuerdo alcanzado por PSOE y PP sobre la renación del CGPJ, ya que resultaba incomprensible para los socialistas madrileños y para los profesionales sanitarios respaldar a Martínez Tristán. El líder del PSM le advertía de que si la lista que incluye a este juez llegara al Senado para su votación, él, para no romper la disciplina de partido y ser "coherente" con sus principios, renunciaría a su escaño de forma inmediata.
Soraya Rodríguez, la portavoz socialista en el Congreso, insistió hoy martes en rueda de prensa en que al partido no le "gusta" que el presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJM se convierta en nuevo vocal del CGPJ, pero recordó cuál había sido el procedimiento de partida y los objetivos marcados: cumplir con la "obligación" de renovar el Poder Judicial y no bloquear la institución e "incorporar al mayor número de grupos" al acuerdo, para lo cual se estableció el principio de que ninguna fuerza utilizara el derecho de veto. Martínez Tristán fue "propuesto por el PP" y "los responsables de las propuestas son quienes las hacen", y el PSOE sólo se hace "responsable" de las suyas, argumentó.
"En nada afecta" a la recusación
La portavoz incidió en que la elección de Martínez Tristán "en nada afecta" con el proceso "ilegal" de privatización sanitaria Madrid y con la recusación, que el PSOE apoya –"igual que estamos juntos en todas las actuaciones que está llevando a cabo el PSM en defensa de la sanidad pública"–, y sigue "viva" por su vinculación con la consejera manchega Marta García de la Calzada. "La propuesta realizada para este órgano por el PP apuntaría y apuntalaría esta recusación en marcha".
En consecuencia, el PSOE votará no a favor de un juez, precisó, sino "a favor de un acuerdo, firmado por distintos grupos parlamentarios". "La responsabilidad política también se tiene cuando estás en la oposición. Cuando estás en el otro lado debes actuar de forma diferente", explicó Rodríguez.
Rodríguez dijo no esperar "ninguna indisciplina de voto". Los números, desde luego, juegan a favor de Rubalcaba. De los 10 diputados socialistas electos por Madrid, sólo una, Delia Blanco, es cercana a Gómez. Los otros nueve –Elena Valenciano, Antonio Hernando, Valeriano Gómez, José Enrique Serrano, Rafael Simancas, Ángeles Álvarez, Diego López Garrido, Pedro Sánchez y el propio Rubalcaba– son fieles a la dirección federal. Blanco fue preguntada por su intención de voto por este diario, pero no quiso hacer declaraciones.
¿Y en el Senado? El PSM dispone de tres escaños, uno electo, Enrique Cascallana, y dos designados por la Asamblea regional, Maru Menéndez y Tomás Gómez. ¿Dejará su acta ahora el líder del PSM y sus compañeros? "El compromiso que adquirió Tomás fue personal, y así lo explicaba en su carta, de modo que no involucra a otros parlamentarios. En cualquier caso, la lista va por el Congreso, no por el Senado, y él explicaba qué haría si pasaba por la Cámara alta", alegaron desde el entorno de Gómez. Es decir, que se apoyará la lista de 10 vocales que se vote mañana en el Senado (seis jueces y cuatro juristas).
PSM: la información "oficial" llegó después
Desde el PSM indicaron que supieron "oficialmente" que Martínez Tristán figuraba en el cupo a cargo del Congreso después de que Gómez remitiera la carta a Rubalcaba, "entre la noche del martes y esta mañana". Sin embargo, el Grupo Socialista en la Cámara facilitó los nombres y la Cámara que los iba a elegir formalmente en un mail enviado a los medios sobre las ocho de la tarde. Más aún, Gómez fue preguntado por los periodistas sobre unas declaraciones del consejero de Presidencia de la Comunidad de Madrid, Salvador Victoria, que afirmó que el líder del PSM ya sabía que no tendría que votar a Martínez Tristán antes de amenazar con dejar su acta. "El consejero de Presidencia miente", aseguró tajante. Gómez, de caminio, criticó el acuerdo PP-PSOE sobre la renovación del Consejo: "Esas formas de hacer política son formas del pasado, el futuro para este país tiene que ser diferente", sostuvo, informa Europa Press. Lo mismo que anoche en la Ser.
