Hepatitis C
Sanidad ofrece a las autonomías un préstamo a bajo interés para pagar los fármacos contra la hepatitis
No habrá una partida finalista para financiar los fármacos innovadores que son capaces de curar de forma definitiva determinados genotipos de la hepatitis C y cuya dispensación se ha limitado hasta la fecha por su alto precio.
El ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, informó este lunes tras reunirse con las autonomías de que el Ministerio de Hacienda pondrá a disposición de las comunidades una "solución de financiación" con préstamos a un bajo interés –de entre el 0 y el 1,2%– a devolver en diez años y que no compuatrá como déficit para que estas puedan hacer frente a los 727 millones de euros que costará tratar con los nuevos tratamientos a las 51.964 personas a las que da cobertura este plan y que son las que tienen una fibrosis hepática significativa, es decir, están entre los grados F2 (nivel moderado de cicatrices en el hígado producto de la inflamación) y F4 (cirrosis), que es el último grado.
El plan, según explicó el secretario de Estado de Hacienda, Antonio Beteta, contempla tres escenarios según los diferentes mecanismos de alivio financiero a los que se hayan adscrito las autonomías. Las que tendrán condiciones más ventajosas –interés cero durante tres años y a partir de entonces hasta llegar a diez al tipo medio del Tesoro, que ahora está al 1,2%– serán las comunidades que cumplieron con los objetivos de déficit, pago y deuda. En este grupo están Galicia, Asturias, La Rioja, Aragón, Castilla y León, Andalucía, Murcia, Extremadura, Baleares y Canarias.
En el segundo están las que no cumplieron con alguno de los tres requisitos anteriores y participan en el Fondo de Liquidez Autonómica (FLA). Estas sólo tendrán un año de interés cero y los nueve restantes al coste medio del Tesoro. Y en este grupo están Cataluña, la Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha, Murcia y Cantabria. Para Madrid y País Vasco, que no participan en ninguno de estos fondos, se dará la posibilidad de suscribir convenios bilaterales para beneficiarse de estas condiciones.
Después, tal y como detalló Beteta, el mecanismo será el siguiente. Las autonomías tendrán que encargarse de adquirir los medicamentos a las farmacéuticas, pero dentro de un acuero marco elaborado por el Ministerio de Sanidad y en el que se han establecido con los laboratorios unas condiciones de compra que redujeron de manera sustancial el precio de los tratamientos: de 43.500 euros de medias por tratamiento de 12 semanas a 14.000. Esto se consiguió pactado una compra por volumen, que reduce el precio de los tratamientos cuantos más se compren; un techo de gasto, que será de 727 millones de euros en los próximos tres años y una estrategia de riesgo compartido, que quiere decir que si el tratamiento no hace afecto a las 12 semanas, la farmacéutica tiene que encargarse de dispensar otro sin que eso suponga desembolsar ni un euro más.
Después, Hacienda evaluará “factura a factura” que las partidas que se inscriban en estas líneas financieras para garantizar que “van dirigidas a este fin”. Además, según informaron ambos mandatarios, los acuerdos de Sanidad con los laboratorios contemplan en algunos casos planes de pago –de los que no ofrecieron más detalles– pero que sí pueden posibilitar que no tengan que liquidar sus facturas pendientes cuando retiren los fármacos y que puedan abonarlas una vez que haya recibido el dinero prestado por Hacienda.
Los temores de Andalucía y Asturias
"Ha sido una reunión muy satisfactoria tanto para los consejeros que han venido a la reunión, que son los de Sanidad, pero también para los que no han asistido, es decir, para los de Hacienda", aseguró tras la reunión Alonso en una comparecencia ante los medios.
Sobre el temor –expresado por los afectados y también por las autonomías que están en manos del PSOE– de que el hecho de no tener un fondo finalista pueda convertir en papel mojado el plan de Sanidad para facilitar los tratamientos a los afectados más graves, Alonso dijo que el citado mecanismo "garantiza que todos los pacientes que reconozcan los clínicos tengan acceso a los tratamientos" con los antivirales de nueva generación.
Los consejeros de Andalucía y Asturias expresaron que tienen todavía cierta preocupación porque según dijo la andaluza María José Sánchez Rubio la "responsabilidad" sigue recayendo sobre las autonomías que son, señaló, las que seguirán "soportando el gasto". En este sentido, lamentó que el plan de financiación no prevea un fondo específico sino que sea un “compromiso de deuda” que, en su caso, deberá ser estudiado por la Consejería de Hacienda de la Junta de Andalucía para conocer de manera exacta “cuál va a ser la repercusión".
Su homólogo asturiano, Faustino Blanco, dijo que el encuentro le deja “preocupado” pero contento a la vez porque considera que se ha producido un “avance”. El consejero catalán, Boi Ruiz, señaló, por su parte, que aunque no está de acuerdo en el sistema adoptado –"es pan para hoy hambre para mañana", aseveró– reconoció que sí posibilitará que los afectados puedan ser atendidos de forma rápida.