El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, aseveró este lunes que ser leal "no es siempre tocar las palmas al líder del partido", sino que a su juicio "es decir lo que uno piensa dentro de la lealtad a la organización".
"Cuando a mi me han necesitado, yo he estado siempre dispuesto a ayudar", aseveró Fernández Vara en una entrevista en el programa Espejo público de Antena 3, recogida por Europa Press, sobre las diferencias de criterio de algunos barones socialistas respecto a la actuación del partido.
En su opinión, "el problema del PSOE no es que haya ahora mismo diferencias ideológicas", sino que según dijo, "es más bien diferencias entre los que tenemos responsabilidades de gobierno porque hemos ganado unas elecciones, y los que no tienen responsabilidades de gobierno".
Así, "es cierto que hay gente que opinamos de una manera y gente que pueda opinar de otra", tras lo que reiteró que "no es un problema de matices, ideológico", sino del "lugar en el que los ciudadanos nos han situado a cada uno".
Dos meses sin hablar con Sánchez
"Yo desde el minuto uno he intentado ser absolutamente leal a Pedro Sánchez mientras quiso que le fuera leal, es decir, mientras hubo diálogo y mientras ha habido cercanía y proximidad", señaló Fernández Vara tras reconocer que lleva dos meses sin hablar con el secretario general del PSOE.
Según Vara, "no es bueno para nadie que no haya un diálogo fluido" entre ambos, aunque consideró que "es una responsabilidad compartida", ya que "él tiene mi teléfono y yo tengo el suyo".
En cualquier caso, reafirmó que va "a seguir siendo siempre leal al secretario general", tras lo que ha aclarado que "la lealtad no es siempre tocar las palmas al líder, es decir, tocar las palmas al líder no es serle leal, sino decir lo que uno piensa dentro de la lealtad a la organización, que es en definitiva a quien uno tiene que tener la lealtad", dijo.
Y es que, según lamentó, se ha "llegado a un punto en España en el que parece como si el que hablara tuviera que ser necesariamente denigrado", tras lo que aseveró que "aquí todo el mundo es leal si se calla, pero si dice lo que piensa intentando defender los intereses de cuanta más gente, parece que no es leal".
"A gorrazos"
Vara se quejó de que "lo que está pasado aquí es algo absolutamente inaudito", ya que "cada vez que alguien abre la boca, se le corre a gorrazos", tras lo que lamentó que se ha "perdido la capacidad de ser críticos", cuando "ser de izquierdas significa ser críticos".
"Ser críticos con los demás y ser críticos con uno mismo: ser de izquierdas significa replantearse permanentemente las cosas", aseveró el presidente extremeño.
Reunión del comité federal
Por esto Fernández Vara reclamó la reunión del Comité Federal del PSOE, con el objetivo de "poder decir en libertad lo que uno piensa", así como analizar "cuáles son las consecuencias, para el país y para el partido, de que haya unas terceras elecciones en España", dijo.
"Tengo la necesidad de expresarlo, porque me da que es una situación nueva que tenemos que hablar y discutir entre nosotros", señaló Vara, quien rechazó que tengan que recogerse firmas para convocar este Comité Federal: "si esto lo vamos a resolver teniendo que pedir firmas para reunirnos, no tenga ninguna duda de que las firmas se conseguirían, pero ese no es el camino".
A su juicio, "el camino es que después de una nueva realidad, después de una nueva situación de investidura fallida de Rajoy en el que el reloj ha empezado a contar", reivindicó su "oportunidad de hablar con los compañeros para que valoremos las consecuencias que eso puede tener para nuestra organización, pero sobre todo para España".
Y es que, según alertó, en la actualidad "todo el mundo tiene claro" el no del PSOE a la investidura de Mariano Rajoy, que "es la posición que el Comité Federal tenía", tras lo que se preguntó: "¿Tenemos algún sí para los ciudadanos? sí, porque eso es algo que los ciudadanos se estarán preguntando".
A juicio del presidente extremeño, "un proyecto político no se puede construir solo en la negación de lo contrario", sino que "se debe construir también en la afirmación de lo propio", ante lo que se preguntó: "¿hay plan B?".
"¿Tiene España y sus partidos algún plan B para este país? porque el plan A de todo el mundo ya lo conocemos", se preguntó Fernández Vara, tras lo que consideró que "algún plan B tendrá que haber en este país".
En ese sentido, el presidente extremeño aseveró que en el caso del PSOE, "no será el plan B de Pedro Sánchez, tendrá que ser el plan B del partido, de la organización", y recordó que la política de pactos y de acuerdos la "decide el Comité Federal del partido", que es donde se decide, "y no en el Twitter".
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"¿Nuestro proyecto de futuro va a seguir siendo 'no, no y no', o vamos a plantearnos delante de los ciudadanos como un proyecto de mayorías, un proyecto social de mayorías?", cuestionó Fernández, quien aseveró que para eso "hay que salir a buscar a esas mayorías, hay que salir a los electores".
Vara lamentó que la "dinámica del sorpasso condenó" al PSOE a que los ciudadanos les "vieran como perdedores", al ver "quien queda segundo", lo que supone "una dinámica absolutamente diabólica", y ante la que el PSOE debe a su juicio "defender lo que ha defendido siempre: un proyecto de progreso, moderado, alejado de cualquier radicalidad e integrado en el conjunto de España".
Vara recordó que lo que han dicho los ciudadanos tanto en diciembre como en junio "era que había que hablar", ya que el resultado fue "un escenario de cuatro partidos, dos solo no suman", por lo que "hay que hablar al menos con tres", por lo que "si no se habla, difícilmente se podrá resolver".
El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, aseveró este lunes que ser leal "no es siempre tocar las palmas al líder del partido", sino que a su juicio "es decir lo que uno piensa dentro de la lealtad a la organización".