Así de sencillo es hablar (en broma) con Rajoy

El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, cayó este jueves en una broma telefónica que le gastaron desde el programa El Matí i la mare que el va parir, de la emisora radiofónica catalana Ràdio Flaixbac. Durante un minuto, el líder del Ejecutivo pensó estar hablando directamente con el president de la Generalitat, Carles Puigdemont: "Nos conocimos allí inaugurando el AVE en Girona, cuando era usted alcalde", llegó a decir el conservador durante la conversación, justo después de preguntarle al nuevo jefe de Gobierno autonómico "¿Cómo va la vida?".

Tras unos segundos de cortesía, el imitador le deja caer la posibilidad de una futura reunión, "ahora que hay otro interlocutor (en Cataluña)... para empezar con buen pie", a lo que Rajoy se muestra dispuesto a concertar una cita a partir del día 25 de enero: "Como tengo la agenda muy libre, nos podemos ver en 24 o 48 horas", afirmó. Después, el conductor del programa, Carles Pérez, decide finalizar la broma mostrando su sorpresa: "Nosotros no pensábamos que iba a salir. Estamos quizá tan sorprendidos ahora mismo como usted", apunta. "Esto no es serio", se limitó a responder Rajoy soltando una pequeña carcajada.

"No tenemos ningún teléfono especial"

"Queremos dejar claro que no tenemos ningún teléfono especial, ni ningún otro contacto dentro de Moncloa", explica el conductor del programa matinal en conversación con infoLibre. Pérez asegura que siguieron "una serie de filtros" hasta que para su "sorpresa" les atendió el líder del Ejecutivo. "Creo recordar que pasamos cuatro o cinco filtros", afirma. En la grabación se escucha que se ponen en contacto con el Ministerio de la Presidencia y, tras presentarse como Marc Casanova, supuesto adjunto a la Consejería de Presidencia de la Generalitat, la persona que atiende el teléfono remite la llamada a la secretaría de Presidencia, donde aseguran que el líder del Ejecutivo está "ocupado" pero que "no va a tardar mucho".

El locutor apunta a este diario que "contactar con personajes famosos es, normalmente, difícil". "Creo que estábamos en el momento oportuno y en el sitio indicado. Ha sido una casualidad de un calibre impresionante", señala. Desde Moncloa confirmaron la broma y dijeron que el presidente español está dispuesto a hablar con el líder del Ejecutivo autonómico, aunque no será él quien tome la iniciativa para una futura cita. El PSOE, por su parte, lamentó que la charla no se produzca y criticó que se hagan bromas con un tema "tan serio", mientras que desde Ciudadanos consideraron una "irresponsabilidad" el "banalizar" algunos asuntos.

Pero, ¿es tan fácil contactar con el presidente del Gobierno español? Desde el Ministerio de la Presidencia señalan a infoLibre que "los filtros son los mismos que en otros ministerios" ante "las llamadas institucionales". Cuando se trata de este tipo de comunicaciones, en referencia a las que se realizan entre instituciones, "es más fácil hablar con Rajoy de lo que uno se piensa", explica. Según detallan a este diario, existen tres formas de ponerse en contacto con el presidente: a través de la centralita, llamando directamente al despacho o marcando a su número de móvil. El presidente del Gobierno ya mostró el pasado mes de septiembre, en El Programa de Ana Rosa, los teléfonos que tiene a su disposición en su despacho de La Moncloa: "Este descuelgas y ya te pasan a cualquiera", otro de color blanco y un tercero, de color negro, que le comunica directamente con los ministros y jefes de Estado de varios países.

"Broma lamentable y deleznable"

El periodista Juan Luis Cano, presentador de Ya veremosYa veremos en M80 Radio y copresentador del programa Gomaespuma en Onda Cero, considera que la broma "es lamentable y, periodísticamente, deleznable", añadiendo a renglón seguido que "no tiene mérito". El humorista rechaza que se "hagan pasar por otra persona" en estos casos: "Nosotros nos presentábamos siempre que llamábamos", explica sobre sus famosas entrevistas a personajes famosos a los que se llamaba en directo sin previo aviso. Preguntado por las bromas que ellos hacían en su programa radiofónico, cuenta a este diario que fueron "los únicos en hablar con Pinochet cuando se encontraba en Londres": "Nos enteramos del hotel en el que se encontraba y llamamos todos los días, siempre sin éxito. Sin embargo, en uno de esos intentos nos pasaron con él", relata.

Cuestionado por la facilidad para hablar con personajes públicos, el humorista asegura que ha sido sencillo porque se han hecho pasar por otra persona. "Si dices que eres Puigdemont, estando las cosas como están, y con una buena imitación, pues seguramente te acabe respondiendo el presidente", concluye.

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El rey Juan Carlos, Hugo Chávez o Fidel Castro

Mariano Rajoy no ha sido el único mandatario al que han gastado bromas de este tipo. Así, en 2011, el programa Tot és molt confús, de Catalunya Ràdio, logró hablar directamente con el rey Juan Carlos tras superar todos los filtros haciendo creer que era el entonces president de la Generalitat, Artur Mas. Aunque no se llegó a emitir la conversación, en la que el locutor felicitó al monarca por su cumpleaños, la Casa del Rey reforzó los controles para que ninguna llamada que procediese de un número no identificado superase las barreras. La COPE, por su parte, levantó ampollas unos años antes al hablar con el presidente de Bolivia, Evo Morales, haciéndose pasar por el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero.

También fueron muy sonadas las bromas que se hicieron desde el programa El vacilón de la mañana, de la emisora El Sol, a dirigentes latinoamericanos. En 2003, utilizando cortes de voz del líder cubano, Fidel Castro, consiguieron ponerse en contacto con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, al que pidieron que saliese del país y llamaron "cabrón, terrorista, animal, asesino". Meses después, y utilizando la misma estrategia pero a la inversa, lograron comunicarse con Castro. "Caíste al igual que Hugo Chávez", le dice uno de los locutores, a lo que el presidente de Cuba respondió cabreado: "¿En qué caí, come mierda? ¿En qué caí, mariconzón? ¡No he oído nada de este par de coños de su madre!".