La presidenta del Santander, Ana Botín, ha explicado que Popular se mantendrá en principio como una filial de la entidad, pero la idea es que se produzca una integración entre ambas entidadesintegración más adelante.
"En este momento se mantiene como una filial. La idea es que se integre y haya integración entre Santander y Popular", ha apuntado la primera ejecutiva de la entidad durante la rueda de prensa convocada para explicar el proceso de compra.
El consejero delegado de Santander, José Antonio Álvarez, ha añadido que la entidad ejecutará la fusión con Popular cuando haya cumplido los requisitos "necesarios para ello". "Vamos a un proceso de fusión", ha dejado claro.
Santander nombrará un consejo compuesto por cinco miembros, dos de los cuales serán independientes, que se encargará de supervisar la actividad de Popular. Este consejo estará dirigido por José garcía Cantera, director financiero del Santander.
Un mes para ampliar el capital
Botín ha informado de que la ampliación de capital de 7.000 millones que efectuará la entidad con objeto de reforzar sus niveles de capital para acometer la absorción se efectuará en el plazo aproximado de un mes.
Botín ha precisado que la ampliación de capital se destinará a recapitalizar y sanear el balance de Banco Popular, que cuenta con 36.800 millones de euros en activos improductivos, la mayoría de ellos ligados al sector inmobiliario. Botín ha animado a los accionistas del banco cántabro a suscribir la ampliación de capital, que cuenta con derecho de suscripción preferente.
Como parte de la operación, Banco Santander efectuará provisiones por importe de 7.900 millones de euros, de los que 7.200 millones se detinarán íntegramente a elevar la cobertura sobre los activos inmobiliarios. Estas provisiones tendrán un impacto neutral sobre los ratios de capital del grupo.
A este respecto, Botín ha anunciado también que en un plazo aproximado de 18 meses el Santander se desprenderá de la mitad de la cartera inmobiliaria del Popular.
La directiva ha señalado que la primoridad ahora son los cuatro millones de clientes del Popular, a los que ha dado la bienvenida al Santander.
Ha advertido de que proceso de integración, que estará pilotado por los primeros espadas de la entidad en España, Rami Aboukair y Rodrigo Echenique, "llevará un tiempo", pero que "nada cambiará" para los clientes del Popular, que tendrá a su disposición "las mismas sucursales y el mismo nivel de servicio".
"La compra de Popular encaja en nuestros objetivos estratégicos y financieros. Nos permitirá crear la entidad líder en España y Portugal", ha enfatizado Botín, resaltando la alta complementariedad de ambos bancos. En este sentido, ha señalado que la entidad presidida por Emilio Saracho le proporcionará un "complemento" tanto en zonas de España como en tipo de negocio.
"No hemos recibido presiones de nadie"
La presidenta de Santander ha rechazado que la entidad haya recibido presiones por parte de las autoridades para acometer la compra de Popular y ha explicado que el banco no presentó ninguna oferta en el proceso de venta abierto hace unas semanas.
"No hemos recibido presión de nadie", ha señalado Ana Botín. Según ha dicho, el banco que dirige actúa "siempre en interés" de sus accionistas.
Botín ha explicado que Santander no presentó ninguna oferta en el proceso de venta abierto por Popular hace unas semanas y que, al considerar las autoridades europeas que el futuro de Popular era inviable sin acometer una intervención, la entidad fue invitada este mismo martes a presentar una oferta.
"Teníamos información por el proceso anterior y hemos hecho una valoración que tenemos la confianza de que es correcta y nos dará retornos", ha añadido.
La presidenta del Santander, Ana Botín, ha explicado que Popular se mantendrá en principio como una filial de la entidad, pero la idea es que se produzca una integración entre ambas entidadesintegración más adelante.