“Lo tengo claro: querría ir a la Roma que retrata Paolo Sorrentino en La grande bellezzaLa grande bellezza”. La escritora Marta Sanz se reencuentra con las calles que el cineasta italiano plasmó en el filme de 2013, ganador de un Óscar en la categoría de mejor película extranjera.
Sanz se decanta por “un tour a través de los rincones de esa Roma, empezando desde luego por la magnífica fiesta en la terraza”. Aquella fiesta es sólo el inicio de otras muchas que llenan la película de depravación y desenfreno, pero que esconden la profunda e inmensa decadencia de una alta sociedad que se refugia en lo banal para ocultar sus frustraciones y sus miedos.
Jepp Gambardella, el protagonista, es un hombre de 65 años que toda su vida ha nadado en la abundancia y cuya existencia se reduce a excesos, paseos nocturnos por la capital, y la nostalgia de una Roma que se abrió ante él como la capital de lo mundano. Toni Servillo, quien da vida al protagonista, dijo tras el estreno de la película que “Jepp tiene una melancólica indiferencia que le lleva a desperdiciar su talento”. El cínico escritor y periodista arrastra una cadena de derrotas maquilladas bajo la apariencia del lujo y la opulencia.
La grande bellezza es un poema demacrado y hermoso que desentierra las miserias más profundas del hombre frívolo; una reflexión sobre la vida y la muerte, sobre el amor, el pasado, y sobre el ruido constante como consecuencia del miedo. La Roma que describe Sorrentino, con una estética cautivadora y una fotografía magistralmente cuidada, es el escenario imprescindible para esta historia, del mismo modo que lo fue para Fellini en su Dolce Vitta o en Ocho y medio. La misma Roma que es “una combinación entre lo bello y lo decadente, y donde me quedaría a vivir siempre”, explica Marta Sanz, quien confiesa además su debilidad por una ciudad “donde hay tanto que ver y hacer”.
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Y en la vida real…
La escritora está pendiente de la publicación de un poemario, además de una novela que ya ha entregado a Anagrama. “Pero por el momento no sabemos en qué fechas verán la luz”, explica.
Marta Sanz cuenta con una extensa trayectoria como escritora. Ha sido finalista del Premio Nadal en el año 2006 con su novela Susana y los viejos. Con Los mejores tiempos (2001) recibe el premio Ojo Crítico de Narrativa, y su novela más reciente, Daniela Astor y la caja negra, ha sido galardonada con premios como el Tigre Juan o el Álamo. Además, también ha publicado dos poemarios y un ensayo. En la actualidad colabora habitualmente con el diario El País.
“Lo tengo claro: querría ir a la Roma que retrata Paolo Sorrentino en La grande bellezzaLa grande bellezza”. La escritora Marta Sanz se reencuentra con las calles que el cineasta italiano plasmó en el filme de 2013, ganador de un Óscar en la categoría de mejor película extranjera.