“No queremos este anteproyecto, y se lo decimos también a las mujeres jóvenes, porque lo que hoy estamos peleando aquí, va a servir para mañana. Y el mañana es de ellas”. Las palabras salen de boca de una de les Comadres, una de las mujeres que participan en la decana tertulia feminista asturiana. Pero el sentimiento es compartido: por todas ellas y por miles y miles de personas a lo largo y ancho de todo el país.
El anteproyecto de reforma de la ley del aborto, propuesto por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, ha dejado estupefactos e indignados a muchos, y sobre todo, a muchas. Entre ellas, a numerosas cineastas, que han aunado fuerzas para producir el documental Yo Decido. El tren de la libertad. La película, que se estrenó ayer en un centenar de salas de cine, puede verse desde hoy en Internet, también desde la web de infoLibre.
A partir de una iniciativa de la directora Chus Gutiérrez, a cuyos oídos llegó la intención de las comadres de viajar a Madrid para protestar contra la nueva ley, que retrotraerá los derechos de las mujeres a un tiempo anterior a 1985, dos centenares de profesionales de lo audiovisual se sumaron a este proyecto. El filme documenta el viaje en tren a la capital de las feministas asturianas y otros cientos de mujeres de diferentes puntos de España, que convergieron en Madrid el pasado 1 de febrero en una multitudinaria manifestación bajo el nombre de El tren de la libertad.
Ver másEl Tren de la libertad prosigue su viaje
A esta convocatoria se sumaron otras iniciativas paralelas en distintas ciudades europeas y latinoamericanas, como París, Roma, Edimburgo o Buenos Aires, donde también se grabaron sus protestas. La llamada de Gutiérrez, que convocó a todos sus contactos para realizar una película en conjunto, fue respondida por mujeres cineastas como Icíar Bollaín, Inés París, Patricia Ferreira, Gracia Querejeta, Ángeles González-Sinde, Almudena Sánchez, Juana Macías, Almudena Carracedo, Isabel Coixet o Teresa Font, además de montadoras, técnicos de sonido y otras profesionales del cine.
Además de los testimonios de las organizadoras y de mujeres y hombres que participaron en las protestas, el filme incluye el recuerdo de otras actividades paralelas que se han venido realizando desde que se hizo público el anteproyecto de reforma de ley, que está previsto que pase próximamente por el Congreso.
Iniciativas como la inscripción del propio cuerpo en el Registro Mercantil o la creación de una agencia de viajes ficticia para abortar fuera de España aportan aún más fuerza al relato de una lucha que todavía no ha concluido. “Creo que las generaciones a la nuestra se han encontrado las cosas hechas, y creen que el mundo es así”, advierte una de las comadres en la película. “Nosotras tuvimos que luchar con uñas y dientes por lo que conseguimos (…). Pero lo estamos viendo: el retroceso es brutal”.