Owen Jones asegura que la “élite política” española ha perdido “la legitimidad moral”

El analista y ensayista político Owen Jones (Sheffield, 1984) cree que la "élite política" española ha perdido "la legitimidad moral" y, por ello, calificó de "históricas" las elecciones del 20-D, tanto para España como para Europa.

En rueda de prensa, antes de pronunciar una conferencia en el Paraninfo de la Universidade da Coruña (UDC), en un acto organizado por En Marea, Jones defendió que la izquierda europea debe "aprender" del modelo de Podemos.

"Podría ser un peligro el hecho de no tener éxito", dijo al alertar contra "los partidos populistas xenófobos de derechas". Respecto a estos últimos, se congratuló de que no tuvieran "el éxito que esperaban en Francia", en alusión al Frente Nacional.

Sobre Podemos, el autor de obras como Chavs. La demonización de la clase obrera considera que "una de las claves" de su éxito es "la manera de plantear la comunicación". Así, defendió que los temas que afectan a los ciudadanos deberían abordarse "de una manera convincente, una manera coherente y un idioma que la gente pueda comprender".

Ruptura del bipartidismo

"Podemos es una nueva forma de comunicación que puede resonar en la gente de una manera diferente", recalcó. De esta formación, destacó también que, en año y medio, haya logrado "romper el sistema de bipartidismo español". "Ahora conseguir una docena de escaños en el Parlamento sería algo insólito, algo así no ha sucedido en ningún otro país de Europa", insistió.

Mientras, cuestionó la política de los partidos tradicionales de la socialdemocracia. De ellos, dijo que tienen "muy poco que decir ya". "Aceptaron las reglas del libre mercado, la austeridad e incluso las políticas que van en contra de quienes los apoyan", apuntó Owen Jones.

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Por otra parte, defendió la necesidad de unirse "más allá de las fronteras". "Si no, seremos derrotados", advirtió. En la misma línea, defendió la necesidad de "establecer coaliciones que sirvan a los intereses de ambas clases", apuntó en alusión a los trabajadores y la clase media.

Por otra parte, arremetió contra la corrupción que no considera que sea solo un problema de España. "En Gran Bretaña hay casos que legalmente no son corrupción, pero sí moralmente", indicó.

Así, denunció el hecho de que "grandes firmas contables vayan al Gobierno para ayudar a diseñar la legislación fiscal, pero luego digan a sus grandes clientes cómo esquivar esa legislación", citó como ejemplo.