Fuentes socialistas relataron que fue Soraya Rodríguez quien telefoneó ayer, "sobre las dos de la tarde", a la número dos del PSM, Maru Menéndez, para informarle del acuerdo, "y ya entonces se le dijo qué jueces entraban y qué Cámara sería la encargada de votarlos". La distribución de qué jueces tocaban al Congreso y cuáles al Senado fue "meramente técnica", y "no tuvo que ver la presión de Gómez". "No se habría podido cambiar, de hecho". "Tuvieron la información antes de que se hiciese pública... Pero claro, las bravuconadas a veces se descubren", reprobaron. El Grupo Socialista siempre ha repetido que la negociación ha sido "dura" pero que la alternativa era cerrarse en banda y vetar, en cuyo caso, el PP, gracias al cambio en la Ley Orgánica del Poder Judicial promovido por el ministro Alberto Ruiz-Gallardón (y recurrida por el PSOE), podría designar por la vía rápida, sin consenso, a los 10 vocales que corresponden al Senado, pues allí disponen de la mayoría necesaria de tres quintos.
La votación en el Congreso será hacia las ocho de la tarde. La Mesa llamará a los 350 diputados y estos depositarán sus dos papeletas –la del turno judicial, con los seis nombres, y la del turno de juristas, con los otros cuatro– en dos urnas. No se podrá saber quién vota qué. Los parlamentarios pueden escribir en la primera cuartilla cualquiera de los 54 aspirantes designados por los jueces. Pero, dado el acuerdo de PSOE y PP, sólo saldrán elegidos los 10 conocidos. Del cupo de jueces y magistrados de carrera, Rafael Fernández Valverde, Carmen Llombart, Juan Martínez Moya, Francisco Gerardo Martínez Tristán (propuestos por el PP), Clara Martínez y Rafael Mozo (promovidos por el PSOE). Del turno de juristas, Nuria Díaz (PP), Álvaro Cuesta (PSOE), Concepción Sáez (Izquierda Plural) y Enrique Lucas (PNV).
IU no fue consultada "en ningún momento" sobre los jueces
Mañana, en el Senado, se votará a los diez restantes vocales. Jueces y magistrados son Wenceslao Francisco Olea Godoy, Juan Manuel Fernández Martínez, Fernando Grande-Marlaska –designados por el PP–, Roser Bach, Victoria Cinto y María del Mar Cabrejas (por el PSOE). Y juristas, Vicente Guilarte y María Ángeles Carmona (PP), Pilar Sepúlveda (PSOE) y Mercè Pigem (CiU).
Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) se desmarcará de hecho de la votación de los jueces acordados por PSOE y PP. Como explicó José Luis Centella, portavoz parlamentario del grupo, en rueda de prensa, no respaldarán a ninguno de los 12 magistrados apalabrados por los dos grandes partidos porque no están de acuerdo con ese reparto de poder en el que no han participado. IU-ICV-CHA apoyará sólo a los candidatos que se ajusten a su perfil de entre los 54 aspirantes avalados por los jueces. Izquierda Plural sí votará a los ocho juristas elegidos para el CGPJ, pues en ese diálogo sí intervino, aunque a última hora. Centella volvió a condenar los métodos "bipartidistas" utilizados por PSOE y PP y remarcó que su grupo no ha sido consultado "en ningún momento" sobre los nombres del turno judicial.
Todo apunta a que la polémica entre Ferraz y el Partido Socialista de Madrid (PSM) se queda en nada. Tomás Gómez, líder del PSM y senador, no tendrá que votar al juez Gerardo Martínez Tristán como vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) porque su refrendo pasará por el Congreso, y no por la Cámara alta. Deshecho el lío, se espere que apoye el pacto trenzado entre los dos grandes partidos y no deje su escaño, tal y como había amagado con hacer. Y, por otro lado, el PSOE no espera "ninguna indisciplina de voto" esta tarde, cuando la Cámara baja elija oficialmente a los diez miembros del órgano de gobierno de los jueces que le corresponde designar.