La Presidencia de Congreso y Senado en manos del PP ya es historia. Atrás quedó la mayoría absoluta de la legislatura 2011-2015. En esta, la que arrancó tras las generales del 20 de diciembre, el Partido Popular sólo dispondrá de la presidencia del Senado. Y el candidato vuelve a ser el mismo: Pío García-Escudero.
Según sostuvo Rajoy este martes ante la Junta Directiva Nacional del PP, "no hay un acuerdo cerrado". Pero, añadió que, en principio, "el PP tendría tres [puestos de la Mesa del Congreso], Ciudadanos, dos; el PSOE, dos y Podemos, dos". La Presidencia de la Cámara sería para el PSOE y para su partido la vicepresidencia primera y la secretaría primera.
Celia Villalobos, Ana Romero y Alicia Sánchez Camacho
ocuparían los tres puestos del PP en la Mesa del Congreso, Cámara que presidirá el socialista Patxi López.
"En el Senado, el portavoz [será] José Manuel Barreiro y el secretario Javier Arenas; y en el Congreso, el portavoz Rafael Hernando Portavoz y secretario José Antonio Bermúdez de Castro", añadió Rajoy. Continuidad con una única novedad, la de Javier Arenas.
Con este paso, Rajoy cumplía con los trámites de informar a la plana mayor del partido sobre los nombres que propondrá su formación este miércoles en la sesión constitutiva de sendas Cámaras.
Sólo un día después de las elecciones, cuando los conservadores vieron que su mayoría era muy raquítica, ya empezó a instalarse en el Partido Popular la idea de que presidir el Congreso de los Diputados era una competencia que tenía pocas papeletas de recaer sobre ellos. Pese a ello, el mensaje puertas afuera de todas estas semanas ha sido el de que les correspondía seguir ocupando ese puesto porque habían sido la formación más votada.
Ningún problema tendrá el PP, por el contrario, para retener la Presidencia del Senado, Cámara en la que sí retienen la mayoría absoluta.
Además de insistir en su mensaje respecto a Cataluña de los últimos días, Rajoy lanzó un mensaje en clave interna. "Vamos a convocar el Congreso Nacional del partido cuando se despeje la situación a nivel nacional, cuando haya un Gobierno. Después convocaremos todos los Congresos regionales y todos los Congresos provinciales en el periodo de tiempo más corto posible para, a partir de entonces, comenzar a continuar con lo que es la propia actividad partidaria. Creo que esto es lo más razonable, creo que es lo más ordenado y creo que es lo menos arriesgado y pido el apoyo de todos para esto".
Con estas declaraciones, Rajoy intenta lanzar un mensaje de continuidad. Y cortar esa tesis que apunta a que podría ceder su puesto a otro cargo del PP para facilitar su investidura. Estatutariamente, en el caso de convocarse nuevas elecciones Rajoy volvería a ser el candidato. Así quedó establecido en el XVI Congreso Nacional del PP de junio de 2008.
El proceso
El Congreso y el Senado resultantes de los comicios se constituirán el próximo 13 de enero, según quedó por escrito en el decreto de disolución de las Cortes y la convocatoria de los comicios aprobado por el Consejo de Ministros del pasado 26 de octubre. Esto ocurre un día antes de la fecha tope para que las Cámaras puedan echar a andar, ya que la normativa determina que tendrán que constituirse en los veinticinco días posteriores a la celebración de las elecciones.
Las sesiones constitutivas comenzarán a las 10 de la mañana. El primer paso será elegir a los miembros del órgano de Gobierno de Congreso y Senado. Será presidente la persona que obtenga la mayoría absoluta de los votos. Es posible que los sustitutos de Jesús Posada y Pío García Escudero no sean elegidos en la primera votación, si no se configuran pactos para formar una mayoría absoluta a lo largo de la tarde de este martes. Esto llevaría a una segunda ronda entre los dos candidatos que en cada Cámara hayan logrado más apoyos, en la que basta con la mayoría simple.
Acto seguido, los elegidos para integrar las Mesas ocuparán sus puestos y los nuevos presidentes solicitarán a los parlamentarios electos que juren o prometan acatar la Constitución.
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Pero todavía queda lo más complicado. Una vez constituidas las Cámaras, el presidente del Congreso informa al rey y éste abrirá una ronda de contactos con las formaciones que hayan obtenido representación parlamentaria para poder proponer al candidato a La Moncloa. Una vez decidido, se comunica el nombre al presidente de la Cámara baja para que busque fecha para el Pleno de investidura.
No hay un plazo fijo para la convocatoria de la sesión de investidura. La costumbre marca que tenga lugar unas dos semanas después de la constitución de las Cámaras, lo que nos llevaría a finales de enero o principios de febrero. En esa sesión, el candidato propuesto expone su programa y los demás portavoces parlamentarios hacen uso del turno de palabra.
El candidato resulta elegido si consigue la mayoría absoluta, ubicada en 176 escaños. Si no lo logra habrá una nueva votación dos días después. En esta bastará con mayoría simple (más votos a favor que en contra). Pero puede ocurrir que no quede solucionado ese día y que tengan que celebrarse más sesiones. En el caso de que transcurran dos meses sin investir presidente tendrían que convocarse nuevas elecciones.
La Presidencia de Congreso y Senado en manos del PP ya es historia. Atrás quedó la mayoría absoluta de la legislatura 2011-2015. En esta, la que arrancó tras las generales del 20 de diciembre, el Partido Popular sólo dispondrá de la presidencia del Senado. Y el candidato vuelve a ser el mismo: Pío García-Escudero.