Jenn Díaz apuesta por un viaje íntimo y sencillo. La escritora, que publicó su primer libro tan solo un año después de encontrar su vocación en la literatura, convirtiéndose a sus 28 años en una reconocida autora, busca recuperar el tiempo perdido que no ha podido vivir junto a Dani, su marido, con el que desea poder pasar unas vacaciones a solas. Confiesa que su respuesta, quizá, es demasiado “personal”, pero no duda en que sería su opción si pudiera regalar un billete de avión.
Muchas veces, el trabajo impide estar junto a las personas que quieres, y eso precisamente ha sido lo que no ha dejado a Díaz pasar el tiempo que necesita junto a su pareja. Al igual que la inspiración de sus novelas gira entorno a la familia, desde la cual “salen al exterior” todos sus personajes –según contaba ella misma en una entrevista en El Cultural–, su inspiración para contestar a la pregunta que plantea infoLibre en su sección ¿Ventana o pasillo? también parte de ahí. “Le compraría un billete de avión a Dani, mi marido, porque siempre que hemos viajado juntos ha sido por trabajo: o él tenía que viajar a algún sitio y yo me he sumado, o al revés”, afirma. Sin embargo, cuando no ha sido por trabajo, tampoco han tenido la oportunidad de vivir un viaje largo en solitario: “Los viajes que hemos hecho que no han sido de trabajo siempre han sido de fin de semana”, y, “cuando ha sido más de un fin de semana y no por trabajo”, ha sido acompañados.
La autora de obras como Madre e hija (Destino, 2016) o Es un decir (Lumen, 2014), se decanta por una isla como destino, quizá “Madeira, Formentera o Fuerteventura”, para realizar ese viaje que, aunque sencillo, tiene pendiente desde hace tiempo.
Y en la vida real…
Quizá el deseo de Jenn Díaz (Barcelona, 1988) tenga que esperar un poco más, porque la escritora se encuentra completamente inmersa en su profesión. Según cuenta, siempre dedica el verano a escribir, porque “en agosto el sector literario se adormece, y ya nadie necesita ni columnas, ni transcripciones, ni relatos, ni reseñas”. “Paso todo el año a ritmo de entrega de proyectos, y cuando se va acabando julio, empiezo a escribir. Ahora estoy escribiendo relatos”, confiesa.
Desde 2011, cuando se dio cuenta que su verdadera vocación era la literatura y no la Filología —carrera que empezó y abandonó—, su actividad literaria no ha cesado. Ese año, con tan solo 22 años, publicó su primera novela, Belfondo (Principal de los libros), catalogada por varios críticos como una expresión del neorruralismo del siglo XXI.
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Jenn Díaz es una de las escritoras españolas más destacadas de la generación de los autores nacidos en la década de los ochenta. Entre sus referentes se encuentran reconocidas literatas españolas como Carmen Martín Gaite o Ana María Matute, y la italiana Natalia Ginzburg.
Ha participado en dos antologías: Última temporada. Nuevos narradores españoles 1980-1989 (Lengua de trapo, 2013), en la que aparece su relato "El vuelo del moscardón"; y en Bajo treinta (Salto de página, 2013). Con solo 28 años, ha publicado cinco libros, el último de los cuales es Madre e hija (Mare i filla en el catalán original).
Además, colabora en medios como Jot Down o el fanzine feminista Matrices.
Jenn Díaz apuesta por un viaje íntimo y sencillo. La escritora, que publicó su primer libro tan solo un año después de encontrar su vocación en la literatura, convirtiéndose a sus 28 años en una reconocida autora, busca recuperar el tiempo perdido que no ha podido vivir junto a Dani, su marido, con el que desea poder pasar unas vacaciones a solas. Confiesa que su respuesta, quizá, es demasiado “personal”, pero no duda en que sería su opción si pudiera regalar un billete de avión.